En su último sencillo, Días que no duermo, Marta Berlín nos invita a sumergirnos en un viaje a través de la soledad y la incomprensión. Después de lanzar Los niños de antes y Lala lala, la madrileña adopta un tono mucho más melancólico para hablarnos de la vulnerabilidad humana. Pero, sobre todo, para hacer un testimonio de una de sus experiencias personales más profundas.
¿Cuántas veces te has sentido encerrado en un momento vital del que no podías escapar? Lo hayas vivido o no, entiendes perfectamente la situación. Y justo de esto va el nuevo single de Marta Berlín, de encontrarse a sí misma perdida en un espacio inescrutable, convirtiéndose en su verdadero statement sobre un momento de aislamiento y desubicación; todo provocado por vivir en un lugar del que no podía escapar.
Según la propia artista, crear esta canción le sirvió como un acto de catarsis en el que pudo canalizar sus emociones a través de la música. Aunque, como nos dice, “yo quería conectar con la sensibilidad de mi audiencia, quería trasmitir un relato que fuera auténtico”. Y así ha sido.
En colaboración con el productor William Zárate, el resultado nos envuelve a través de sintetizadores, elementos rítmicos y guitarras eléctricas que se entrelazan para crear una atmósfera llena de fragilidad, pero también de fuerza y de superación –igual su evolución como artista–. Veremos qué nuevas sorpresas nos trae en 2024.