Después de mucho tiempo fuera del foco, Picasso renace con un proyecto que no solo celebra su regreso, sino que redefine su identidad musical. El artista, anteriormente conocido como Selecto Picasso, se sumerge en su propia historia para construir un álbum que mezcla lo íntimo, lo crudo y lo conceptual. En esta entrevista nos habla de su cambio de nombre, del proceso creativo detrás de Picasso, de los años de pausa voluntaria y de cómo ha aprendido a hacer música sin presión. También repasamos sus colaboraciones, su visión del panorama actual del rap y lo que significa, hoy, el éxito para él.
Antes de nada, quería preguntarte por el cambio de nombre. Aunque cuentas un poco esto en el vídeo promocional del disco, ¿a qué se debe esta vuelta a Picasso dejando atrás Selecto?
Desde que he vuelto a la música después de estos años sin sacar nada. Como dices, cuento un poco en el vídeo que subí como de manifiesto: en mis inicios mi nombre artístico era GP, por las iniciales de mi nombre, Gonzalo Picasso. Pero mi pareja de aquel entonces me decía: tú eres tonto, ponte tu apellido. Además, siempre que me buscaban salía Moto GP. Esto te estoy hablando de 2013 o así.
Luego me puse Picasso, ya desde los inicios. Pero más adelante, cuando me profesionalicé del todo, me puse Selecto Picasso por darle la distinción. Si buscabas ‘Picasso’, salía el pintor. Ahora, al volver, he querido retomar el nombre original. Es mi apellido y me parece que tiene más empaque. Tampoco tiene muchas vueltas. Recuperar mi nombre, que me parece que es mi esencia y está más guapo.
También vi que Selecto era por un disco tuyo que ibas a lanzar y nunca salió, ¿cierto?
Efectivamente. Selecto iba a ser un disco muy especial porque quería producirlo yo entero. Lo que pasa es que era mucha locura y desistí, la verdad. Siempre he grabado mis temas, me los he mezclado y los he masterizado. Pero claro, si a eso le añades producciones, te vuelves loco, tío. Por eso al final no salió adelante, era demasiado curro.
Lo acabas de comentar y era un poco lo que quería que nos contaras antes de entrar en materia, estos años que te has tomado fuera del foco. En 2023 sacaste algunos singles, después de Luz propia, que era tu último gran trabajo. Desde entonces no hemos visto prácticamente nada tuyo. Cuéntame un poco qué has estado haciendo y el porqué de este parón.
Han sido dos años, sí, prácticamente, desde 2023 a 2025. En 2022 hice Luz propia, como bien dices, y luego estuve en algún remix con Burgas y con Dirty Suc. Otro con el D.Valentino, Medina Kid y el Efflex. Y algunos singles y demás. Luego saqué un tema para el proyecto del Kas Rules, Blockchain, en 2024. Pero quitando eso no he sacado absolutamente nada.
He estado encerrado en el estudio componiendo un montón, pero estaba en una época un poco rara, sobre todo en 2023. Quería quitarme la presión de… no sé, tío, iba al estudio, estaba componiendo una canción y pensaba, ¿y esto dónde lo saco? ¿Dónde lo meto? ¿Cómo está? ¿Tiene sentido? Estaba componiendo cosas muy locas, muy dispares unas de otras, y eso me rayaba mucho, no me dejaba disfrutar totalmente del proceso. Fue una manera de alejarme de esa presión, por así decirlo, de poder componer en el estudio libremente sin pensar ni cuándo iba a salir, ni por qué, ni cómo.
Entonces, he estado dos años sin sacar nada pero componiendo un montón. No ha sido un tema de falta de inspiración o de ganas, sino una liberación y un descanso de la presión de tener que sacar todo lo que hacía y poder trabajar tranquilo. También estuve con un socio, con el que montamos una editorial juntos y un estudio en Madrid. Es decir, que no he estado para nada alejado de la música durante todo este tiempo.
¿En qué momento esto cambia y dices, voy a hacer un disco, o, me siento preparado para empezar a sacar música de nuevo?
La idea inicial era volver con un álbum de estudio largo, de entre dieciséis y dieciocho temas, pero pensándolo estratégicamente me parecía demasiado loco llevar dos años sin sacar nada y de pronto lanzar tanta música de golpe, como que igual iba a chocarle mucho al público. Me pareció mejor idea sacar los inéditos a modo de recopilación de temas, un poco más antiguos, de la etapa más de 2023, para que la gente supiera que habíamos vuelto pero poco a poco. Calentar el terreno para dar pie a Picasso, que ya era el álbum, el trabajo más conceptual, que era verdaderamente lo que quería sacar. Todo tenía más sentido así.
