No hace falta ser un gran entendido en música para saber que desde hace ya un tiempo la escena argentina está capitaneando gran parte del género urbano. Y tampoco hay que conocer la escena minuciosamente para saber que una de las artistas que más está pegando, desde que con 19 años publicara su primera canción en su canal de Youtube, es la imparable Nicki Nicole. Solo han pasado 3 años desde su primer éxito Wapo traketero y ya cuenta con 2 álbumes, Recuerdos y Parte de mí, numerosos galardones por su trabajo e innumerables fans que esperan ansiosos su próximo disco. No hay fecha aún, así que habrá que estar atento.
Entrevista extraída de ACERO vol. 3, publicada en octubre 2022. Hazte con tu copia aquí.
Hace poco más de 4 años que Nicki se lanzó a publicar sus temas. “Eran las primeras canciones, no sé si era el mejor contenido del mundo, pero era el mío”, cuenta en esta entrevista. Y desde luego, algo tuvo que hacer bien, porque no pasó mucho tiempo hasta que Wapo traketero empezó a sonar en todos lados. Ahora está trabajando en su tercer disco, y asegura que no necesita tomarse ningún break este año porque lo que hace le gusta tanto que no quiere parar.
Aunque no hay fecha de lanzamiento para el nuevo traba- jo, parece que no será ya has- ta el año que viene. Lo último que hemos podido escuchar de la argentina fue la colaboración con su gran amigo Camilo en Naturaleza o su reciente single Nobody Like Yo, en el que se lanza a fusionar trap y salsa para hablar sobre las batallas internas que nos surgen a todos.
Nos cuenta que se siente más preparada para experimentar y probar cosas nuevas que antes no se creía capaz de hacer, y aunque nos cueste pensar que haya algo que se le resista, estamos deseando ver con qué nos sorprende.
Aunque no hay fecha de lanzamiento para el nuevo traba- jo, parece que no será ya has- ta el año que viene. Lo último que hemos podido escuchar de la argentina fue la colaboración con su gran amigo Camilo en Naturaleza o su reciente single Nobody Like Yo, en el que se lanza a fusionar trap y salsa para hablar sobre las batallas internas que nos surgen a todos.
Nos cuenta que se siente más preparada para experimentar y probar cosas nuevas que antes no se creía capaz de hacer, y aunque nos cueste pensar que haya algo que se le resista, estamos deseando ver con qué nos sorprende.
Hola Nicole, qué ilusión que formes parte de este número de ACERO.
Gracias a vosotros por hacerme un hueco.
¿Qué has estado haciendo los últimos meses? Has pasado el verano en España, ¿verdad?
Sí, así es. Principalmente he estado trabajando y disfrutando de Madrid y España en general. Aunque trabaje todo el tiempo, siento que cuando un trabajo te gusta tanto deja de verse como un trabajo y se disfruta. Así que vamos girando y atrapando veranos, porque ahora agarramos el verano de acá, después vamos a agarrar el verano de Argentina, después el de México, y así vamos.
¿Cuándo te planteas o tienes planeado hacer un break de vacaciones?
Bueno este año no planeo un break, porque no siento que me esté agobiando lo que estoy haciendo. Lo veo como algo llevadero y algo que disfruto.
¿Cómo y con quién acostumbras a pasar tus vacaciones? ¿Eres de esas personas que las pasas solo con amigos? ¿Sola con la pareja? ¿La familia? ¿Todos juntos? ¿Unos días con cada uno?
Casi siempre es con mi pareja (Trueno) porque es la persona que menos veo, ya que los dos estamos de gira y cosas así, entonces casi siempre el break lo pedimos al mismo tiempo para poder estar juntos. También me pasa que con mi familia me cuesta a veces porque somos bastantes y cada uno tiene su trabajo, su tiempo, en diferentes momentos. Aunque casi siempre me voy de vacaciones a otro lado, este año quiero quedarme ahí, en Argentina, que no sean vacaciones, que sea trabajo y disfrutar, quizás tener un día o dos de tranquis.
Qué chulo es cuando te gusta tanto tu trabajo que no te hace falta ningún break porque estás todo el rato disfrutando.
Claro, sí. Está bueno el equilibrio. Es lo bueno de la música, que te lleva a lugares relindos. Por ejemplo, estar acá en España, disfrutando a la vez que estás trabajando, no se siente como un peso, es un disfrute.
