Irene López Valdivia, conocida en el mundo de la música como Valdivia, tiene ese toque especial que hace que inmediatamente la reconozcas con solo escucharla. Ahora su voz dulce viene acompañada de sintetizadores, pero sin perder esa aura tan íntima que tanto caracteriza su música. Valdivia nos presenta La cruz, su nuevo EP compuesto de cuatro canciones que ha producido junto a Lucas Bolaño de Estrella Fugaz y David Ramírez de Junnio.
Enfermera de profesión, la música la ha acompañado desde muy pequeña, eso la llevó a empezar a componer sus propias canciones, aunque se estrenó en Spotify con una cover de Bolsas de C. Tangana que fue lo que la dio a conocer. Desde entonces Valvidia no ha parado de crecer. Siempre acompañada de su guitarra, la madrileña nos regala con cada una de sus canciones un pedacito de su realidad con su música suave que te envuelve acercándote a ella.
¿Qué dirías que distingue a Irene de Valdivia?
Yo diría que Irene es la persona más mundana que intenta cumplir con las tareas del día a día y con la rutina. La persona que trabaja en algo no relacionado con la música, la persona a la que le gusta cocinar… Soy Valdivia cuando me subo a un escenario o cuando compongo o produzco.
Te estrenaste en solitario con una cover de Bolsas de C. Tangana. ¿Qué fue lo que te llevó a subirla?
En un principio no esperaba subirla, la hice por entretenimiento y porque me gustaba mucho el tema. Lo que me llevó a hacerlo fueron mis amigas. Le pasé a varias el tema y me dijeron que estaba muy bien y que les gustaba mucho. Yo no estaba muy segura, porque creo que solo tenía una canción en Spotify, pero me animé y al final creo que fue una buena decisión.
¿Te esperabas que tuviera la repercusión que tuvo?
La verdad es que no. Pero al subirla caí en la cuenta de que el tema original no está en Spotify, así que supongo que eso le dio un empujón.
Tienes otras covers grabadas como TKM de Sticky M.A o Castelvania de Yung Beef y Goa, ¿qué es lo que más te gusta de grabar covers?
Lo que más me gusta de grabar versiones es el hecho de no tener que pasar por el proceso de composición de la letra y la melodía de voz, es más trabajar sobre algo que ya está hecho y jugar con elementos que ya están marcados previamente. Evidentemente casi todos se pueden modificar, pero me gusta la idea de poder mantener la esencia del tema y a la vez mostrar mi esencia como artista.
¿Y de grabar tus propias canciones? Al final, con esa dimensión tan íntima que tienen tus temas, da la sensación que los compones más de forma terapéutica, para ti, que otra cosa.
Grabando mis temas consigo expresar una parte de mi que no puedo mostrar con las versiones, ya que al final cuentan cosas que yo no he vivido. Puedo empatizar con ellas pero no es lo mismo. Al final es mostrar un pedacito de mi y regalarlo. Y sí, también me ayudan a sacar cosas que de algún otro modo sería incapaz de expresar. Considero el momento de composición como un proceso también de autoconocimiento y reflexión.
¿Qué tema de los que has sacado hasta la fecha dirías que es el más especial para ti?
El tema más íntimo y personal es El sol.
Habías sacado como sencillos los temas Lo malo conocido y La cruz el año pasado, ¿Cómo te sientes ahora que por fin el EP ha visto la luz?
Me siento más tranquila y contenta. Es algo que tenía ganas de sacar pero por otro lado también me daba un poco de miedo la reacción de la gente al cambiar un poco el rollo, pero veo que ha gustado y que al final la esencia es lo que importa.
Da la sensación que en La cruz las canciones, aunque sin perder la intimidad, tienen un aire un poco más electrónico a lo que nos tenía acostumbrados tu música anterior. ¿Qué dirías que es lo que distingue este trabajo de tus anteriores?
Pensé que no quería quedarme en música tan suave, si no que quería atreverme a hacer algo más movido y bailable. Lo que siento que distingue este trabajo de los anteriores son los ritmos, los sintetizadores y el modo en el que expreso las cosas. Siento que he sido más directa que en Cero.
¿Qué fue lo que te llevó a unir los cuatro temas en un conjunto?
Al final son temas que compuse en una misma época y que creo que tienen un estilo parecido y que encajan bien juntos, exceptuando El sol, que creo que se parece más a mis anteriores trabajos. No me gusta mezclar temas que compongo en períodos con mucha distancia ya que siento que pueden no casar bien juntos (aunque igual es un error y más adelante lo acabe haciendo).
Has dicho en muchas ocasiones que no te gusta encasillarte en géneros musicales, ¿en qué crees que pueden limitarte los géneros?
Creo que al final todos acabamos tocando muchos elementos que pertenecen a distintos tipos de música y que cada persona tiene una percepción distinta de cada género. Por lo tanto, si a alguien le interesa mínimamente mi trabajo o quiere descubrir algo nuevo, prefiero que me escuche a que pueda acabar no escuchándome por encasillarme en algún lado.
El EP lo has producido junto a Lucas Bolaño de Estrella Fugaz, ¿cómo surge la unión? ¿Qué consideras que le ha aportado él a tu trabajo?
Lucas y yo nos conocimos más a fondo en un viaje a Murcia, fuimos a tocar al festival Microsonidos y la pasamos de lujo. Ahí cogimos algo más de confianza y al ser una persona cercana y con unas ideas musicales atractivas decidí trabajar con él ya que pensé que mi proyecto podía enriquecerse. Le ha aportado frescura y algo de oscuridad, cosa que nunca está de más.
El único tema que no hemos producido Lucas y yo solos ha sido el tema del El sol, que lo he producido y grabado también junto con David Ramírez de Junnio. Digamos que ha sido una producción a tres.
Eres enfermera y estuviste en primera línea durante toda la pandemia, de hecho, te tomaste un descanso para dedicarte solo a la música por el desgaste que eso te provocó ¿Cómo te afectó a nivel creativo?
Me afectó bastante. De hecho llevo un tiempo pensando en cómo era yo antes de todo eso y pensando en lo que me ha cambiado, y en que me gustaría volver atrás si pudiese. Hay experiencias que lejos de aportarte algo simplemente te cambian la vida, y no necesariamente para bien. Digamos que sigo intentando adaptarme a ciertas cosas e intentando no añorar lo que era antes y acostumbrarme a esta nueva versión de mí.
¿Cómo has afrontado la grabación de este nuevo trabajo?
Aunque pueda parecer que no por mi anterior respuesta, lo he afrontado con ganas e ilusión ya que me ayudó a sentirme capaz de crear de nuevo y saber también que puedo crear cosas distintas.
En los últimos conciertos has incorporado batería y bajo a los directos de Valdivia, ¿Qué nueva dimensión le aporta la banda al proyecto?
En la banda cuento con Alex a la batería y David al bajo, ambos son amigos míos. Con David había trabajado previamente ya que fue uno de los productores de Cero, y con Alex también había tocado alguna vez en algún local y sabía que todo iba a fluir.
Son dos personas que aportan muchísima riqueza al proyecto. Pensamos parecido musicalmente y ambos saben lo que quiero y lo que viene bien a cada canción en cada momento casi sin que se lo diga. Son unos músicos y unas personas increíbles y me siento muy agradecida de que quieran ser partícipes del proyecto.
Finalmente, ¿cuáles son los planes que tiene Valdivia para el futuro?
Así como objetivo a largo plazo me gustaría sacar algún single suelto y como culmen trabajar en un álbum.