“La vida ha cambiado, entonces el amor cambia con la vida”, opinaba Pimp Flaco la última vez que se le entrevistó para esta revista. Era octubre de 2022 y los cinco de Cupido se encontraban en plena gira de Sobredosis de amor, un segundo álbum publicado seis meses antes. De aquello han pasado más de dos años, dos sencillos y varios conciertos y festivales. Pero en todo este tiempo (y que Dani y el pelo de Luichi Boy me perdonen), nada parece haber cambiado. No lo ha hecho, al menos, la necesidad de este grupo de dilatar siempre el tiempo y dejarlo reposar entre creación y creación. Ni el amor (el nuestro hacia ellos). Pese a la vida. Hoy Cupido vuelve con su nuevo EP Te hago un resumen, y cantan este regreso a su manera: con mucha ironía, algo de humor, nostalgia y desamor. Todo ello a lo grande y no con demasiada antelación, en un 14 de febrero incomparable, pero con muchos precedentes.
Un comienzo de año, se podría decir, que no llama a nuestra puerta sino que directamente la echa abajo. Te hago un resumen es un conglomerado de cinco temas que encapsulan, cada uno a su manera, “la esencia irreverente y transgresora de la banda”.
Un nuevo trabajo que, sin dejar de seguir el camino marcado, se siente y escucha de manera diferente. A ello han contribuido, sin duda, unas canciones vívidas y punzantes que pelean por lo auténtico y, aunque traen de vuelta temas muy tratados a lo largo de su carrera (siete años ya), se saben diferentes.
La primera bala impacta en nuestro cerebro con Espaguetis con tomate y lo remueve todo de manera visceral. Un arranque de EP que no deja de ser un homenaje a lo cantado y escrito hasta el momento, repasando algunos de los hits del grupo. Pero, sobre todo, es un pequeño regalo a lxs fans de siempre y el aperitivo perfecto para dejarnos con sed antes del atracón.
A partir de aquí, el ADN de una boyband que regresa afianzada y con las cosas mucho más claras: se canta en Te hago un resumen, tercer y homónimo single de este EP. Pero también dispuestos a asomarse a cosas que no habían probado aún, como ocurre en La máquina del tiempo. Una suerte de rumba que mezcla ritmos y sonidos poco o nada parecidos a lo que veníamos viendo por parte del grupo (de momento).
Y matizamos “de momento”, porque Te hago un resumen parece marcar el comienzo de un nuevo ciclo para la banda, cargada de música, de un álbum de colaboraciones previsto para finales de 2025 y de una gira por salas y arenas de toda España.
Pero llegados a este punto, cuesta no revisitar lo de antes, aquello de volver a volver. O, en el caso de Cupido, lo de “para no volver”. Y es que si hay algo que caracterice a esta banda son sus guiños, sus múltiples referencias y sus giros de guion. Aunque para ello tengamos que echar la vista atrás. Concretamente, a esto que dijo Toni D en Acero hace un par de años sobre Robe y las colaboraciones: “lo meteríamos (a Robe) en un tema que aún no ha salido”. 
Y acertados o no, de manera inevitable pensamos en Dentro de mí, cuarto tema del EP cuya intro recuerda (mucho y bien) a aquellos comienzos tan de Extremoduro, como perfectamente podrían ser Cuarto movimiento: la realidad o Stand By, y tan de Robe Iniesta, en Un suspiro acompasado. ¿Casualidad? ¿Referencia? ¿Premonición? ¿Lanzamiento de aquel tema mencionado siendo aún nonato? No importa. En cualquier caso, ya está viviendo para siempre en nuestras cabezas.
Porque puede que Toni D nos diera la clave entonces, o simplemente también tuviera razón al decir que “nos hemos acostumbrado a quitar los intermedios de la vida donde no pasan cosas, y son superimportantes para que cuando pasen las cosas, molen”.
Un intermedio que se deja entrever en Me arrepiento, ya para concluir todo esto. La canción, dividida en dos partes mediante una especie de, curiosamente, stand by en vinilo, abre y cierra ese interludio para responder y poner un poco de orden en todo ese popurrí de espaguetis con tomate.
Trece minutos y cuarenta y tres segundos de EP que, disfrutados con la suficiente perspectiva, hacen de Te hago un resumen el piloto de una nueva temporada de Cupido que viene fuerte, pero que, de cerca, es un puñetazo en la boca. Pongamos la otra mejilla.
Track favorito: La máquina del tiempo.