Totalmente, qué bien. Oye y lo que decías antes de la familia, tengo entendido que la tuya está muy implicada en el proyecto, sobre todo tu madre y tu hermana mayor.
Mi mamá y mi hermana mayor son parte del equipo, parte de todo lo que conlleva Nicki Nicole. Y después mis hermanos obviamente que son parte, pero no están involucrados como ellas.
¿Cómo es compartir tu vida profesional con ellas? ¿Es difícil desaprender las dinámicas de casa u os relacionáis de una forma distinta?
Es algo que a mí me da mucha seguridad, tener a mi familia en el equipo. Sé que ellas se involucran solo por el hecho del amor que hay en la familia; hay algo genuino en formar parte de un equipo para ayudar al otro: nace del amor y eso se nota. Me siento muy segura de tener a mi madre y a mi hermana, primero que son mayores que yo y saben más y tienen más experiencia, y sé que al confiar en ellas lo estoy haciendo bien. Además, que sean parte del equipo hace que pueda compartir con ellas un montón de momentos, de viajes, de shows, de cosas que quizás de otra forma sería más difícil porque tendrían otro trabajo. Es algo que noté siempre, que tener a la familia en el equipo hace todo mucho más llevadero. Obviamente a veces hay que diferenciar el trabajo de la familia. Hay que marcar bien, poner límites. No es lo mismo un consejo familiar que un consejo de trabajo. Por suerte creo que lo tenemos bastante claro, sobre todo porque las tres vamos hacia el mismo lado. Nuestro objetivo común es llegar a lugares de éxito en la música, así que no hay ningún problema.
¿Has crecido en un entorno que te animaba a dedicarle tiempo a la música?
Soy la más chica de cuatro hermanos, por lo que cuando yo era chiquita mis hermanos eran adolescentes y estaban en otra. Cuando pasé a ser adolescente, el que me sigue pasó a ser medio adulto, y los demás ya adultos. Y ahí es ya cuando se sintió todo más equilibrado, se empezaron a conocer los sueños de cada uno, y pudimos darnos el espacio necesario y el apoyo. Pero antes de eso, mientras uno no tenía muy claro sus sueños el otro estaba buscando otra cosa, no había mucha comunicación. Cuando les planteé que quería hacer música, que quería dedicarme a eso, el apoyo de mi familia siempre estuvo presente.
Claro, además no es que tu sueño fuera algo fácil, sino que es una profesión que conlleva un riesgo.
Sí, es muy difícil. Sobre todo en el momento que yo lo planteé. Tenía 17 años y le dije a mi mamá que iba a dedicarme a la música, ella seguramente pensó, a ver cómo le explico que tiene 17 años, que vive en Rosario, y que a muy poca gente le pasa esto. Siento que mi mamá se guardó muchas cosas y muchos consejos, simplemente sucedió. Quizás por lo que te digo, pensó que era algo temporal. Pero yo tenía eso en la cabeza y sabía que iba a llegar.
Porque, ¿cuál fue el punto de inflexión en el que dijiste, quiero dedicarme a esto el resto de mi vida?
En realidad fue creciendo progresivamente. Cuando empecé la secundaria de arte empecé también a involucrame mucho más en lo que tenía en mente. Como que antes era más un sueño. Me decía, esto no va a ser posible. Veía a mis grandes ídolos de la música y pensaba, es imposible que llegue a ser como ellos. Los veía como divinos, ellos nacieron para esto, yo estoy acá en otra. Mientras voy creciendo empiezo a rodearme de gente que vibraba igual que yo, con los mismos sueños, y al estar todo el tiempo pensando en ello empiezas a atraer un montón de cosas. Empecé a ir a las batallas de mis amigos y a nutrirme un poco de todo eso, y luego empecé a practicarlo yo también. Competí muy poquitas veces, nunca con el fin de ganar nada sino para divertirme. Con esos amigos luego nos juntábamos en mi casa y hacíamos freestyles. De ahí empecé a hacer canciones con amigos, empecé a divertirme y a dejar esa ambición de querer cumplir mi sueño. No solo dije, esto me gusta, sino que la gente lo veía. Cuando algo es genuino, un artista, una música, atrae mucho más que algo forzado. Empecé a disfrutar las canciones, a sacarlas desde el amor. Eran las primeras canciones, no sé si era el mejor contenido del mundo pero era el mío, saqué Wapo traketero y empezó todo.
Retomando esto de las batallas en Rosario que nos contabas, ¿era siempre con tus amigos, con gente desconocida...?
