Seguimos enredaos en el B●Series23. El pasado viernes fue el turno de Leïti Sene: tan auténtico, descarado y rígido en postura y movimientos, que fue inevitable no pensar en este como uno de los conciertos más esperados del ciclo. El público se peleaba por acercarse al escenario y a nosotrxs, que lo vimos todo desde el segundo piso de Parallel64, nos pareció algo hipnótico. Modus vivendi activado, me dije: a ver en qué has pensado, Leïti.
No sabíamos qué esperar, ni qué íbamos a recibir. Pero se vinieron muchas cositas. Primero con la actuación sorpresa de Mushkaa, que tocó algunos de sus temas más conocidos como El tonteo, La bona vida o Sembla mentida, y otros sin publicar y de los que no soltó prenda ni de su título. Después vino Bexnil, productor y DJ de confianza, que promocionó el primer descansito de la noche pinchando canciones que iban de Lil Wayne a las propias de Leïti. Así, para caldear un poquito más el ambiente.
Finally, llegó la estrellona principal. Algo a destacar de su salida, lo pensé nada más ver la cantidad de personas que le estaban esperando, es que irremediablemente se flipó. O sea, ¡cómo para no hacerlo! Ver una marabunta de manos alzarse hacia el escenario tuvo que ser algo parecido a vivir entre apocalipsis, tipo se acaba el mundo llegan los zombies, y un subidón que te hace sentir que eres la hostia.
Leïti hizo un poco de todo, como siempre. Eso de mezclar y gestionar todo cómo le viniera en gana, coqueteando con el trap para llevarlo al dancehall, al afrobeat o al r&b. Durante el concierto, nos mostró todas y cada una de sus eras, de Tatimo mixtape a su último álbum Apocalipsi que publicó hace unos meses. Otra nota a destacar: su canción homónima Apocalipsi, que en el disco interpreta junto a La Zowi, y que aquí, aún sin ella, fue uno de los momentos más eufóricos de la noche.
El concierto acabó con la salida de todo su equipo, siempre acompañado de los buenos de CuteMobb. Desde luego vivimos un show que enmarcó a Leïti como gran potencia de la escena. Sobrio, auténtico y descarado. Pronto te damos más info de nuestra siguiente parada, pero te adelantamos que Ben Yart estuvo para darle de comer aparte.
