Choclock

Tienen casi la misma importancia que la música que hago. Aparte de ser una herramienta para mantener a la gente informada sobre en qué ando metido, también es una manera de que me conozcan un poco más y que puedan interactuar conmigo para que se sientan parte del viaje. Pero tampoco lo pienso demasiado, hago memes y me río de mí mismo. Con el tiempo he descubierto que el humor es la forma más natural que tengo de relacionarme con mi público y ellos lo han entendido perfectamente. Es mi manera de quitarle hierro al dramatismo que a veces tiene mi música, y creo que ese contraste que existe entre cómo me expreso en mis canciones y cómo lo hago en redes es muy clave para terminar de conectar con la gente.

Es una locura el talento que hay en las islas y para mí es un orgullo muy heavy formar parte de este movimiento. Creo que tengo dos roles muy marcados dentro de la escena, uno más general como productor y otro más concreto como artista.
A nivel de mi carrera como solista intento aportar a la escena una esencia más RnB y con una estética que no se destila tanto en las islas. Creo que en ese sentido, mi propuesta es algo que no hace nadie más y es lo que más tranquilo me tiene, quiero que mi proyecto sea único y que no se me tenga que comparar con ningún otro dentro de la escena.

Mi papel como productor es algo muy distinto, muchas veces mi aportación ha sido crecer dentro de un proyecto, me gusta poder formar parte de la creación de un sonido, como pasó con Maracucho bueno muere chiquito de Cruz Cafuné o Lazos y nudos de Abhir Hathi, son proyectos en los que me vi muy involucrado y en los que me he sentido como una pieza clave de lo que es el sonido de esos álbumes. Al mismo tiempo, estoy metido en otros proyectos más orientados al reggaeton como lo que está preparando Dawaira o incluso al indie como todo lo que se viene de San Tosielo.
En ese sentido, la faceta de productor es más entretenida porque tengo muchas más propuestas donde adentrarme e investigar, pero sí es verdad que a ojos de la gente no le quiero dar tanto bombo porque estoy muy centrado en mi carrera como cantante y quiero que se me perciba como tal, no como ‘el productor de X artista’.

La dirección creativa, sin duda. En 2021 tuve el placer de formar un equipo creativo para este proyecto con Cicuta Films (Aitana Sáinz) dirigiendo todos mis vídeos, Rubens Ziontifik como diseñador gráfico y Valerie Moso en la dirección de arte.
Esta, para mí, ha sido la decisión más clave que he tomado en el proyecto, porque a nivel musical he trabajado con los de siempre (Lex Luthorz, Govea La Firma, Blurred Mirror, etc.) y se da por hecho que todo va a ir bien, pero la música no lo es todo, es muy importante cómo la presentas al mundo. Y de esto justamente se han encargado ellos, definiendo una estética, estilismos, el tono de los videoclips... Todo esto le ha dado una continuidad y una solidez al proyecto a nivel visual que creo que tiene el mismo peso que la música.
Mención especial a Rubens Ziontifik por esa portada loquísima que se le ocurrió, donde no solo se pegó el curro de hacer el tarro de miel con mi cabeza dentro, sino que además la tipografía que aparece la hizo a mano con miel… Es un puto jefe. También tengo que darle un shoutout muy grande a Cicuta Films que se ha encargado tanto de la dirección como de la producción de casi todos los vídeos, muchas veces conceptualizando las ideas de los clips y dándome una nueva imagen con la que me siento mucho más cómodo.
Más adelante se ha unido más gente como Adrián Biyang en los estilismos, Claudio Oca en la dirección de foto, Changhon Lu operando cámara… Y muchísima peña que se ha involucrado a muerte en el proyecto y a los que les debo la vida porque sin ellos Magua con miel no hubiera sido lo que es a día de hoy.

Cuando empecé a preparar este disco tenía claro que quería bajarle dos puntos a la intensidad. La etapa en la que compuse Bruno fue un momento muy extraño y confuso en mi vida, y eso se vio reflejado en la composición de ese álbum. Es un proyecto muy oscuro y dramático que con el paso del tiempo he podido ver con perspectiva y ha hecho que me enfrente a Magua con miel de una manera muy distinta.
Y lo noto en todo, en las letras, los ritmos, la imagen... Todo es mucho más desenfadado ahora, y aunque Magua con miel sea nostálgico, no es oscuro. He llegado a un balance con el que estoy muy contento y que creo que define bastante bien el título del disco.

