Núria Just ya compartía parte de su visión en 2018 cuando la entrevistamos tras el lanzamiento de Morbid Laws. Cuatro años después, regresa con más seguridad y amor propio que nunca para hablar sobre su trayectoria como ilustradora, los proyectos que más le han marcado y qué significa ser artista digital hoy en día en España.
La creadora de contenido que está triunfando tanto en redes sociales como fuera de ellas con sus dibujos, nos confiesa la clave de su éxito: “La mayoría de situaciones y personajes que dibujo están basados en experiencias propias, en amigos, o en amigos de amigos”. Sus incomprendidos personajes no son más que el reflejo de la sociedad pero con matices irónicos y críticos, necesarios hoy en día. Su manera cercana de representar la realidad no ha pasado desapercibida para publicaciones como The New Yorker o proyectos como Sento Forever, que desde el minuto uno han apoyado su trabajo y no han dudado en colaborar con ella.
¡Hola, Núria! ¿Qué tal? ¿Desde qué lugar nos respondes?
¡Hola, ACERO! Pues recién levantada, trabajando en casa, que es mi estudio, un clásico. Espero algún día tener un estudio bien aesthetic.
En 2016 conversamos contigo y Alba Rihe sobre vuestro proyecto Morbid Laws, y dos años después nos encontramos de nuevo para hablar sobre tu carrera en solitario. Ahora que ha pasado un tiempo y después de tantos cambios vitales, ¿cómo te ves a ti misma, tanto a nivel artístico como personal?
¡Han pasado muchísimas cosas desde entonces! En la anterior entrevista, si no me equivoco, estaba en un punto más verde de mi carrera, con la autoedición y pequeños proyectos. Desde entonces he trabajado muchísimo y he crecido mucho profesionalmente, es donde he notado más el boom en mi vida. He podido participar en proyectos muy guays y tengo clientes importantes como el The New Yorker. Pero lo personal no se queda atrás, también he trabajado en mí y me veo mucho más empoderada. ¡Hasta he vivido en Corea unos meses!
Tomas la decisión de autoeditar tus fanzines e ilustraciones tras asistir al Gutter Fest, un festival para los artistas que escogen este camino independiente. Como profesional que ha invertido tiempo, dinero y recursos, ¿recuerdas el momento en el que sentiste que todo el esfuerzo invertido por fin se veía recompensado?
Esto va a sonar muy romántico, pero a cada edición que asistía del Gutter ya notaba ahí que valía la pena. No creo que nada caiga en saco roto. Tanto si vendes mucho como si no, solo con tener el feedback de la gente que se pasa y haber editado algo que tenías ganas de hacer, eso ya es muchísimo. Pero sí que hay una fecha que recuerdo, que es cuando me encargaron el primer póster para el Memefest, del CCCB. El team me descubrió en el Gutter y a partir de ahí los demás clientes fueron llegando a medida que hacía más pósters para otros clientes. Ha sido una cadena.
Desde entonces tu vida ha dado un giro de ciento ochenta grados, aunque hay algo que se mantiene igual: tu estilo. Personajes considerados fuera de lugar en situaciones cotidianas que esconden ligeras críticas sociales forman parte de ti, y aunque ya lleves numerosas ilustraciones, ¿qué características ha de tener una situación para que decidas plasmarla?
Que sea cercana. La mayoría de situaciones y personajes que dibujo están basados en experiencias propias, o en amigos, o en amigos de amigos. No hace falta que imagine mucho, lo que me pasa a mí y a mis amigos ya me interesa, tengo mucho material ahí. También me gusta mucho trabajarlo todo desde la ‘dramedia’; aunque hable o trate temas un poco bajoneros, siempre quiero darle ese toque sarcástico o de humor.
Cuando ya tienes la idea, ¿qué proceso creativo sigues para conseguir que tenga un sello propio tan original?
Siempre me apunto cualquier idea que tenga, ya sea una frase o una imagen. Tengo un grupo de whats conmigo a solas para eso, muy cutre, lo sé (risas). A partir de ahí desarrollo esa idea, primero con sketch, luego con tinta y finalmente, color. Tengo varias carpetas con referentes de ropa y estilo. La estética de los personajes, el maquillaje y la ropa son muy característicos en mi estilo. Mi background haciendo fanzines ha influenciado mucho mi estética, así como las series, películas y cómics que he visto/leído. Me gusta mantener ese sello ‘rad’ en mis ilustraciones, sea para el cliente que sea. Quiero mantenerme auténtica todo lo que pueda.