Antes incluso de los inéditos, tu primer tema después de volver a la música este año fue Automático, que además sorprendió por la colaboración con Harry Bass y Yvngrobv. ¿Cómo surgió este tema?
Cierto, fue el primer single, y además iba con vídeo y con la dirección creativa que hizo Blanca. Quedó brutal. En principio iba a ser un adelanto a un disco o un trabajo más serio, pero ahí se quedó, sinceramente. También por lo que te digo de no quemar demasiado e ir captando la repercusión poco a poco.
Entrando de lleno en Picasso, quería preguntarte, por el título, que puede parecer obvio, pero quiero saber todos los matices. Y sobre todo también que me cuentes más sobre la portada y el guiño a la figura de Pablo Picasso, que es la primera vez que sucede en tu carrera pese a tener el mismo apellido.
Tanto el título como la portada y el propio concepto del álbum son bastante personales y se han ido gestando mediante el proceso creativo. Siempre he funcionado así, no pienso primero en el concepto, sino que a medida que voy haciendo la música, diseñando el track list y demás, me aparece el sentido de todo para ligarlo.
A raíz del cambio de nombre, al cual tampoco le di demasiada bola, dije: joder, me parece una forma perfecta de anunciar esta transición con el aka y, también, de explotar las referencias de las pinturas de Pablo Picasso, que nunca había hecho, por su concepción de machista, mala persona y tal. Por eso siempre había tenido reticencias a usarlas. Tenía siempre un debate interno con eso, pero al final decidí que no pasaba nada por hacer ese guiño únicamente en lo artístico y sabiendo separar obviamente esos valores.
También me gustaba mucho una frase muy polémica de Pablo Picasso en la que dice: “los buenos copian y los genios roban.” Investigué un poco y la frase no es ni suya, él mismo la robó. Esa vuelta me gustó, ese apropiarse de las cosas me parecía que podía también entrar en el concepto. Y yo le he robado El Guernica, por así decirlo.
Justo iba a preguntarte por la portada, ¿cómo la has diseñado?
Es un cachito de El Guernica, mi trozo favorito, la estética me parece que quedó perfecta. Me estuve informando de los derechos y de cómo podía hacer para usarlo. Decidí coger esa parte y meterla en ChatGPT, y le pedí que lo rediseñara haciendo que se pareciese lo máximo posible al real, el del cuadro. Quedó justo lo que buscaba.
Aparte de eso, esto ha sido pura casualidad, pero una amiga mía tiene una chaqueta customizada con esa parte del cuadro, con la que aparezco en los vídeos de promoción del disco, me pareció brutal. También vamos a sacar un merchandising que irá por esa línea, claro. Todo ha encajado solo, ¿sabes?
En la intro del álbum nos enseñas lo visceral y nostálgico que va a ser: hablas de tus comienzos y también del presente, con muchas menciones a otros trabajos importantes tuyos como Madriles. ¿Qué es lo que más te enorgullece cuando miras atrás?
Joder, ¡qué buena pregunta, tío! Pues no sé, creo que en la intro queda bastante claro: esa visión un poco nostálgica pero a la vez de orgullo de todo lo vivido. Todo este tiempo que llevo dedicándome a la música. Empecé en 2013, pero te diría que desde 2020 me lo he tomado muchísimo más en serio. Son cinco años y han pasado muchas cosas. Es mucho tiempo y a la vez siento que se me ha pasado volando. He crecido un montón, he cambiado mucho. Ahora tengo veintiocho, cuando hice Madriles tenía veintidós o veintitrés.
He pasado por muchas cosas y he hecho de todo: he estado viviendo en Vallecas, luego estuve en Pozuelo en casa de un colega, volví a Aravaca y a Las Rozas, de donde yo soy, también he estado un tiempo en Valencia. Y viviendo un millón de cosas gracias a todo esto, a la música. Estoy superorgulloso de poder dedicarme a ello y seguimos haciendo para poder vivir de esto toda mi vida.
“Haciendo rap más clásico me siento muy bien porque es lo que llevo haciendo desde siempre, pero siempre me gusta ponerme retos e investigar con la música. Nunca he querido encasillarme en un solo estilo.”
