Cuesta imaginarse la motivación tras un EP sin aviso, sin portada y sin contexto general. Y más cuando cuesta, doblemente, imaginarse la unión de dos artistas con un vínculo limitado a la vida pública canalizada por una imagen despreocupada. El pasado viernes 10 de octubre, Bb Trickz y Depresión Sonora, imágenes reconocidas del rap y postpunk contemporáneo hispanohablante, lanzaban un extended play colaborativo bajo el título DSxBB, e irrumpían como un ejercicio de espontaneidad en medio de fórmulas de marketing saturadas que, desafiando cualquier lógica de mercado, invita a cogerse con ganas y expectación al imaginario colectivo de ambos alter egos.
Bb Trickz es, en su conjunto, un personaje redondo. No hay por donde pillarla, y es lo más atractivo que se le puede decir a un artista en pleno auge del consumo en réplica. En un punto donde el más clásico género pop está viendo el resurgimiento del concepto de la stan culture que se tenía en la década del 2010, Belize Nicolau ha encontrado en el rap y en lo problemático una forma de expresión artística que roza la comedia y que, a fin de cuentas, la pone en el punto de mira.
Es, en la actualidad, uno de los principales vínculos que tenemos con la industria y la farándula norteamericana y angloparlante, pisándole los pies muy de cerca a Rosalía. Su codeo constante con Charli xcx le consiguió uno de los remixes de brat, and it’s completely different but also still brat, el remake del que fue, indiscutiblemente, el disco del verano de 2024. Y su historial, tan popular como ambiguo, deja hueco para la espontaneidad en cualquiera de sus vertientes: canta en el Coachella mientras la acusan de trad wife o la llaman vulgar por hablar del deseo sexual teniendo frentes abiertos con Bad Gyal y Metrika.
Por su parte, Marcos Crespo, cabeza pensante de Depresión Sonora, fue uno de los regalos pandémicos que dejó el 2020, y que apadrinó el Sonido Muchacho de los Carolina Durante recién salido del horno con su primer (y único) LP a medio camino entre el lo-fi y el postpunk. Su popularidad dentro de la escena madrileña gestó un éxito que ha crecido de forma progresiva para asentarlo en los ya clásicos del independiente español, y ha logrado que su personalidad misteriosa con tintes desaliñados no cause ningún tipo de problema y sea tomada en serio allá donde va.
Preocupado principalmente por el mensaje, como ha repetido en múltiples ocasiones, Crespo va en volandas con una inspiración semi tecno-pop en la que también se luce como ingeniero de sonido. Es, a niveles artísticos, exquisito. Y como Depresión Sonora, un proyecto incansable. Pese a que solo cuenta con El arte de morir muy despacio como larga producción, no ha dejado pasar un solo año sin EP, singles, colaboraciones y su seudónimo en mayúsculas en los festivales y salas clásicas españolas y trasatlánticas.
En consecuencia, la unión de ambos era un tanto impredecible. No solo porque sus presencias en la industria son genuinamente dispares, sino porque cuesta imaginarse una fusión musical entre el postpunk y el rap contemporáneo que pueda, efectivamente, bautizarse como una de las mejores cosas que han sacado ambos artistas en su carrera.
Los tres temas que componen DSxBB están cortados por el mismo filtro, que ha sido indiscutiblemente pautado por Crespo. La melodía shoegaze alternativa que dirige el conjunto del EP hace que los temas posean una cohesión casi indistinguible entre las tres pistas. Sin embargo, existe una generosidad y complicidad plasmada en el conjunto del EP que ayuda a que el modo de trabajar de ambas partes confluya con serenidad.
El inicio de los tres temas (destacando con creces en Soy lo peor) es tan similar al sonido rock alternativo del The Adults Are Talking de Los Strokes que – y teniendo en cuenta la influencia postpunk revival que guía la actividad de Depresión Sonora – deja claro el asesoramiento metafórico del Is This It de Casablancas. Y que, sin duda, nada tiene que ver con Lechita, la ahora penúltima colección de Bb Trickz.
Tanto el tema de apertura como Todo da igual mantienen el balance perfecto entre ritmo DS y el tono conversacional clásico de los temas individuales de Belize, que sale de su zona de confort entrando dentro de un ritmo al que no acostumbra el género en su conjunto, ni la artista en concreto; lo que compensa la dicción rápida e inconexa a la que muchos oyentes ajenos al rap acusan como principal causa de su distanciamiento con el género. Y que proyecta una evolución de personaje que, sin necesidad de modificarse, alude a la versatilidad que puede alcanzar.
No ocurre de la misma forma en Es verano y qué, que difiere ligeramente de sus predecesoras por la vuelta al off-beat clásico que pierde la congruencia con el resto de los temas, y que destaca menos en cuanto a unión de fuerzas equilibradas entre ambos artistas. Es, sin embargo, el tema que más estiliza a la composición característica de Bb Trickz, y en el que Depresión Sonora muestra más adaptación a las modulaciones vocales y la palabrería rápida; porque despreocupada es en todo momento.
DSxBB es una muestra del trauma generacional que parece afectar a todo nacido con la implantación del euro. La disconformidad global y la incomodidad con todo lo que supone un orden estético y social que no admite lo que se sale del programa lineal de la experiencia humana, y que define ese ‘no-futuro’ al que van dirigidos los temas.
El EP, que aparentemente ha nacido como proyecto independiente y espontáneo entre ambos artistas, no será incluido en lo nuevo de Depresión Sonora, que cuenta con un mínimo de cuatro singles ya publicados a lo largo de 2025. Tampoco parece encajar del todo en la discografía de Bb Trickz, que no mostró ningún cambio (ni ánimo de) en su última larga producción a mediados de año, y que se ha mantenido absolutamente lineal en cuanto a sonido en tres años de carrera.
Una pena y alegría a partes iguales. Porque además de ser objetivamente bueno y disfrutable, es un soplo de aire fresco para los dos componentes de la ecuación. Y lo más cerca que van a estar ambos artistas de una canción de Shego, en el mejor sentido posible.
Track favorito: Soy lo peor.