Se mezclaban mis amigos con gente que se sumaba. Muchas veces a las compes venía gente de otros lados, gente de Buenos Aires, nunca sabías quién te ibas a encontrar y eso era buenísimo. Cada fin de semana era un flow nuevo, gente nueva; estabas ahí pensando, a ver quién va a ir este finde, quién va a ganar este finde...
Para la gente que no esté en contacto con este tipo de escenarios, cuéntales un poco cuál es la dinámica.
Depende mucho de cuánta gente sea, son batallas que se hacen uno a uno o dos contra dos, depende de cada contexto. Y hay un jurado que decide quién se va y quién se queda. Quien tiene las mejores barras y cumple con casi todas las palabras que se les pide en cada batalla es el ganador. Y de ahí como que vas escalando. Vos ganás una compe, y quizás el premio es que quedás para la próxima competencia que es en Buenos Aires. Entonces vas a esa competencia para una nacional de RedBull que ya es otro nivel, y así vas subiendo, y te haces conocido. Además, es muy bueno que todo ese contenido siempre está en Youtube, y puedes ver a raperos desde su primera batalla a la última.
Me parece que este tipo de competiciones son escenarios como muy democráticos, en tanto que cualquiera puede subir y empezar, y ya depende de cómo lo hagas más de quién seas, ¿no?
Sí, las batallas lo que tiene de igualitario es que todos somos alguien, no que sube un don nadie y se vuelve alguien, es que todos somos alguien y las batallas lo muestran. De repente se suma alguien que va caminando por ahí y dice, ah, me meto, y la rompe. Eso demuestra que cada persona siempre tiene algo, tiene un don, puede hacer lo que quiera. Y también que con práctica todos podemos dominar lo que es el freestyle, aprender a escupir las palabras y que tengan un sentido, una dirección. Es cuestión de práctica. Obviamente siempre hay gente que saca muchísimo más, tengo amigos que dicen unas cosas que no entiendo cómo se les ocurren, y con la rapidez y todo.
En estas batallas rápidamente se va a lo personal, ¿no? Quiero decir, el diálogo que se tiene encima del escenario acostumbra a ser un poco faltón, y más de una vez he visto como no solo se habla o se responde a la parte musical del artista, sino que se pone en el foco aspectos personales de tu rival. No sé qué opinas tú de esto, ¿crees que hay cierta toxicidad en estas batallas? ¿Se queda todo encima del escenario y luego se abrazan entre ellos?
Nunca voy a entender si queda ahí o si es parte del freestyle. Creo que casi siempre hay códigos que no te puedes saltar. Hay cosas personales que se pueden decir y otras que no, hay límites. Y el público también pone los límites, porque si tiras una muy personal el público no lo va a recibir bien y te vas a la mierda. Por ejemplo, hay una batalla que yo miro siempre que es de Lit Killah y Sony que son muy amigos. Siempre que están en las batallas se tiran personales, pero como que no les molesta. Saben que van a joder con esto y el público también, y entonces todos se están cagando de la risa. Si no tuvieran esa confianza entre ellos siento que se recibiría de otra manera. Yo no estuve tanto por ahí, no entiendo tanto cuáles sí y cuáles no, qué duele y qué no. Siento que a mí me harían mierda en dos segundos (risas), soy súper sensible en lo personal.
Hablando de ese público ¿cómo llevas ser referente de la gente joven?
Por suerte lo llevo súper bien, la gente que le gusta mi música, que está ahí desde el día uno, siempre me ha hecho sentir súper cómoda. Obviamente en lo musical me encanta ser un referente, es un orgullo, pero también me gusta dejar claro que en lo personal no dejo de tener 20 años y que me falta mucho por recorrer y entender.
¿Cuáles fueron tus referentes?
Musicalmente siempre me gustó mucho Amy Winehouse, no entendía mucho en inglés al principio, pero había algo en ella y en sus canciones que me emocionaba. Y de ahí fui creciendo y empezando a escuchar más música, música de muchos amigos míos. No aprendía solo escuchando la música de mis ídolos sino también de mis amigos, qué hacían, cómo lo hacían, y con los sueños y la emoción que se siente cuando alguien hace algo que le gusta.
La escena musical argentina está creciendo cada vez más, comentabas que es como una hermandad. Bizarrap, Cazzu, Trueno, Duki... ¿Qué os ha unido tanto? Sois colegas además de compañeros de profesión, ¿no?
