toni duart, sí, en minúscula todo, es un artista valenciano de veintidós años que empezó en el 2021 a sacar sus primeros temas. No tardaría en abrirse su propio camino con su single Quiero comerte la boca, un auténtico temazo de esos para tener en bucle y que, además, forma parte de su primer EP, De ninguna parte. Él lo define como una fusión rockera y electrónica donde intenta hablar de esa sensación de no pertenecer a ningún lugar. Toni es un tío cercano y abierto a vivir experiencias, a aprender, a crecer personal y musicalmente. Vamos, que tiene las cosas claras. Hemos hablado un poco con él sobre su primer trabajo y sobre su futuro.
Hace tres años que empezabas en la música con temas como al lado o Compararte,  ¿cómo fueron esos comienzos?
En verdad, para mí no hay un comienzo único. Cantar en privado me había gustado siempre, y realmente el contacto con escribir ocurrió muy temprano, me divertía contar mis movidas. Después, sobre los dieciséis, me moló la escena más cercana al rap, y no fue hasta los veinte que volví a interesarme más en publicar música.
Durante el primer año y medio saqué tan solo tres canciones de manera muy dispersa. Únicamente vivía mi día a día, y, cuando me apetecía, compartía algo de lo que hacía en privado con una intención inocente y sincera, ya que desconocía la parte más seria y profesional de la música, la cual sigo sin conocer aún en gran medida.
A lo largo de este tiempo se puede ver cómo tus canciones y estilo se han ido marcando mucho más hasta llegar a una especie de pop con toques rockeros y electrónicos. ¿Esa evolución en tu música va ligada también a tu crecimiento personal?
Yo diría que sí. Realmente, ese cambio de estilo surge como consecuencia de un cambio personal, de querer contar las cosas desde posiciones más maduras. En cierta parte siento que mi yo más actual se ve más reflejado en lo que hacemos y en cómo lo hacemos actualmente. Creo que, de igual forma, este cambio a nivel musical también viene impulsado después de haber conocido a Carles (CCF), ya que curramos juntos desde hace casi dos años y eso ha hecho que nos conozcamos muy bien.
¿Quiénes son tus referentes?
Para mí, el mejor artista actual a nivel nacional es C. Tangana. Ahora bien, no creo que sea una de mis mayores referencias en lo práctico. Me gusta mucho fijarme en gente que, además de tener su proyecto, deja su huella en otros proyectos ajenos trabajando desde atrás, gente con propuestas distintas entre sí como Carlos Ares, Xavibo, Ralphie Choo, o Sebastián Cortés, por ejemplo. Además, actualmente hay muchas mujeres de la escena con proyectos que me molan mucho tipo Natalia Lacunza, Samuraï, Judeline, Belén Aguilera, Julieta, etc. Ya luego, metiéndome más en lo urbano, distintos también entre ellos pero muy buenos en lo suyo te diría un Recycled J, Soge Culebra o un Hoke con BBO.
Tu tema más escuchado es Quiero comerte la boca ¿fue un punto de inflexión para dedicarte más ‘profesionalmente’ a este mundillo?
No sé si realmente para dedicarme más ‘profesionalmente’, pero sí que sé que supuso un antes y un después en lo que quería hacer. Principalmente, a partir de Quiero comerte la boca, y en menor medida en algún tema anterior, dimos con determinados elementos con los que poder crear e hilar a nivel sonoro todo el EP que ha salido ahora sin ceñirnos a un género concreto. Sí que marcó un momento de inflexión para elaborar un primer trabajo más conceptual y completo.
Tras él vinieron singles como Dueles o la colaboración con la cantante madrileña Ali Abellán con Nadie más ve. En ambos temas se puede ver ese pop más rockero y electrónico. ¿Fue la entrada para dar paso a tu primer EP en cuanto a ritmos y melodías?
