Tu playlist de Spotify cobró vida el martes pasado en el Teatro Magno, y es que Los Xavales Awards se las apañaron para juntar a algunas de las caras más reconocibles de la escena en la misma sala. En los pisos de arriba, multitudes de fans abarrotaban el palco para no perderse detalles como las gafas de alienígena de Ralphie Choo o el movimiento de caderas de Julieta. En los camerinos, Darío Eme Hache fumaba mientras asimilaba que se había metido de lleno en la fauna del trap y había aprendido a pronunciar L’haine la semana antes. En el piso de abajo, Juanniko Banana se paseaba buscando una próxima víctima a la que interrogar. Hay cosas que solo pasan aquí.
Casi que da vértigo ver a Charlie y Tuti poniendo cara a un proyecto tan grande y profesional. Dentro de este equipo había caras bien conocidas por todos. María Escarmiento y Darío Eme Hache se ocuparon de hacer las veces de presentadores durante la mayor parte de la gala. Y como bien dijo él, una gala de música tiene que abrirse con música. La labor recayó en Julieta, que hipnotizó a un público especializado aun jugando fuera de casa. La cantera de nuevos artistas está más caliente que nunca, y eso quedó muy claro con la actuación de la catalana junto a las de Raul Clyde y Mvrk. “¡Murk, Murk Murk!”, vociferaban como coña al unísono sus hooligans desde los palcos. Por no hablar de lo surrealista de tener a El Bugg compartiendo fila con Mushka entre otros crossovers. ¿Quién sabe cuántas colaboraciones locas saldrán de estos encuentros?
Judeline, Ralphie Choo, L’haine, Dano, Mda, Natalia Lacunza… La lista de artistas que compartieron espacio-tiempo aquella noche es demasiado larga como para incluirla entera. Uno de los más galardonados fue Ralphie, que tras recoger los dos premios por Artista Revelación y Mejor Productor (María no tardó en hacer la broma de Ralphie Two), me confesó que no sabía si estaba más nervioso él dando el discurso posterior o yo entregándole el premio. Nuestra editora de música, Alexia, entregó el galardón a Mejor Álbum del Año, y aunque ya conocéis la debilidad que tenemos en esta redacción con Ralphie y su Supernova, al final se la llevó el tiburón canario, Cruz Cafuné.
En las entregas de otros premios participaron personalidades como Cypher, que se ocupó del Artista Revelación, o Dano, que se ocupó de entregar el premio a Mejor Portada a Cosas que brillan. No se fue sin dejar claro que casi se marca un Kanye West cuando vio que el premio a Mejor Productor no se lo llevó Gese Da O. El broche de oro se puso cuando se entregó el premio a Apuesta 2024 a Mushka, que minutos antes había salido a recoger el premio de su hermana en su nombre, pero no pensaba irse sin llevarse también sus flores más que merecidas. Qué envidia nos da la familia Farelo.
Después de toda la ceremonia llegaron las pizzas y después la farra, así que nuestros recuerdos ya se vuelven algo más borroso. Lo que sí podemos asegurar es que esta gala fue una celebración de la cultura, de nuestra cultura. Los Xavales ya dejaron claro en sus vídeos que esto es algo de todos, y si este es el resultado han valido la pena todos y cada uno de los “barras, gordo” que han podido soltar en estos cuatro años. Larga vida a la xavalería.
