Sinna ha hecho el álbum que tenía que hacer, y lo ha sacado en el momento en que tenía que sacarlo. Su recorrido entre las bambalinas de la creación artística durante años y su asociación a Sins Art Company, el colectivo de artistas e influencias, le ha dado el bagaje que ha hecho posible Unknown Love, su primer paso adelante como artista en solitario y el balance de todo lo que sabe, es, hace y busca. 
La diversidad de culturas y filosofías que ha experimentado Sinna a lo largo de su vida han conseguido que conciba el arte como una forma de compilar todo lo que nutre su alma y cerebro. Y, en consecuencia, de lanzar su primer trabajo buscando la fusión y cohesión del afro, ambient y electrónica, del español, inglés y árabe, y de la creación solitaria y en conjunto. Lo que él mismo define como un acto “de amor, de fe y de creación colectiva”. La salida de su álbum debut le trae en conversación con ACERO sobre la inspiración, el trabajo colectivo, los problemas del emergente e hiperconsumo, y la búsqueda y/o el entendimiento del amor.
Llevas tiempo en la industria como productor, compositor y cantante de rap, pero Unknown Love, tu álbum debut, llega tras años cultivando el camino. ¿Por qué ahora?
Sentí que ya era el momento de poder ofrecer un proyecto sólido individualmente. Siempre he trabajado en equipo, vengo de ganar toda mi experiencia gracias a mi equipo y sentía que era el momento de plasmar únicamente mi visión como un reto personal de mejora. Trabajar en equipo está muy bien, pero a veces you gotta do it alone para poder ofrecerte más a ti mismo y a las personas con las que trabajas.
Como artista emergente, ¿a qué retos sientes que estás condenado a enfrentarte en el lanzamiento de un disco? ¿Sientes que esta etiqueta te ha limitado a la hora de crear, o que te ha impulsado como acto reflejo?
A la competencia del consumo constante, a como hacer que la gente decida que mi música es la que tienen que escuchar y no la de todos los artistas que ya están fuera, y todos los que ya lideran el panorama. Hoy en día siento que con las redes sociales se ha convertido en un sin vivir el tener que luchar por la atención de los espectadores; cada vez consumimos más rápido y disfrutamos menos de las cosas. No me gusta nada la etiqueta de artista emergente, me parece un poco peste, la verdad, aunque en realidad es lo que somos, ¿no? Artistas emergiendo de nuestra forma de ser en la industria musical.
Pese a que el disco no ha visto la luz de forma oficial hasta ahora, las listening premieres tuvieron lugar entre noviembre del año pasado y enero. Es, quizás, otra de las condenas del artista emergente. La espera. ¿Cómo has llevado este proceso?
El álbum tenía que haber salido antes, pero a veces las cosas son diferentes a lo que esperabas. Los procesos de un artista y su vida personal están completamente desequilibrados con el ritmo de consumo de la gente y lo que esto te obliga a ofrecer. Un artista necesita tiempo, sobre todo porque, aparte de ser artistas, seguimos viviendo, y muchas veces pasan cosas con las que no contamos. Todo eso forma parte del juego. ¿Cómo lidio con todo lo que conlleva existir mientras tengo que hacerlo al ritmo que exige el mundo? Al final del día también pienso: no hay nadie esperando nada mío aún ahí afuera, la gente consumirá la música cuando esté.
“A veces un sentimiento solo puede desbloquearse y llegar a él cuando se comprende algo. Pero otras veces es el sentimiento el que te hace tomar consciencia de algo.”
Tu experiencia en la industria detrás de bambalinas hace que partas con ventaja en un mundo tan cambiante y competitivo. Pero el camino del artista con un proyecto individual está lleno de primeras veces. ¿Cómo ha sido este proceso? ¿Sientes que ha existido un equilibrio entre el bagaje que proporciona la experiencia y todo lo que hay que desaprender para construir una nueva etapa?
Siempre he tenido mucha suerte y agradezco mucho a la gente que ha confiado en mi visión y de la que me rodeo porque siempre han sido un círculo inspirador que me ha impulsado a ser mejor, a cultivar mi criterio y a hacerme sentir yo mismo. También me ha brindado múltiples oportunidades que no habría podido conseguir solo, desde luego.