Realmente el EP viene haciéndose desde mayo del año pasado, así que se ha ido haciendo todo simultáneo. Dueles es un tema que tenía letra de hace casi dos años y decidí llevarlo más hacia el sonido que queríamos seguir en el EP aunque no forme parte de este. El tema con Ali es quizá el más electrónico de todo mi tracklist y mola porque tuve que salir de mi zona de confort y meterme más en un estilo que encajara en lo que está haciendo ella, ya que forma parte de su proyecto.
A nada de publicar tu primer EP, De ninguna parte ¿cómo te sientes?
Satisfecho y contento de ver que la gente involucrada también lo está. Por otra parte, también ha sido un proceso duro, ya que algo así conlleva mucho más trabajo y dedicación, pero creo que ese tiempo hace que sientas más tuyos los proyectos, que se genere el cariño y tengas la paciencia por tratarlos bien, más cuando es el primero. En resumen, muy feliz por haber podido desarrollar de esta manera mi primer EP y ahora poder presentarlo.
Has trabajado en todas las facetas de este proyecto desde la parte creativa hasta la producción, ¿cómo ha sido ese proceso?
Precisamente ha sido una de las cosas que más me ha hecho sentirme bien con el resultado del global, el verme reflejado en cada uno de los puntos del EP. A su vez, creo que el propio trabajo te lo agradece luego como oyente porque notas mucha más cohesión entre todas sus partes. En lo musical he trabajado todo con Carles, algunos ratitos de estudio con Keezy, Kfé, Jayx. Y, sin embargo, la parte creativa ha sido más independiente, sobre todo el ideario y la dirección, ya la ejecución está todo hecho mano a mano con heyjulssssssss y con las ayudas de bpmire. 
¿Alguna vez has sentido esa sensación de no formar parte de ningún lugar?
Bueno, creo que yo y probablemente todo el mundo, o al menos gran parte de nuestra generación. Vivimos con la necesidad de pertenecer a un determinado lugar, a una persona, encontrarlo y querer formar parte de él. Quizá es que sea algo intrínseco al ser humano el querer echar raíces, pero a veces todo es un proceso e ir de un punto a otro conlleva un tiempo de pérdida, de reubicación, de pararte y reflexionar hacia dónde quieres ir, con quién.
Creo que es una etapa transitoria que mucha gente no se para a valorar y puedes hacerlo desde diferentes perspectivas hacia ese sentimiento, tanto positivamente como de manera negativa. Realmente son todas estas sensaciones de no sentirte de ningún lugar lo que hemos querido reflejar a través del desamor, la autoestima, la rabia o la pérdida.
Tu primer adelanto de De ninguna parte fue sin ti es un tema en el que parece que hablas hasta con cierta rabia de una relación que se pudre y que está rota, aunque todavía exista. Es una sensación que suele ser muy complicada ponerle palabras ¿cómo fue ese proceso?
Sin ti fue un proceso muy nutritivo para mí como Toni, siendo capaz de comprender que, a veces, las relaciones mueren, aunque determinados aspectos dentro de ellas funcionen. En este caso, el aspecto que funcionaba mientras todo se iba al garete era el sexual. Pretendía contar que la atracción que existe entre dos personas es capaz de hacer subsistir de manera temporal un vínculo que por otros lados está muriendo, y la rabia que te da el pensar por qué todo no funciona así de bien entre nosotros. Esa disyuntiva pretendemos focalizarla en plasmar una relación que es única, que no hay dos iguales, ni en lo positivo de la conexión sexual, ni en lo negativo que te puede despertar que nada más funciona con esa persona.
Luego vino No vuelvas, donde parece que rechazas el hecho de que esa persona vuelva a aparecer en tu vida. ¿Es difícil decir que no a alguien que fue importante en tu vida?
Sí, yo creo que sí, nunca es plato de buen gusto desprenderse de alguien importante. Al final dejar atrás nunca es sencillo, a una persona, a un lugar e incluso, a una conducta. Es lo que tratamos de expresar en No vuelvas. Queríamos transmitir que ya no quieres ni esa habitación, ni los portazos, ni mucho menos los gritos, quieres salir de la ansiedad de esas cuatro paredes para crecer, aunque eso implique dejar de compartirlas con alguien importante en tu vida.