Nos llevamos súper bien. A veces es difícil porque cada uno está en una parte del mundo, pero siempre que encontramos el momento o alguno va a sacar un lanzamiento, siempre estoy ahí presente, apoyando en todo lo que pueda. Intentando ser ese conjunto de artistas que llevan la música a lo alto. Lo bueno es que no hay competencia, no hay maldad, todo se hace desde el amor. Es básicamente lo que pasó también cuando yo entré a la música, que ellos me dieron el espacio genuino, me enseñaron un montón de cosas sobre ser parte de la música, sobre apoyarme en ellos, eso se aprende. Y por eso hoy en día Argentina está donde está, porque hay muchísima música y la gente que lleva esa música detrás, no solo tiene un mensaje muy claro que va con la esencia de cada uno, sino que también todo es súper genuino.
Claro, y tener esta red de colegas y compañeros de profesión se convierten en una red de seguridad.
Exacto, hay mucho apoyo entre todos.
Oye, ¿y compartir profesión y pasión con tu pareja o hace más fácil o más difícil?
Más fácil para mí, siento que nos entendemos mucho, sabemos en qué consiste la gira, sabemos qué comporta estar haciendo música, reuniones. Al vivirlo los dos sabemos qué se siente y entendemos todo mejor.
¿Tenéis normas en casa tipo, no se habla de trabajo a partir de tal hora o algo así?
No tenemos normas como tal, pero se sabe que se habla todo de día, pero de noche ya no. Yo tampoco doy mucha respuesta a la noche, casi siempre estoy durmiendo, entonces creo que hay como unos horarios puestos sin hablarlo.
Has comentado varias veces lo importante y personal que es Parte de mí y en concreto la canción homónima al disco. Por lo que he visto por redes eres bastante cuidadosa con lo que muestras de tu intimidad, ¿cómo vives ese desnudo hacia el público? ¿Hay canciones que te guardas para no exponerte demasiado?
Siento que exponerme musicalmente no es algo que me incomode, porque si hay algo que da un mensaje que tiene un trasfondo es una canción personal como Parte de mí. Siento que cada persona que se identifica con esa canción es porque algo personal mío tiene que ver con algo personal de ellos. Siempre que sea musical la exposición no me incomoda porque ese es el fin: no solo que llegue la música a cada persona que me escucha, sino el hecho de que sepan que hay cosas personales que les pasan a todos. A veces cuando alguien tiene un problema siente que es el único que lo tiene, y yo intento con mi música, con canciones personales como Parte de mí, hacerle saber a esa persona que tiene una compañía, que tiene a alguien que quizás pasó por lo mismo en algún momento de su vida, que está ahí. Siento que los problemas se hacen más pequeños cuando sabes que a alguien más le pasa lo mismo.
Hablando de Parte de mí, aunque se decía que tu estilo era una mezcla de rap y soul, el último álbum que sacaste tiró más hacía el pop. ¿Cómo te definirías musicalmente hablando?
Sí, me cuesta un poco ir para un solo género porque me gustan varios, es algo como más versátil. Un día me gusta estar ahí en un género súper hip hop y al otro uno más pop. Lo bueno es que intento que mi estilo no se pierda, aunque el género cambie, seguir haciendo lo mismo.
¿Hay algún estilo de música que digas, seguro que esto no lo toco?
Estoy abierta a todos los planes, obviamente respetando las historias y defendiendo sus códigos. Porque hay géneros que tienen mucho tiempo y que vienen de mucha lucha, mucha batalla, que nacieron en base a mensajes fuertes. Si una persona tiene claro de donde viene el género, respeta sus códigos, puede hacerlo. Yo estoy abierta a lo que sea.
En breve tendremos nuevo disco, ¿verdad? Cuéntanos un poco sobre ello: estilo, productores, colaboraciones. ¿Tenemos fecha?
No sé si va a ser un álbum en sí, será un conjunto de canciones, pero no tengo claro en qué contexto, aún lo estoy creando. La idea es hacer muchísima música, enfocarme en cosas que siempre quise hacer y que ahora siento que estoy preparada para hacerlas. Porque como te digo, a la par que voy haciendo música voy descubriendo cosas personales, y algunas me gustan más y otras me gustan menos. Antes pensaba mucho en el qué dirán, y me afectaba mucho. Hoy en día, por suerte, ya he aprendido un poco más. Y he entendido que lo de los haters, por ejemplo, no es algo personal, son haters con todo el mundo (risas). Así que lo mío es hacer música que a mí me nace con el fin de que a la gente le guste y conecte. Y a eso voy.
