Sienna

Sienna es un músico valenciano que utiliza sus canciones como un mero canal, como una fotografía de un estado concreto que acaba convirtiéndose en un discurso y universo con el puro fin de ser comunicado. Me he hecho muchas veces la pregunta de, ¿estás justo dónde quieres estar? O, ¿por qué haces música? Parece que siempre doy con la misma respuesta. Lo primero, porque me hace feliz y lo necesito, y lo más importante, porque conecto conmigo y con los demás. En los directos es donde se cierra el círculo y logro entender por qué hago lo que hago.

Siempre me ha interesado mucho construir mi propia forma de entender y articular mi música. Tal y como te comentaba antes, de dar con ese discurso personal e intransferible. Aquello que es solo tuyo y que tan solo tienes que dar con el modo de extrapolarlo, materializarlo y hacerlo tangible. Lo importante nunca es el qué, es el cómo; la forma en la que cuentas las historias, el modo en que utilizas tu voz y cómo lo expresas. Por eso, en mi música siempre estoy en constante búsqueda y experimentación. No sé repetir la misma fórmula porque, aunque por supuesto mantengo la coherencia y la esencia al componer, intento ser honesto con la etapa en la que me encuentro en cada momento y el tipo de producción que necesita mi música.
En estos años he tenido la suerte de colaborar con Alberto de Miss Cafeína o Gabri de Shinova y ha sido precioso poder escuchar cómo las historias que escribí cobraban vida en sus voces. Telonear a Vetusta Morla también fue uno de los momentos más bonitos de mi carrera, pero, al final, dejando a un lado esos regalos que a veces te da la vida, creo mucho en las salas y en el directo y en la bidireccionalidad entre público y artista. Esa magia que solo sucede en el aquí y ahora y que hace que todo vaya creciendo. Poder disfrutar ese proceso me parece lo más bonito de este oficio.

En todos mis trabajos siempre hay una historia personal o ese algo que me remueve por dentro o que me genera interés y curiosidad. En mis primeros trabajos, el discurso era toda una crítica social a los prejuicios, a los estereotipos y a todos esos mensajes que nos impactan casi como disparos. Siempre me ha generado mucha curiosidad cómo nos influyen nuestro entorno, cultura y sociedad, cómo nos relacionamos entre nosotros y qué elementos nos mueven y se convierten en el motor de nuestras vidas. Más tarde, con Melancolic, pasé por una etapa algo destructiva y todo eso se vio reflejado en esas canciones que fluctuaban en la nostalgia y en ese punto luz que, a veces, encontramos en esa tristeza permanente. En la actualidad, con Trance, todo va a ser muy distinto.
Respecto a mis referentes, en mi casa siempre ha habido mucha tradición de la música de raíz y del bolero. Evidentemente, vas creciendo y te vas enriqueciendo de muchos otros géneros y en este momento, proyectos como El zar, Isla de Caras, Men I Trust o 1975 me parecen esenciales en mis playlists. Y por supuesto, artistas como Stevie Wonder, Tina Turner, Florence & The Machine o Jeff Buckley. Me gustan muchísimas cosas.

Fuera(x3) va a ser el tema que introduzca de forma más drástica todo el universo de Trance. Ese trabajo habla de enajenación, de catarsis, de desdoblamiento, de liberación. Por eso, en Fuera(x3) es tan importante ese punto de contraste cuando entra el estribillo, porque es el momento en el que explota toda esa rabia interna en forma de liberación. Un impacto que no es más que la respuesta desesperada cuando queremos sacar de nuestras vidas a todas aquellas personas que nos hacen daño y que parece que disfrutan con ello. “A veces puedo ver, verlo todo más claro”.

Las interpretaciones de las canciones siempre son muy abiertas y creo que es lo bonito. Dependiendo del contexto y circunstancias de cada persona el significado puede ser muy distinto. Creo que hay algo en el tema que te transporta a ese concepto de liberación, a ese punto de transformación que responde en la mayoría de los casos a una experiencia profunda que te hace abrir los ojos respecto a lo que quieres en tu vida.
Para mí representa justo ese momento catártico que explota sobre todo cuando estoy en el escenario. Necesitaba extrapolar ese alter ego y unir a la persona y al músico que, en muchas ocasiones, difieren entre sí pero que, en cambio, se retroalimentan sin parar. Quería retorcer mi propia imagen y mi propio concepto hasta que sea la propia obra la que se defina por sí sola.

La relacionaría con un sentimiento de expansión, de dejar la rabia acumulada, de, al fin y al cabo, soltar. Muchas veces, tal vez por esa sobreexigencia, percibo la industria y el entorno laboral (no el más cercano) como un entorno de juicio a punto de disparar. En este tema, no dejo que sean los demás los que den el primer paso, sino que el primer disparo lo doy yo.

De mí mismo.

Creo que mis canciones siempre van a tener ese punto nostálgico pero con ese elemento liberador. Lo que cambia es el momento vital en el que me encuentro en cada disco. Para mí, cada trabajo es como una fotografía de mi estado anímico, y ahora el cuerpo me pide expansión, experimentación y no tener ese susurro constante en la sien que te boicotea. Le tengo mucho respeto al oyente y a la música y me tengo mucho respeto a mí. No quiero lanzar nada que no sea honesto conmigo pero, por supuesto, no quiero frenarme por mis juicios personales. Esta nueva etapa va de eso, de dejarse llevar por esa pulsión interna.

A pesar de que me suelen incluir en esa etiqueta, creo que ya está todo muy diluido y nunca me he sentido cómodo en las categorizaciones. Simplemente hago música e intento ser honesto con lo que hago en cada momento. No voy a repetir una fórmula que me funcionó en el pasado simplemente porque es lo que la gente puede esperar de mí. Creo que mi público ha entendido que necesito rascar y escucharme todo el rato para avanzar y para seguir contando historias.
En Fuera (x3), encontramos un drum & bass que, en su momento, se relacionó con otros estilos musicales como la electrónica. Creo que es el punto es actuar como un embudo: hacer de tu cultura, tus conocimientos, tu entorno, tus influencias un canal que desemboquen en la construcción de tu propia identidad.

La sociedad, la forma de relacionarnos, la tristeza, la euforia… Me interesan mucho esos pequeños detalles que van haciendo montaña en la vida de cada persona y la van modificando hasta el punto de transformarla por completo. Todo eso forma parte de aquello que me inspira y me remueve.

Estoy en plena grabación de Trance, mi nuevo trabajo. Al igual que con Fuera(x3), se irán sucediendo los singles a lo largo de estos meses combinándolos con la gira que empieza en marzo. Estoy feliz porque es el tour más ambicioso de mi carrera y estoy deseando ver cómo responde la gente y cómo conectan los temas de este disco. Así que estás invitadísimo a venirte al concierto que mejor te venga.