Alejandra Smits está a la caza. A la caza de sensaciones, emociones, y verdades sobre lo que le pasa, a ella y a todos. Mediante la palabra, el cuerpo y los memes, Alejandra ha labrado un lenguaje digital propio con el que expresarse, y sus mensajes han hecho mella en la psique de muchísimos de nosotros, que nos vemos reflejados en sus dudas, afirmaciones, y bromas.
Tras seguir la pista a Alejandra durante varios años, y ahora que su vida está a punto de dar otro vuelco –se avecina proyecto de dirección y maternidad–, me siento con ella para hablar de básicamente todo: la vida, la muerte, y lo que hay entre medias, es decir, chats con extraños en internet, experiencias psicodélicas, y tormentas tropicales en Miami.