Quizás ya lo conoces. Quizás llegaste aquí por Gárgola Digital o Rayne Fisher-Quann. Hablo de Substack, un rincón bonito de internet que, después de tanto doomscrolling en plataformas que te lanzan cosas que no pediste, se siente como encontrar una terraza tranquila en medio del caos de una ciudad abrumadora. Diría que Substack es simplemente esto: gente escribiendo cosas que le importan, y otras leyéndolas con calma.
Para quienes aún no se han lanzado: Substack nació como una plataforma para enviar newsletters, y poco a poco se ha transformado en un punto de encuentro para escritores, lectores, curiosos y todo aquel que tiene algo que contar. Es un cruce entre Tumblr y Twitter. Y ojo, no me malinterpretes: no estoy diciendo que esto sea el paraíso. Substack no se salva de los males de internet. Pero como dice Mar Vallverdú, “navegar por internet es una habilidad”. Y, siendo honesta, Substack lo pone más fácil que otras plataformas. El ritmo es más lento y las decisiones se toman con más consciencia, de forma más personal. Es como curar tu propia revista, a tu ritmo, sin presiones y con tus gustos. Es como tu bebé digital. Si te gusta leer y escribir, este es tu lugar.
¿No sabes por dónde empezar? Desliza, que aquí van tres newsletters que te van a enganchar.
The Girl Pope
Es como esa amiga que te dice las cosas claras y te hace replantearte tu existencia. No es tu típica guía de lifestyle; y no, no porque ella lo llame ‘intentional living’, sino porque es mucho más profundo que eso. Ella no te va a vender un estilo de vida: te va a invitar a desarmar las tendencias que todo el mundo sigue y a verlas desde otro ángulo. Este intentional living para ella es algo así como vivir con consciencia, con propósito, como si cada decisión tuviera el poder de transformar tu día a día. De salud a moda, pasando por finanzas y una dosis de reflexión sobre el caos de este zeitgeist que todos compartimos. Te recomiendo estos artículos para que te pasees tranquilamente por su mundo: No eres lo que haces. Eres lo que el otro percibe que haces y Goodbye to All that! Hello to All this!
Nuestras cosas
Es una cápsula del tiempo hecha a mano, un fanzine emocional con olor a papel reciclado y tinta de bolígrafo azul. No vas a encontrar aquí una narrativa marcada por la inmediatez, sino recuerdos, obsesiones, fetiches culturales y objetos que cargan con más historia de la que aparentan. Hay algo profundamente íntimo en cómo se cuentan las cosas, como si estuvieras hojeando el diario de alguien que no tiene miedo de mostrar sus pliegues. Todo lo que escribe parece decir: Esto es mío, pero podría ser tuyo también. Te sugiero este texto: El clean look o cómo la ultraderecha se ha colado en tu vida.
Badmouthing
No es solo una newsletter, es un monólogo afilado que interrumpe el scroll y te deja pensando en silencio. Luciana escribe con esa mezcla de furia elegante y ternura existencial que te hace reír justo antes de querer llorar. Es crítica sin ser amarga, personal sin volverse cursi, política sin bandera. Su voz es como una amiga que no necesita gritar para que le prestes atención: te habla desde el fondo del bar, con una copa en la mano y las ideas claras. Para empezar a leerla, te dejo este artículo: Fuck Notes! Substack is insufferable right now.
Y no queríamos cerrar el artículo sin añadir los perfiles de Substack de parte de nuestro equipo. Nuestro editor, Antonio Alfaro, y su newsletter Monedero; y Fernanda Callejo, redactora de moda y producción, y su newsletter Fashion Victims.