Abhir está ensalsao y La Paqui lo notó. El artista canario transmite una confianza insuperable, insultante incluso. Su rol en la música es creer firmemente que es el mejor. Brown Boy es un todo o nada del que todo el mundo saca algo. “Tengo la sensación de que este va a ser el mejor show de mi vida”, aseguró antes de empezar. Si los conciertos se miden en energía, sí lo fue.
El 2023 de Abhir Hathi fue salvaje. El cantante canario rompió todos sus esquemas musicales y arriesgó con un disco que ha cogido a todo el mundo con el pie cambiado. Y acertó. Brown Boy transmite una energía inspiradora que solo se ve en genios como Yeezus o M.I.A. Una potencia que ha arrollado la sala La Paqui de Madrid en dos fechas sold out consecutivas y que hará cabalgar al elefante canarión por toda España.
Si una palabra define su espectáculo es comunión. El público se muestra entregado desde mucho antes de empezar con el show que va a vivir y los pogos que va a iniciar. Un baile salvaje que ya se ha convertido en tradición en la mayoría de conciertos pero que con Brown Boy alcanza su máximo esplendor. El propio artista se ve obligado a avisar antes de comenzar que las personas con lesiones y problemas respiratorios se aparten a un lado por su propia seguridad. Ready como nunca para cabalgar, todos sabemos a lo que venimos.
La euforia se desata con la aparición de una bailarina india y los primeros compases del combo Shanti-Bangladesh. “Se nota que comprasteis la entrada los primeros”, reconoce Abhir al entregado público que llenó el viernes por la noche La Paqui, que a pesar de ser la segunda fecha del tour fue la primera que salió a la venta. El canario declaró su amor por sus fans reconociendo que “Madrid es mi segunda casa”. Quizás la ciudad donde más ha triunfado su aplaudido cambio de registro.
La gente siguió botando a muerte con 6 anillos antes de calmarse un poco y reflexionar con las intimistas Muzik 2 ride 2 y GC-1, con una magnífica aportación vocal de Dwara y la esperada aparición del productor del disco, Saint Lowe. Cerró después el ciclo tranquilo con Reflejos y Habibi (‘mi amor’ en árabe), dos temas pertenecientes a su anterior trabajo (Lazos y nudos), de sonido melancólico y puro R&B, y que tienen un hueco especial en el corazón de Abhir. La primera por ser la canción que le hizo estar donde está ahora, según desveló emocionado, y la segunda por la dedicatoria especial a su pareja, Gema Castellanos. La modelo es una de las mayores inspiraciones del artista y protagoniza todas las fotografías que componen los visuales de la canción. “Gema está en Milán, se está despertando a desfilar/Hasta que no camine un tema mío yo no voa' parar”, canta en Abel. Ojalá os quieran siempre a todxs con la misma fuerza.
Después de este momento íntimo comenzaron a aparecer las sorpresas, aunque para los que nos comimos todos los spoilers del show del jueves en X no lo fueron tanto. La ausencia de West Dubai en Yallah decepcionó un poco a la sala, pero lo superó gracias a Quevedo, Juicy Bae, Ébano y Cruz Cafuné, con el que repitió el icónico trend de TikTok del outro de Hottest.Young.Men.in.Bizness. Todo el mundo botó a muerte con los canarios.
La sala se emocionó hacia el final del concierto con la emotiva dedicatoria de Abhir a sus padres al sonar Bombay a Las Palmas. Ellos, orgullosos, contemplaban desde la planta de arriba cómo su hijo honraba sus raíces indias y les daba las gracias por su color, su cultura y sus orígenes. Un resumen perfecto de lo que es en el fondo Brown Boy, que se sintetiza con una frase de Alyx: “Una vida complaciendo es una infeliz”.
Abhir abrazó del todo su cambio, su ascendencia y su misión. Caminó decidido hacia ella. Él mismo reconoció en un Cypher Lyrics que necesitaba arriesgar. Arriesgar todo lo que no había arriesgado en el pasado por pensar demasiado. El pecado del overthinking. Se la jugó y acertó. Pudo notarse esa rabia, esa furia y ese orgullo de haber conseguido su propósito artístico en el salvaje último pogo del concierto, con Go Getter a todo meter y una sala entregada al feroz baile de elefantes de La Paqui.