Es cierto que a la hora de ponerte a trabajar de manera individual llega siempre esa duda de si esto es lo correcto o si estoy yendo por donde quiero dirigirme. Creo que darte el tiempo de apartarte y trabajar contigo mismo es una forma muy buena de descubrirte, no solo como artista, sino también como persona. Cuando estás creando desde emociones y percepciones tan abstractas, y estás tú solo sentado frente a la obra que está empezando a nacer, es muy importante tener conversaciones contigo mismo para llegar verdaderamente a ti. Es muy duro lo que se consigue a través de sesiones de autoencuentro o autoescucha, como las que he estado trabajando con Violeta, la directora creativa y ejecutiva del proyecto. Ella me acompañaba con preguntas y reflexiones clave que han ayudado a que verdaderamente se materializara lo que yo sentía que se estaba generando dentro.
Es un proyecto músico-audiovisual, y cada canción cuenta con su respectivo acompañamiento gráfico. Un poco como con el huevo y la gallina, ¿qué fue primero, el sonido o el audiovisual para Unknown Love?
Todo empezó en el pensamiento, algo que Violeta y yo nos encargamos de trabajar mucho. Lo primero fue tener claro qué era lo que queríamos transmitir y cómo transmitir este mensaje para que pueda llegarle a todo el mundo.Todo fue fluyendo a un ritmo continuado, pero diría que fue un proceso de pensamiento, sonido e imagen.
La parte visual no solo acompaña al sonido, sino que lo expande. Añade una dimensión más clara donde el público choca de frente con la búsqueda del amor y significado que añora la lírica. ¿Uno nace del otro o se retroalimentan?
Siento que se retroalimentan y que los visuales que Milo trabajó no hubieran sido lo que eran si la música y el trabajo previo de ideación hubieran sido distintos. Funcionan como un engranaje que hacen llegar el mensaje de manera más fácil.
Además, en la parte visual del álbum, todos los temas aparecen traducidos al inglés, español y árabe. ¿Por qué era importante para ti incorporar esa pluralidad lingüística?
Unknown Love es algo que queremos que todo el mundo entienda. Y es parte de la propia historia del álbum. La primera listening premiere la hicimos en Marrakech. Esto fue un punto de inspiración y un motor importante, por lo que el árabe está presente no solo en los visuales, sino también en la estética y en el sonido del álbum. UL se alimenta de la vida y se expande con ella. Siento que no es algo que va sólo de música. Queríamos que fuera algo que pudiera llegar más allá.
Llama la atención la dualidad de las letras que componen el álbum. Arranca hablando sobre un facha apostando por un gol de Lamine Yamal en el Codere y salta a la séptima pista haciendo una crítica social al vacío al que nos llevan los ritmos impuestos. ¿Cómo conviven la ironía y la profundidad, lo banal y existencial, en tu obra? ¿Y en Unknown Love?
Con Unknown Love he intentado reflejar la experiencia al desconocido que supone existir y vivir en este mundo y a día de hoy. He intentado plasmar cómo todo esto me ha hecho sentir. Por ello, todo es como un continuo reflejo de lo que percibo del exterior, de cómo todo eso me atraviesa y de cómo me siento yo por dentro.
Hablas del impulso de lanzarse a lo desconocido del amor sin miedo. ¿Puede algo entenderse antes que sentirse?
A veces un sentimiento solo puede desbloquearse y llegar a él cuando se comprende algo. Pero otras veces es el sentimiento el que te hace tomar consciencia de algo. Depende de la lección que toque en ese momento.
En Unknown Love confluyen la atmósfera ambient, los ritmos afro y el sonido electrónico. Es una clara muestra de identidad, pero también de experimentación. ¿De dónde parte este equilibrio, esta mezcla de influencias?
Es un conjunto de todo lo que he trabajado en los últimos años, tanto con Sins Art Company como por mi cuenta. Unknown Love es la síntesis de todo lo que me representaba. Y además, soy una persona que ha crecido en la mezcla y en la experimentación de muchas culturas, filosofías y formas de vivir. Así que siempre ha sido muy natural en mí el disfrutar mezclándolo todo y el nutrirme de diferentes sonidos y culturas para expresarme.
“Me encantó el hecho de meter a toda la gente posible con la que encajase el proyecto porque lo más sano de todo esto es que sea un movimiento y una unión. Que sea algo que compartamos.”