De ninguna parte empieza de una forma que parece que hablas desde la añoranza o la tristeza, pero a medida que vas escuchándolo van apareciendo otras emociones más relacionadas con la rabia. ¿Fue difícil hacer esa relación entre las canciones de manera que pareciese que te acompañamos en el proceso de sanación?
Bueno, a nivel composición fue parejo a como me iba sintiendo, en ese sentido me iba encontrando a la par que lo trabajamos, así que era un poco como seguir el hilo que yo mismo iba tejiendo, por lo que de cierta manera me hacía sanar a mí también. Además, al currar con Carles y tener esa relación, sentía total libertad para lanzar propuestas sobre lo que quería contar y viceversa. Para hablar de uno mismo hace falta ese clima de confianza y seguridad.
Cada detalle está cuidado y pensado, incluso las propias carátulas de las canciones tienen su función, ¿qué buscas con ellas?
Cuando imaginaba una representación visual de ese lugar en el que nada se sentía como un hogar, pensé en una casa perdida en el bosque, destruida o a medio hacer. También en elementos que podían formar parte de esa vivienda fallida y a través de ellos contar. Sin ti representa unas cartas que entregas al marchar de un sitio y abandonas ahí a alguien. No vuelvas cuenta con una puerta que atraviesas para marchar de una casa que nunca llegó a estar, y, por último, Te convertí en canciones con su cartel de venta de ese mismo lugar, que ya no necesitas para nada.
Todos estos elementos guiados por el color rojo aparecen en la portada del EP rodeándome a mí en un ambiente desolado. Buscábamos esa sinergia entre lo visual y lo musical, que fueran desvelando a la par un concepto, una historia, el sentirte fuera de todo.
En especial me llama la atención Frío, en el que la portada es la misma que la del propio EP, pero con el foco de atención puesto en ti, algo que también buscas transmitir con la propia canción, ¿cuál es el mensaje?
Frío precisamente es el tema en el que más hablo de la autoestima y el volver a quererse, estar para uno mismo, aunque no se le elija. A nivel narrativo es la antítesis de esa pérdida que se refleja en la portada principal y en la intro. Pretendíamos con Frío poner el foco en mí y mi camisa roja para cerrar con un outro que tuviera un aura parecida pero mensaje e imagen opuestos. Por eso utilizamos el desenfoque sobre el resto de los elementos, porque restaba un elemento por tratar de toda esa composición y no me había dado cuenta ni en mi vida personal, que era yo mismo. El mensaje es precisamente valorarse por encima de un contexto temporal que quizá no te favorezca, pero tienes que recordarlo siempre.
¿Cuál será el siguiente paso de toni duart?
El siguiente paso a corto plazo es hacer una presentación en directo de todo este EP, tanto en mi terreta como en Madrid, y que salgan las colaboraciones ya cerradas para después del verano, que hemos ido trabajando estos últimos meses desde que terminé todo el proyecto del EP.
Si pienso más a largo plazo, que es como realmente me gusta pensar, el siguiente paso es encontrar un motivo más allá de que me guste hacer música para evitar entrar en una inercia creativa fría y alejada de mí como persona. Para ello creo que hay que parar y reflexionar un poco sobre el punto vital y musical en el que me encuentro, ver qué estoy viviendo, qué quiero contar a partir de ahora y cómo quiero hacerlo, aunque eso conlleve alejarme un poco durante un tiempo de todo este mundo.
Con este proyecto cierro una etapa personal y no tendría sentido, ni me llenaría tampoco, seguir contando lo mismo. Sé que quiero hacer un proyecto más largo y ambicioso, pero para ello se necesita sobre todo un motivo y en cierto modo un mecenas, así que va a ser una temporada para ello, parar desintoxicarme, vivir mucho y pensar, quién sabe.
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