¿Alguna vez has sentido tocar el mismísimo cielo de amor? Esa sensación es la principal inspiración tras Alto cielo, el nuevo EP de Queralt Lahoz. Cuatro canciones que representan cada una de las fases del enamoramiento, desde la vertiginosa emoción inicial, hasta la sosegada paz del perdón tras la ruptura. Un mix flamenco-electrónico que tan bien caracteriza a la catalana.
El proyecto termina de enmarcarse con el videoálbum dirigido por Adrián Martos y publicado en Filmin, una pequeña película que acompaña al sencillo No me salves y que recuerda a proyectos tan virales como los producidos por The Blaze. Martos presenta un corto que se emplaza en un territorio obrero no definido, un barrio como puede ser el tuyo o el mío, con una historia de desamor igualmente universal. Pitis, amigas, corrillos flamencos y caricias de despedida. Alua Tega y Salim Daprince protagonizan esta estética ruptura narrada por las melodías de Queralt, que replican al tan famoso poema de Benedetti. 
Fede Jahzzmvn firma la producción de toda esta némesis celestial, a quien habíamos visto ya trabajar con Queralt en ocasiones anteriores como en En otro lugar o Blade. En este caso, son tres de cuatro las canciones que produce del EP, y en todas mezcla sin miedo la música de raíz con sintetizadores, bombos potentes de club, y superposiciones de voces. Una dirección musical que en Queralt ya podíamos apreciar en Drogas caras en 2019, en la aurora de su consolidación como música profesional. Y además, mi canción favorita de ella. 
Track favorito: No me salves