¿Cómo ha sido el proceso de producción para lograr la cohesión y equilibrio entre géneros tan aparentemente distintos?
He tenido la suerte de contar con Kenzie, uno de los productores de mi colectivo. Ha sido uno de los que se ha encargado de la dirección del sonido para que todo tuviera un sentido. No buscábamos hacer un popurrí de cosas sino que tuviera sentido y armonía tanto sonora como enérgicamente.
El álbum rebosa de colaboraciones. Wamu, Hll6oy, Yeyor, Kyne, Wekaforé, o Angie Beer son algunos de los artistas que han aportado su grano de arena. Además, perteneces a Sins Art Company, un colectivo de jóvenes artistas DJs, cantantes, productores y diseñadores, entre otros. ¿Qué significa crear en colectivo y cómo influye esa dinámica compartida en el resultado final de tu obra?
Creo que esto es lo más Unknown Love que hay y es una de las cosas que nos daba un poco de miedo: al ser mi álbum debut y que estuviera lleno de  colaboraciones, ¿dónde está ese espacio para el artista principal? Pero siempre actué sin miedo. Me encantó el hecho de meter a toda la gente posible con la que encajase el proyecto porque lo más sano de todo esto es que sea un movimiento y una unión. Que sea algo que compartamos. Lo que más me gusta y siento de verdad en el concepto del álbum es que esto es para todos.
La existencia, el vivir sin miedo, el vivir desde el amor hacia todo lo que tenga que darte la vida. Esto es para todos, para todo tipo de personas. No hay razas, no hay identidad ni género, ni nada que frene este tipo de concepto. Es algo que debería ser multicultural y mundial. Unknown Love va de amar, de vivir y ser sin miedo a lo desconocido. Es una de las cosas claves para mí. Quería representarlo de tal manera que, al ver el tracklist, se pensara: Madre, hay un montón de gente aquí. Quería que este proyecto formase parte no solo de mí, sino que fuera una extensión de los artistas con los que me codeo y a los que respeto: su cultura, su visión y su movimiento.
¿Cómo influye formar parte de Sins Art Company en tu identidad como artista y en la dirección de tu carrera artística?
Sins Art Company es esa familia, ese escalón de apoyo que sé que tengo gracias a no solo mi trabajo, sino el de mi colectivo. Duke, Dua, Wamu, Kenzie, Rambo, Vloner, Del Toro o Razz. Sé que haber estado a su lado, haberme criado con ellos y haberme criado como artista viéndolos me ha puesto en un nivel de exigencia y de criterio que me ha hecho llegar a poder hacer proyectos como los de hoy. Y no solo eso, sino que nos apoyamos muchísimo y sé que todas las oportunidades que me llegan a mí son para ellos, y viceversa. Tengo la suerte de contar con un equipo y una familia que sé que si pasa algo, si necesito algo, me respaldan, y eso me motiva a hacerme más fuerte y me ayuda a moverme. Allá donde voy sé quién soy y qué represento, y eso es algo que me llena de respeto hacia ellos.
¿Cómo se desarrolla el proceso creativo cuando es compartido en comparación con cuando es individual?
Ambas maneras de trabajar tienen sus cosas buenas, pero cuando estás en un grupo más reducido o cuando estás tú solo, la visión y el proyecto puede que sean más fáciles porque la última palabra es la que cuenta. Pero también es más difícil porque, ¿qué te hace pensar que lo que estás haciendo lo estás haciendo bien o es exactamente lo que tenías que hacer? Todo va de estar cada vez más conectado contigo, de cultivar tu certeza interior y de escuchar cada vez mejor esa voz que te dice ‘es por ahí’.
Y ahora que Unknown Love ha visto la luz, ¿qué toca?
Hacer que Unknown Love llegue lo más lejos posible y mantenerlo con vida a la vez que seguir alimentando nuevos proyectos en los que ya he empezado a trabajar y no tienen absolutamente nada que ver. Lo nuevo mantendrá mucha de mi esencia, pero desde un punto de vista mucho más crudo. Pero lo más importante que toca ahora es dar conciertos, expandir este concepto, expandirnos a nosotros, expandir la música, expandir a todos los artistas que han trabajado en esto y poder llegar a los corazones de la gente. Y conectarse cada vez más con la Unknown Love era.