El segundo track, 1kvainas, es mucho más oscuro, mucho más trap, bastante parecido a la estética que vimos en Luz propia. ¿En qué sonido dirías que te sientes más cómodo de todas tus facetas dentro del rap?
Sí, total, es muy Luz propia. En cuanto a dónde me siento más cómodo, no sabría decirte exactamente. Haciendo rap más clásico obviamente me siento muy bien porque es lo que llevo haciendo desde siempre, entonces es lo que más fácil me sale. Pero siempre me gusta ponerme retos e investigar con la música, nunca he querido encasillarme en un solo estilo, dentro de que todo lo que hago es rap, eso está claro, pero hago y escucho mucha música distinta. Siempre me mola coger otras referencias de otros estilos.
Te quería preguntar por los audios que se escuchan en los tracks Todo bien :): (en el puente) y Skit (al final). Además, ambos temas son, aunque diferentes en cuanto a la pista, muy potentes líricamente y muy personales ¿Quiénes son las personas que hablan y por qué decidiste añadirlas?
Fue bastante orgánico. En Todo bien :): había una outro, pero escuchando el disco entero decidí quitarla porque se me hacía larga. Entonces el puente se me quedaba muy vacío y decidí que tenía que meter algo ahí. Escuché ese audio, que es real, y fue como: esto es. Me parecía que conceptualmente iba mucho con el tema. Me lo mandó un amigo mío de toda la vida, se llama Raúl. Y no sé, un audio de un colega tuyo de toda la vida, siendo sincero contigo y preocupado por ti, lo vi muy acorde para meterlo.
El del final en Skit es un señor que nos encontramos por la calle, que tenía noventa años o así. Hablaba sobre música y cantaba, solía estar siempre por el barrio. No sé, caí en el audio suyo que tenía guardado por ahí. Me ponía los pelos de punta porque él es ciego, pero todo el rato hablaba del miedo de mirar a alguien, me pareció la hostia.
Me llamó mucho la atención el tema hemoscambiao_2021.mp3, tanto por el nombre como por las voces. Cuéntame un poco sobre ese tema. ¿Quién es Pray for Peter?
Es una canción muy especial, es de 2021, de ahí el título. La teníamos por ahí guardada en el ordenador y ese era el nombre del archivo. La escuché y me cuadró para el álbum. Intenté recuperar el proyecto entero del tema o la versión wav, pero al final se quedó la versión de 2021 tal cual, del día que la hicimos. Es literalmente el archivo mp3 que exportamos ese día.
Pray for Peter es uno de mis mejores amigos, con el que empecé a hacer música. Anteriormente se llamaba Ordóñez, tengo bastantes temas con él. Me pareció que tenía mucho sentido que en un álbum tan personal apareciese. Me hacía gracia porque el tema se llama hemos cambiao y es de 2021; imagínate si habíamos cambiado por aquel entonces, ¡lo que habremos vuelto a cambiar cuatro años después!
También quería preguntarte por las colaboraciones en los últimos temas, sobre todo en Enterpric€: Al Safir, Soukin, Seijas y xbeats90. Cuéntame cómo surgen y el proceso de estas canciones.
Pues bastante orgánico todo, prácticamente todas las colabos son con amigos. La de Jime y Fabbi surge porque nos conocemos del anterior estudio en el que estábamos, en Lavapiés. Teníamos un grupo de chavales, como tres o cuatro estudios en el mismo local, cada uno con su rollo y estilo. Estaba yo con el Rasta y con Leo, que son los chavales de la Sierra, de Botellas Vacías, es un grupo muy mítico de la época de las batallas de Madrid. Luego estaban los chavales de la CSQ, un grupo también de rap donde estaban el Bnet, El Minus, el Mateo Memataron y toda esta gente. De ahí conocí a Jime, que me consta que ya escuchaba mi música. Por otro lado estaba el Fabbi también, que es productor. Molaba ese rollo porque había varios estudios, tres grupos de Madrid distintos, pero siempre nos juntábamos ahí a beber y a hacer música.
Con el Al Safir nos conocemos desde hace también cinco o seis años. El combo con Soukin, Seijas y xbeats me hace bastante ilusión. De hecho, habíamos quedado para hacer un tema Al Safir y yo y fue un poco improvisado todo. Vino el xbeats, que había currado en el disco del Recycled con Soukin y tal. No recuerdo ahora mismo cómo se llama el tema, pero bueno. A mí me flipaba su producción. Nos juntamos con Seijas e íbamos a hacer el tema Al Safir y yo, que iba a ser para otra cosa, pero de repente, no recuerdo si nos llamó Soukin o le llamamos y dijimos: oye, tú, que estamos aquí, vente.