Yo creo que el género está lleno de talento y de variedad, cada uno de nosotros interpretamos el RnB a nuestra manera y llevándolo a nuestro terreno. Artistas como Maikel Delacalle, Oddliquor, Aleesha, Paranoid 1966… Considero que todos hacemos RnB pero cada uno tiene su sabor y eso mola mucho.
En cuanto a propuestas tenemos de sobra, pero sí es verdad que, a la hora de consumirlo, en España no hay tanta cultura de RnB, y lo que se escucha a nivel mainstream no es precisamente nuestro género. Pero no digo que sea algo malo y que todo el mundo debería tener su oído educado de X forma, simplemente las condiciones en España son las que son y todos los que hacemos RnB nos enfrentamos a eso. Pero también tengo que aclarar que nuestra generación tiene la suerte de poder cantar sin miedo a que nos crucifiquen por no rapear. Hace unos años esto era impensable, y esta evolución se la debemos a artistas como Flavio Rodríguez, que tuvieron que comer mucha mierda por atreverse a cantar RnB cuando estaba completamente estigmatizado y te ridiculizaban por ello.

Sí, el proyecto a nivel musical lo empecé a preparar en 2020 después de la cuarentena, fue ahí que hice las demos de Arena negra, Malvasía, Chuck Taylors, Enhorabuena y alguna más. Y ya en 2021, cuando tenía un grueso de temas que empezaban a definir el sonido del disco, comencé a trabajar con mi equipo creativo en la estética de los vídeos, qué singles saldrían primero, cómo íbamos a tratar los artworks... Todo era bastante organizado por cómo he solido trabajar hasta ahora (risas).

Solo palos, palos y más palos. Dawaira es un artista al que admiro muchísimo y que me ha ayudado fleje en mi carrera, de hecho. Dolores no existiría si él no hubiera estado en esa sesión escribiendo conmigo. Tiene una manera increíble de entender la música y en cuanto arranque su proyecto va a sorprender a mucha gente, porque de verdad que viene muy muy duro con temas muy sólidos ya preparados.

Ese man es la muestra de que el tiempo pone a cada uno en su lugar. Lleva currando como un psicópata en su proyecto desde que le conozco y todos coincidimos en que no da puntada sin hilo. Poco a poco la gente se está dando cuenta de eso, y, aunque su crecimiento sea más lento que el de otros artistas de la escena, es un crecimiento muy sólido. Esta construyendo una fanbase que va a joder con él durante mucho tiempo si mantiene la calidad a la que les tiene acostumbrados. Y me alegro mucho por él porque sé de primera mano que lo da todo por su proyecto, por inspirar a la gente y por cuidar a los suyos. Cada paso que da Abhir es en dirección a la longevidad, él no busca pegar una canción, él busca sacar la mejor versión de su arte.

Todo ha fluido de una manera muy natural, todas las colaboraciones las he decidido según hacía las canciones, y viendo qué es lo que me pedía cada tema.
Con Chita, por ejemplo, cuadró que vino unas semanas a Madrid a hacer música justo cuando yo estaba con el disco a la mitad. Yo ya tenía Malvasía con el segundo verso libre y sabía que esa canción necesitaba una colaboración femenina. En cuanto se la enseñé le encantó y en esos días se escribió su parte e hicimos algún tema para ella también. Me acuerdo salir un momento del estudio a fumar y cuando volví a entrar me cantó la primera mitad del verso y casi me desmayo. Para mí esa colaboración es uno de los mayores aciertos del disco porque ella brilla demasiado en la canción, tanto que me deja un poco en ridículo (risas).
O cuando hicimos Flashbackssss yo había descubierto el proyecto de Svarez hacía relativamente poco y estaba enamorado de su música, le llamé para que viniera a la sesión a escribir conmigo y sacar melodías y no pude evitar pedirle que se montara en el segundo verso. Es una persona muy talentosa y puede que él a día de hoy no lo sepa, pero su propuesta musical me inspiró mucho a la hora de crear Magua con miel y necesitaba meterlo en el álbum para darle el reconocimiento que merece.
En general son todo colaboraciones que han salido de una forma súper orgánica y cercana, y lo noto mucho en la calidad de la música y en lo contentos que están todos ellos por formar parte del proyecto. Creo que es algo de lo que la gente se da cuenta, cuando algo es forzado y es más pensando en los números que en la música deja de ser arte para pasar a ser un negocio y para mí, en esa balanza, pesa más el arte.

Creo que conectaría mucho en el estudio con Alvarito Díaz, Jesse Baez e incluso con Feid. Pero quizás eso es más pensando en las inquietudes que tengo ahora mismo, si hablamos de cumplir un sueño que tengo desde que empecé a hacer música te diría Tyler The Creator, Frank Ocean, Kaytranada… Gente que me ha inspirado muchísimo desde que me empecé a dedicar en serio a la música y que a día de hoy lo siguen haciendo.

¡Shows! Me muero de ganas por preparar un show bien cuidado y cantar Magua con miel en vivo. Quiero que los que vayan a los conciertos vivan un momento especial en su vida y se vayan a su casa en una nube después de haber saltado, llorado y gritado cada tema. No puedo decir ciudades porque aún no lo hemos empezado a plantear, pero denme chance para volver a Tenerife una semanita, ir a a la playita, desconectar, comerme un buen par de arepas y me vuelvo a Madrid a preparar los shows con más ganas que nunca.

Dawaira, Judeline y San Tosielo.