Hace poco colaboraste con Camilo para el tema Naturaleza, ¿cómo surgió esto?
Nosotros somos muy amigos desde hace dos o tres años, nos juntamos en el estudio infinitas veces no solo con el fin de hacer una canción sino con el fin de aprender uno del otro y hacer música sin razón, sin finalidad. Aprender uno del otro y ya está. Y de ahí salió Naturaleza, que me encanta. Camilo se piensa cada detalle y eso me gusta mucho de él. Tanto la canción como el vídeo los disfruté un montón, una canción que siempre quise hacer y siento que al hacerla con Camilo me hizo sentir muy cómoda, aprendí mucho de él. Y que me invite a ser parte de ese álbum para mí es muy importante. Escuchar la canción y acordarme de cada momento de nuestra amistad es increíble. O sea que una canción tenga lindos recuerdos siento que ya es súper importante.
En Parte de mí, la mitad del disco son colaboraciones, ¿por qué es tan importante para ti? ¿Querías que fuera un trabajo casi colectivo o surgió sin mucha intención?
Me gusta colaborar con otros artistas no solo por el hecho de que una canción entre dos queda increíble, sino por lo que se aprende de la experiencia. Al colaborar con alguien no solo lo hago con el fin de hacer una gran canción sino también por todo lo que pasa antes. Estar en el estudio, conocer a una persona, aprender, intercambiar un montón de experiencias y pensamientos de cada uno y que de ahí salga una canción increíble. Siento que además es parte de mí, literalmente, el hecho de escuchar muchísima música. Hoy puedo escuchar a Mon Laferte y mañana escuchar a Rauw Alejandro, por eso también las colaboraciones son parte del disco.
Si pudieras escoger algún artista, vivo o muerto, para colaborar, ¿quién sería y por qué?
Hay muchos artistas, pero hoy en día Rihanna.
En la conversación con Julieta Venegas en Pogo o Nada, comentaste que envidiabas un poco cuando los artistas no tenían redes sociales. ¿Cuál es tu relación con ellas?
Me gustan las redes, simplemente siento como que ahora los malos comentarios son más directos que antes. Siento que antes se hablaba de ello en casa, este artista me gusta más o me gusta menos, pero ahora esos comentarios te llegan directo. Que no pasa nada porque alguien te guste más o menos, me refiero a comentarios más fuertes. A mí me ha pasado que solo con etiquetarme en algo ya lo veo, eso nos pasa a todos, entonces creo que llega de una manera mucho más directa. Y hay personas a las que les da igual, pero a otras les puede doler bastante.
¿Y con TikTok cómo te llevas?
Bien, me cuesta bailar pero me llevo bien (risas).
Hace unos meses se hizo viral una cadena de artistas que denunciaban que su sello, repres, etc., les presionaban para que hicieran contenido en TikTok, tanto contenido tipo bailes y demás, como que su música pudiera usarse para trends de esta app y hacerse viral. ¿Qué opinas de esto? ¿Crees que estamos ante un momento en que las redes dictan la creación, el contenido artístico?
Mmm, creo que no. Las canciones que hago las hago con el fin de que la gente las escuche. Me ha pasado que estén presentes en TikTok, que es genial para mí, pero siento que eso ocurre cuando a alguien le gusta la canción y le gusta bailarla y la sube a Tik- Tok y ya. Lo mismo hago yo con canciones que me gustan, y para eso uso la plataforma, para lo mismo que se usa Instagram y Twitter, para compartir el contenido musical que está por llegar. Y creo que TikTok también ha abierto un espacio para que se conozca nueva música.
Siguiendo más o menos con el tema de las redes, ¿crees que es necesario crearse un personaje artístico? Artísticamente te llamas Nicki Nicole, ¿por qué tomaste esta decisión?
Más que separar persona de personaje separo lo musical de lo personal. Siento que al separar esto, lo íntimo no deja de ser íntimo.
¿Dónde ves en 5 años a Nicki Nicole y dónde ves en 5 años a Nicole Denise Cucco?
Musicalmente hablando creo que girando, haciendo mucha música con una mente que ha aprendido muchísimas más cosas y con más experiencia. Y como persona lo mismo, aprendiendo de mí constantemente, aprendiendo de la gente que me quiere y que hace que todo mejore, rodeándome de esa gente que tiene buenas intenciones.
Toda la ropa y accesorios BIMBA Y LOLA, zapatos de la artista.