Quién se aventuraba a pensar que tras ponernos chulas para Al gimnasio en tacones, tendríamos que pillar pañuelos y llorarle al casi algo con Si me hubieras querido. ¿Qué decir? Las contradicciones de ser unas tías desquiciadísimas que rezamos a Metrika. Entre que me canta “tuviste que hacerme daño para ver si te quería” y “¿por qué no piensas en mí como yo te pienso?”, a mí ya se me ha corrido la máscara de ojos y me he preguntado un par de veces si hay amor sin dolor o, simplemente, es que el amor que conozco no es sano. No sé, chicas, @confesiones. 
Me parece tan fácil como esta tía nos sumerge en la oscuridad tan rápido. Su voz y el sinte, antes de que suene el reggaetón, nos tantea, pero una vez que peta, ya sabes que Metrika viene a soltar barras. “Tú te llenaste el ego al verme competir con una tia basicona alérgica a ser”. No sé si soy yo, pero esas percus me suenan a Arca. Qué experimental se viene el álbum y qué ganas de metérmelo por el culo –sorry, me pongo basta–. Los encargados de la producción de Si me hubieras querido son, de nuevo, D.Basto y se unen a la ecuación los chavales de Lowlight. Me gusta que la de Castellón se mantenga fiel a su productor de siempre sin dejar de tantear otros terrenos. 
La verdad que sobre este tema podría montarme un ensayo sobre cómo saber si un sadboy ya no te quiere, pero ya sabéis: consejos vendo que pa’ mi no tengo. Cátate el tema y después lloramos juntas.