La tercera jornada del Sonorama Ribera fue la encargada de dejarnos a muchos sin voz. Algunos de los nombres más coreados del pop-rock de los últimos tiempos, Carolina Durante, Pablopablo, Barry B, se unieron a voces con himnos que ya forman parte de la historia contemporánea de nuestro país, como Tenía tanto que darte de Nena Daconte o A la sombra de la sierra de La Raíz, que nos dejaron la garganta machacada pero el alma llena.
Empezamos la noche con Cristina Len, ganadora del Talento Ribera, premio al que se presentaron más de trescientos artistas para poder actuar en el Sonorama. Cristina justo estuvo cubriendo el festival para ACERO el pasado año mientras soñaba con estar arriba del escenario en vez de entre el público. Deseo cumplido. La catalana, con uno de sus ya habituales looks entre gótico y sexy, y con una copa de Ribera en la mano, ofreció un derroche vocal a través de un slow beat oscuro para cantar sobre sus dos grandes temas: su pueblo castellano, Martiago, y la ansiedad. Entre alaridos devastadores que rompían el beat y convertida en vampiresa, Len presentó su primer álbum, TMLM, además de las inéditas Espina y Manolo mío, un romance con el que alcanza su sonido más desgarrador hasta la fecha. Su concierto acabó convirtiéndose en una rave hipnótica y sensual, que terminó con una lluvia de condones que llevaban grabado el estribillo de su último single: “Sexo contigo es maravilloso”.
A Cristina le sucedió Pablopablo, uno de los artistas de los que más se ha hablado este 2025 por infinidad de razones: su colaboración con Amaia, su rol como coautor de Spanish Leather de Guitarricadelafuente, su relación con su padre Jorge Drexler y sobre todo por su primer gran proyecto discográfico, Canciones en m”, donde sin inmutarse es capaz de llevarnos del lo-fi a la ranchera. Tocando el teclado y la guitarra, apareció además acompañado de un saxofonista a su derecha y un batería a la izquierda. Con una puesta en escena minimalista y letras llenas de vulnerabilidad, el madrileño demostró que aún viniendo de una familia de estrellas es más que capaz de brillar con luz propia.
Tras un pequeño descanso más que necesario para poder gritar, bailar y poguear como merece Carolina Durante en su primer concierto en el Sonorama, nos acercamos al escenario principal para recibir un chute de adrenalina que nos sacó tanta energía que nadie diría que llevábamos tres días bajo los casi cuarenta grados de Aranda del Duero. Los cuatro chavales sirvieron riffs de guitarra constantes que nos llevaron a un estado de euforia pura que alcanzó su máximo apogeo cuando subieron a Pancho de Zoo a cantar juntos Granja escuela.
Barry B, natural de Aranda y el mayor artista urbano de la historia del municipio, seguramente vivió anoche el concierto más importante de sus cuatro años de carrera. Todo el público coreó cada una de sus letras, que podíamos seguir gracias a los subtítulos de las pantallas. A su casa le dedicó el tema Infancia mal calibrada, y a su prima pequeña, superviviente de una leucemia y quien subió a cantar al escenario, 40K, dejando el que será sin duda el momento más emotivo de esta edición del festival. Con Gara Durán interpretó la íntima y delicada El lago de mi pena, y cerró el concierto junto a Carolina Durante cantando Yo pensaba que me había tocado Dios, en la que se bajó del escenario para darse un baño de masas junto a su público mientras preguntaba por dónde andaría su madre. No me puedo imaginar lo orgullosa que estará de que su hijo haya llenado de alegría y modernidad una Castilla que injustamente se vende como triste y desolada.
La última cantante en subirse a uno de los escenarios principales fue Nena Daconte, que fue la gran sorpresa de la noche. Tras el derroche de energía de Barry B y Carolina Durante, nadie esperaba que a quien conocíamos como una cantautora íntima fuese a abrir su show con un beat y estilo de rave cercano a Zahara, vestida además con un mono de pedrería similar al lucido por Chanel en Eurovisión. La artista abrió su concierto con Tenía tanto que darte, y demostró no estar dispuesta a quedarse atrás ante el resto de divas españolas, con un repaso por sus hits melancólicos, como el encargado de cerrar, En qué estrella estará, pero con la mente abierta a explorar nuevos sonidos y formas de entender la música.
Antes de irnos, cerramos la noche con el DJ set de Elyella, que hicieron un repaso por los temas de algunos de los artistas más sonados en las pasadas jornadas de Sonorama, como Ginebras y Zahara, además de algunos de los que podremos escuchar en la presente y penúltima jornada de bandas como Dorian o La La Love You con su mezcla de indie y electrónica. Sin duda una despedida por todo lo alto para repasar los hits que bailaremos hoy, en una noche que promete hacernos sudar como ninguna con actuaciones como las de Delgao o Delaporte.
