Lil Mess

Mi nombre es Rodrigo, tengo veintitrés años y nací en un pueblo de León. Desde pequeño he tenido una clara pasión por la música, que me llevó a comenzar a componer mis primeros ritmos allá por el 2016. Todo esto acabó desembocando en 2019, cuando empecé a plantear mis primeros lanzamientos como cantante, y desde ahí hemos intentado ir subiendo el listón con cada trabajo que sacamos.
El proyecto Lil Mess se basa en una creación muy orgánica de la música y su riqueza está precisamente en la versatilidad de todos los palos que se tocan, y en el enfoque profesional que adopta a nivel industria.

Desde luego hay una notable evolución, no tanto a nivel de gustos personales o artistas que me referencian, sino en el planteamiento y la materia prima. La idea siempre ha sido explotar los recursos que tenemos en cada etapa al máximo para dejar el mejor producto. También me parece fundamental el poco a poco ir contando con un equipo sólido de trabajo que pueda llevar mi proyecto a perspectivas a las que por mí solo no podría. Me encuentro en el momento más creativo y motivante de mi carrera. Al haber conseguido abrir muchos nuevos horizontes con mis últimos trabajos, me veo en posición de crear proyectos gordos con los que siempre soñé.

Pienso firmemente que la música tiene que emocionar, y que cuando es banal pierde todo el sentido. Nosotros venimos del rap y sabemos contar cosas, redactarlas y hacer partícipe de ello al oyente. Las letras son uno de los puntos en los que más trabajo, supongo que, una vez más, sesgado por los artistas a los que admiro desde pequeño. Me gusta que las canciones cuenten una historia o hablen  de situaciones, de sentimientos, tanto positivos como negativos, o sin connotación directamente, pero que hablen de algo que en algún momento de tu vida puedas interpretar y sentirte involucrado en lo que se cuenta.

Desde luego ha sido el proyecto bajo el nombre de Lil Mess en el que más personas han trabajado, más horas se han invertido y que se ha planteado con más anterioridad a la fecha de lanzamiento. Tras sacar Las Kadenas (The Mixtape), sentí que toqué techo de alguna manera referente a mi público, los conciertos, etc. y vi necesario el planteamiento del calendario de 2024 con anterioridad. Necesitaba algo potente, visual y que musicalmente se viese como una declaración de intenciones de los grandes saltos que pretendo realizar como artista.
Además, cumple una función muy importante como presentación a todos los demás proyectos en los que hemos estado trabajando para este 2024, que verán la luz en nada. Todo esto, junto con un gran trabajo de las letras y las diferentes perspectivas que se narran referente al amor contemporáneo, hacen que el EP Casi cuerdo fuese la bala perfecta con la que salir tras más de ocho meses sin sacar música.

Las Kadenas era una espinita que teníamos clavada tanto mi productor P. Muff como yo. Como mencioné antes, nosotros somos hijos del rap y habían muchos sonidos actuales que consumíamos y que nos veíamos con la necesidad de tocar. Toda la wave del West Coast y la música de club que junta el hip-hop con dancehall y demás estaban muy presentes en nuestras vidas y queríamos hacer un proyecto basado en esto pero con una identidad, que creo que conseguimos sin duda.
Desde luego hay un abismo entre este proyecto y Casi cuerdo, supongo que también va de la mano de las etapas artísticas y del crecimiento que he tenido desde el lanzamiento de Las Kadenas, que me ha permitido realizar este EP con una visión 360. Respecto al cambio en el sonido, desde un estilo más rap hasta un sonido más desenfadado en ritmos de reggaetón, es algo que se ha visto con anterioridad en mi carrera. Que no me defina un género es algo que me gusta, quiero decir, esa capacidad de sumergirme y poder defenderme en cualquier género que me interese.