Me hace especial ilusión el tema porque nos juntábamos un montón en la época de la cuarentena, en el estudio de Seijas. Era cuando había toque de queda, se podía salir hasta las doce o algo así. Quedábamos para tomar algo y luego nos juntábamos en el estudio y echábamos toda la noche ahí. Vamos, días y días, noches y noches. Y no grabábamos. De ahí no salió ni un solo tema porque no le dábamos a grabar ni una sola vez. Pero bueno, improvisábamos con el autotune, poníamos música, por pasarlo bien. De ahí sale esa unión.  A lo mejor desde fuera alguien que no sepa la historia o que no nos conozca puede parecer un poco raro, pero es una conexión muy fuerte la que tengo con ellos.
Después de haber vuelto a la música y sacar este disco tan importante para ti, ¿en qué punto te encuentras tanto artística como emocionalmente? ¿Te sientes en equilibrio?
Estoy muy bien, a nivel personal sobre todo. Todo este tiempo he estado bastante alejado de las redes, eso me ha venido genial. He ido al psicólogo también. Me siento mucho más en paz conmigo mismo. Respecto a la música, me siento tranquilo, el lanzamiento de Picasso ha ido guay, a la gente le ha molado mucho. El recibimiento ha sido muy bueno. Creo que el formato single no es lo que más va conmigo, me gusta hacer cosas más conceptuales, para escucharlas como una obra entera. Estoy muy tranquilo.
“Ver a gente fascista rapeando se me hace un poco meme, me río de eso. Más que enfadarme me parece que no hay que tomárselo en serio.”
¿Qué significa el éxito para ti?
Te diría que ya lo tengo: estoy dedicándome a lo que me gusta. He tenido momentos más álgidos y otros más bajos, pero desde la cuarentena este es mi curro y sigo peleando para que lo sea toda mi vida. Eso te diría, dedicarme a lo que me gusta es el éxito.
Me interesa saber, siendo alguien que lleva muchos años en esto, ¿cómo ves la situación actual del rap y el underground en España?
Como en todo, hay cosas que están muy bien y otras que no tanto. Es el mejor momento para la música under en España. Hay muchas oportunidades, cualquier chaval puede hacer música con el móvil mismo. Dejándote muy poco dinero se puede hacer una mixtape y sacarla, eso antes no existía. El hecho de hacer cosas relevantes relacionadas con la música también. Por ejemplo, tú me estás haciendo esta entrevista. O hay managers, promotores, cámaras, filmmakers. A nivel de industria, muy bien.
Quizás la parte musical está un poco quemada y captar a la peña es chungo. La rapidez del contenido también juega en contra para gente como yo, que le gusta hacer álbumes y trabajos largos. No se disfruta tanto eso. Pasan tres semanas y parece que la gente ya se ha olvidado de tu trabajo y necesita más cosas y eso hace que se pierda la música real.
¿Qué opinas de que mucha gente de derechas esté haciendo rap?
El rap empezó siendo una protesta, algo ideológico, pero ha ido evolucionando. Yo nunca he hecho rap reivindicativo tampoco. Obviamente, ver a gente fascista rapeando se me hace un poco meme, me río de eso. Más que enfadarme me parece que no hay que tomárselo en serio, que lo escuchen los fachas si quieren. Pero también entiendo que si el rap se ha convertido en el mainstream, cualquiera puede hacerlo y no podemos hacer nada para evitarlo. Es normal que aparezcan raperos fachas.
Por último, quería preguntarte por la música que estás escuchando ahora mismo, lo que más te inspire, y por próximos lanzamientos o colaboraciones que te gustaría hacer.
Estoy escuchando, desde hace varios años, a M Huncho. My Neighbours Don’t Know, un disco suyo, me parece increíble. Estoy escuchando mucho la parte de UK rap, el Nemzzz y el Knucks, me mola mucho ese estilo que hacen. En España me encanta Samuel Petra, un chaval de Alicante si no me equivoco, hace R&B, me flipa. Judeline me pegó muy fuerte, y Rosalía, que estoy deseando que saque ya su álbum.
En cuanto a colaboraciones, se viene algo con el Delgao, tenemos un tema muy chulo que quiero sacar, no te puedo decir cuándo porque aún no sabemos, pero os sorprenderá mucho. Me parece un temazo, ya lo veréis. Y hasta ahí te puedo decir, tío.