Uno de esos procesos dónde se vio reflejado tu trabajo es en el cómic Un mundo hostil, en el que trabajaste mano a mano con la modelo Gakian. ¿De qué manera te inspiró aquella experiencia en tu carrera profesional?
Fue todo un viaje. Primero porque no nos conocíamos, solo de Instagram, y al trabajar juntas hicimos clic muy rápido. Parecía que su manera de escribir y mi manera de dibujar eran totalmente complementarias. Fue muy guay trabajar con ella. Aprendí mucho sobre cómo trabajar un cómic largo. De hecho, ahora estoy con dos a la vez y trabajo de la misma forma que aprendí con Gakian. Ella también me dio muchos consejos para confeccionar guiones y personajes bien trabajados. Es muy inspiradora.
En un ámbito que se nutre de la colaboración y el trabajo colectivo, ¿qué compañeros consideras referentes y de qué manera te inspiran?
Me inspira mi gran amiga Oh.Carol, nadie hace lo que hace ella, tiene mucho talento. Y Sergio Dosal, otro amigo ilustrador, que hace unos dibujos maravillosos. A veces me junto con Paula Grenouille y Andrea Diez, amigas ilustradoras que me flipa cómo adaptan su trabajo en diferentes formatos. Es muy importante tener una red de apoyo entre ilustradoras porque a veces no sabes gestionar algunas situaciones laborales. Otras ilustradoras, que no conozco personalmente pero que me encantan, son: Ema Gaspar, Anna Degnol, Anna Haifisch… Podría estar hablando días sobre esto, lo siento.
Tu trabajo ha traspasado fronteras, lo que te ha permitido colaborar en varias ocasiones con editoriales como The New Yorker, una revista con mucho renombre en Estados Unidos. ¿Cómo surge este proyecto?
Cuando me llegó el mail, pensaba que era spam o que yo me había apuntado a una newsletter, porque no concebía que fuese un encargo. Pero sí, y además dibujando la película Palm Springs, que me flipa. En ese mail me comentaron que me encontraron a raíz del poster del Memefest. Como decía, muchas veces es una cadena, si eres constante. Después de esa comisión ya es un cliente regular, he dibujado a Olivia Rodrigo, Barbra Streisand, etc. Es un placer trabajar con ellos, su metodología es muy ordenada y te dejan mucha libertad.
Después de haber trabajado varias veces en el extranjero, ¿cómo valoras la situación de la ilustración en España actualmente? ¿Crees que es una profesión valorada?
Uf, para nada. Es una batalla de desgaste, esa es mi opinión. Y ahora que viajo más y tengo más clientes internacionales, cada vez lo veo más claro. Fuera se paga lo que toca y no tienes que defender tanto tu valía. Es una pena porque en España hay ilustradores/as que son top y muchos desisten por las condiciones laborales. Da la sensación que no se valora, que en un proyecto es donde se va a bajar más el presupuesto y donde aprietan más en tema deadline. Ser freelance en España, además, es una vergüenza. Esto tiene que cambiar asap.
Además de diseños editoriales, también has realizado numerosos proyectos como el cartel para el Memefest, que tantas alegrías te ha traído, o una ilustración para la serie The Office en colaboración con Prime Video. Con proyectos tan diferentes, ¿cómo te adaptas al estilo y temática de cada creación?
Por suerte no tengo que adaptar mucho mi estilo. Si me encargan algo es porque buscan mi estilo en su comission. Obviamente me adapto a las necesidades técnicas del brief del proyecto, pero mi estilo no se suele modificar. He hecho cosas muy variadas pero suelo llevarlas a mi terreno, mis personajes y mi tono. Creo que es la gracia, que cada ilustrador aporte su toque en cada encargo.
Las redes sociales siempre son un buen altavoz para que muchos profesionales amplíen su audiencia e impulsen sus obras. En tu caso, ¿de qué manera consideras que las diversas plataformas online te han ayudado a expandir tu trabajo?
Les debería dedicar más tiempo porque es un hecho que las redes sociales ahora dan trabajo. La mayoría de mis proyectos los han visto más en mi Instagram que en mi web profesional. En Instagram, aunque ahora no es su mejor momento, es muy fácil hacer difusión de tu obra e interactuar. Tengo en mente hacer reels, me parece muy interesante como formato para mostrar un BTS, por ejemplo. Siempre que alguien me pregunta si debería hacerme una cuenta laboral, siempre digo que sí, sin duda.