Para mí, el concepto del amor en la actualidad, y más para mi generación, es muy abstracto y muy plural. Desde siempre, el amor junto al odio han reinado el mundo y condicionado los intereses de la mayoría de las personas. Creo que el cambio generacional que estamos viviendo, aunque esté basado en la plena libertad, ha creado una incertidumbre en la identidad de los jóvenes, y esto se ve reflejado en las relaciones sentimentales entre ellos.
En este EP, me dedico a narrar perspectivas de ello sin intenciones morales ni de aprendizaje, solo mostrar mi realidad. No soy nadie para definir los estándares del amor, pero, creo que bajo mi experiencia y con los temas que trato, doy una perspectiva muy amplia en la que mucha gente se puede ver reflejada y puede paliar un poco esta incertidumbre. Respondiendo a la pregunta, es obvio que el amor puede dejarte loco, pero, ¿de verdad quieres vivir sin experimentar esta locura?

Efectivamente, es la visión más pesimista dentro del EP. Todo el mundo se ha sentido así alguna vez. La frase de Ozuna, aunque suene sorprendente, viene de una pura casualidad durante la estructuración de la canción, ya creada, ya escrita y ya grabada. Fue casi como una señal de que este tema tenía que ser el tema objetivo del EP, cosa que yo ya sentía, pero que se reforzó al ver la relación de la temática y los ritmos con el tema de Ozuna.

Trabajar con mi Glory siempre es un placer, me obliga a dejar de lado la visión 360 del proyecto y me pone a disfrutar la parte de la música al máximo. En concreto, este tema salió en mi casa en Madrid, en unos días que él andaba por la capital y quedamos para hacer música. Es genial porque, aparte de ser un chaval extratalentoso y eficaz, es muy divertido y dinámico meterte en el estudio con él. De este mismo día tenemos otra canción que en breves saldrá, que de hecho es un homenaje a uno de nuestros artistas favoritos, Chencho Corleone.

Este speech lo recita Camila, la pareja de Sito Miñanco, en la serie Fariña. Me gusta mucho porque habla de cómo una ambición desmedida puede alejarte de personas que te importan, o puede toxificar una relación en la que no están claros los roles. Me parecía una perspectiva muy interesante que tenía que salir en el EP, además de representar y referenciar a nuestro querido norte con este guiño.

No estoy seguro, pero diría que otras tres canciones mínimo. Para mí era muy importante que este EP no se hiciera ni pedante ni pasteloso, sino crudo y corto, dejando espacio a la libre interpretación del oyente. Estas tres canciones seleccionadas salieron naturales y pegadizas. Hablan tan bien de lo que quería hablar que, cuando iba naciendo cada una de ellas, sabía sin duda que eran las elegidas.

Considero muy importante en este punto de mi carrera que el público empiece a asociar mis trabajos a una estética, unos códigos y una identidad, cosa que consigo en gran parte a través de los vídeos, de ahí la idea de full EP video. El tema de las luces no solo da una visión global del EP (con el código azul que arrastro desde Bluebloy, de 2021), sino que también han sido utilizadas para representar los cambios de estado de ánimo de una relación. Donde más se puede ver es en el video de Más allá del celular.

Efectivamente, Euro y yo nos conocemos desde hace muchos años y desde el minuto cero hemos trabajado juntos. Musicalmente, los proyectos que pasan por él hablan por sí mismos. Es el mejor en lo suyo y los grandes de su ámbito le respetan y le tienen en cuenta. Más allá del sonido y la música, es mi amigo y una de las personas más profesionales y trabajadoras que conozco, que me ha ayudado a salir de varias mierdas que nada me aportaban y a enfocarme en mi proyecto musical, que es mi lugar en este mundo. Lo que puedo aportarle yo a él es parecido, nuevas ideas, perspectivas, contactos y un apoyo incondicional.

Visto lo visto, la gente está recibiendo este EP como ningún trabajo hasta el momento, lo cual me hace pensar que quizás de aquí salgan mis canciones más populares.

Para mí, determinado por los artistas que siempre he admirado, una carrera musical/artística de éxito, larga y duradera, debe cimentarse desde el principio. Está bien que el progreso sea paulatino y que vaya de la mano del aprendizaje, es la mejor manera para ir un paso por delante de lo que se te va a venir encima. Mi sueño es ser el número uno, influir en la cultura, unir tradición y vanguardia y traer a mi país nuevos sonidos, eventos y oportunidades. En unos años me veo trabajando a fuego como ahora o más, sin desperdiciar oportunidades, consiguiendo este sueño con la ayuda de mi equipo, amigos y familia. Esto solo acaba de empezar.