Los favs de Iván Ezquerro

Su contenido es un auténtico soplo de aire fresco; antes de sus vídeos, ¿quién habría imaginado que se podía crear un look inspirado en el refranero español? Ya sabéis lo que dicen: los favoritos de alguien son el reflejo del alma. Así que, para conocerlo mejor, hoy le preguntamos por los suyos. Allá vamos.

Desde que lo escuché por primera vez, supe que estaba ante un candidato a ser mi álbum favorito. Me encuentre como me encuentre cualquier día, siempre hay un tema que encaja con mi mood. Pero lo que terminó de convencerme para darle ese puesto fue su directo. Tuve la suerte de poder ir a una de las fechas que hubo en Madrid a principios de año y nunca he disfrutado tanto en un concierto. La performance, los visuales, la energía en la sala tanto por su parte como por la del público… A partir de ese día siempre he tenido clara la respuesta cuando me hacen esta pregunta. Durante el verano he podido verlo varias veces más, y cada una de ellas me lo ha vuelto a confirmar.

Sé que hay algunos prejuicios con este tipo de libros, y más con uno que tiene un título tan pretencioso como este, pero ha cambiado mi manera de relacionarme con las personas y me ha ayudado a resolver conflictos de una manera mucho más efectiva. Prácticamente en cada capítulo hay información relevante, pero la parte más interesante, en mi opinión, es cuando habla de admitir y pedir perdón por los errores. Las personas tendemos a ocultarlos y restarles importancia, pero eso, a la larga, es como barrer debajo de la alfombra.

En el momento en el que cambias el chip y empiezas a admitir tus errores, te das cuenta de que, normalmente, nunca es para tanto, que la otra persona agradece mucho esa predisposición porque no es lo habitual, y todo se resuelve antes y mejor. No ha habido una sola vez, en todos estos años que lo llevo practicando, en la que me haya arrepentido de admitir un error.

Es la primera serie que vi durante mi época universitaria, así que le tengo un cariño especial. Es cierto que, a medida que avanza la serie, se va perdiendo la originalidad y la frescura de la primera temporada, pero es que es tan, pero tan buena, que sigue mereciendo totalmente la pena darle una oportunidad. Hacerte encarcelar voluntariamente para sacar a tu hermano de la cárcel es una de las premisas que más me han llamado la atención. Pero si luego la manera de ejecutarla está llena de suspense constante, personajes complejos y bien desarrollados, y, por supuesto, toda la parte de ingenio, planificación y creatividad para llevar a cabo el plan original, el resultado es una serie para la historia.