En tu biografía de Instagram pone que actualmente has realizado una exposición en The Hoxton. Indagando un poco más he descubierto que es tu primera exposición en solitario y se titula The End Is Always Near, but Friends Are Always Closer. La manera en la que abordas la amistad femenina durante la vida adulta es muy interesante, ¿cómo ha sido el proceso y qué sientes tras ver el resultado?
La del Hoxton, de hecho, es la segunda parada de la expo; la primera, que fue el encargo original, fue en Seúl, por parte de la tienda/galería Prnt. Cuando me encargaron la expo no sabía cómo englobar mi trabajo bajo una temática. Pero al revisar mis dibujos vi rápidamente que es un tema al que siempre recurro, el de la amistad. En mis dibujos va de la mano lo bajonero que es ser adulto y la importancia de la amistad.
A medida que pasan los años, ves que el concepto de esta cambia, pero que realmente sin mis amigas no hubiese llegado donde estoy. Mis mejores momentos, con mis amigas; mis peores momentos, superados gracias a mis amigas. Y es la oda que quería mostrar en la expo, creando ese elenco de personajes, mostrados como si fuese una orla, o un ‘choose your fighter’.
A medida que pasan los años, ves que el concepto de esta cambia, pero que realmente sin mis amigas no hubiese llegado donde estoy. Mis mejores momentos, con mis amigas; mis peores momentos, superados gracias a mis amigas. Y es la oda que quería mostrar en la expo, creando ese elenco de personajes, mostrados como si fuese una orla, o un ‘choose your fighter’.
Además de la muestra, también has creado para la iniciativa Sento Forever el diseño de la tienda conceptual Utility. Me parece un emprendimiento interesante y me preguntaba si nos podrías explicar más.
Es un proyecto muy interesante creado por unas chicas de Tokyo, formando este team llamado Sento Forever. Buscan impulsar la cultura del sento, los baños públicos de Japón, y acercarlos a un público más joven. Ya que quizás cada vez están más en desuso. Así que crean alrededor del concepto ‘sento’ merch y eventos para unir lo moderno con lo tradicional.
Sento Forever casi cada año hacen esta collab con Utility, una tienda de Harajuku, y lanzan una colección de merch. Y ahí es donde entro yo: diseñando la imagen principal, y esta se adapta a cada producto. Le tengo mucho cariño a este proyecto porque me encanta Japón y Sento Forever cuida muchísimo la estética y el resultado final.
Sento Forever casi cada año hacen esta collab con Utility, una tienda de Harajuku, y lanzan una colección de merch. Y ahí es donde entro yo: diseñando la imagen principal, y esta se adapta a cada producto. Le tengo mucho cariño a este proyecto porque me encanta Japón y Sento Forever cuida muchísimo la estética y el resultado final.
Es de admirar la manera en la que gestionas tantos encargos a la vez. ¿Cómo logras crear un balance con tu vida personal? Imagino que en un trabajo donde tú misma marcas los tiempos a veces es difícil trazar límites.
Aún no he llegado a ese balance (risas). Antes era muy workaholic, ya que sentía una presión de que debía de llegar más alto, me comparaba mucho. Además la sociedad te impone unas metas, sobre todo a cierta edad. Eso hizo que trabajara demasiado, no cuidándome a mí misma. Ahora intento poner límites y disfrutar más de mi tiempo libre. Con terapia he ido aprendiendo a poner límites y a no forzarme tanto. Pero aún así, siento que estoy en un buen momento de mi carrera, así que sigo presionando un poco a veces porque creo que vale la pena, ¡pero solo a veces! Pero recalco que es muy importante poner horarios al trabajo, porque los freelance no lo solemos hacer. Y si no pones horarios, ni descansas bien ni trabajas bien. Mis amigas y mi pareja ya saben que estoy un poco casada con mi trabajo, lo siento.
Imagínate dentro de cinco años. ¿Dónde te visualizas?
Me veo viviendo en Asia una temporada, siento que ese capítulo aún no se ha cerrado. Me veo con varios cómics editados y, por qué no, haciendo merch tipo figuras. Y espero que todo en general vaya a mejor porque actualmente estoy un poco abrumada con todo lo que está pasando.