Acostumbrados a las grandes superproducciones, Anitta nos regala un documental auténtico donde podemos ver a Larissa. Una mujer nunca antes grabada sin la que la superestrella jamás hubiese existido. Para retratar a “una persona a la que quizás le quede mejor la vida grande que la pequeña”, pero que necesita ambas para seguir siendo ella. Ha contado con la dirección de Pedro Cantelmo, el primero en fijarse en la chica nerd e invisible del Gueto Honório Gurgel cuando ella tenía once y él trece años.
La película aborda la construcción de una estrella a través de la persona que la construyó. Una mujer sensible, enamoradiza y espiritual que poco tiene que ver con la imagen que los medios han vendido de Anitta y ella misma ha construido a su alrededor. Tan fuerte, ruda y sexual. La musa de Fenty que jugaba a hacerse vestidos con cápsulas de café es consciente de que el mundo es un negocio y teme al juicio ajeno. En sus trece años de trayectoria Anitta demuestra haber aprendido mucho pero Larissa sigue siendo la misma.
El reencuentro con Pedro es uno de los grandes temas del documental, ya que lo eligió para mostrar una cara imposible con alguien que la conociese como Anitta. En el proyecto recupera a su amor adolescente y los sentimientos por él, que quedan explícitos en escenas como la ducha que compartieron. Aunque finalmente no florece por su “capacidad de cortar las cosas cuando no las considera correctas” según el director.  Larissa está casada con Anitta porque es quien le ha dado la felicidad y no está dispuesta a renunciar a ella por ningún hombre.
Uno de los momentos claves de la película es su viaje a Nepal para trepar los picos del Himalaya. Ella siempre había soñado con ser la número 1 y pensaba que aunque muriese en la punta del Everest todo habría valido la pena. Porque cuando hablan de tus logros cuando estás muerto es cuando consigues trascendencia. Sin embargo, abandona el viaje a la mitad porque tiene miedo, porque es Anitta pero también Larissa. Es entonces cuando se da cuenta de que no tenía ninguna necesidad de llegar más lejos, que si seguía era para cumplir expectativas ajenas y llegar a mitad de camino le ha dado lo mejor de los dos mundos. Cuando llegas a la cima de una montaña pierdes oxígeno y desvarías, igual que con la fama. Su viaje es necesario como el de Ícaro, que si toca el sol derretirá sus alas y al caer al mar morirá.
Anitta busca en el documental aprender a ser feliz  si la fama y el dinero se van. Y decirle a su público que no necesitan ser famosos o ricos para ser especiales. Que como consecuencia, le han hecho perder cosas de su vida que disfruta como viajar sola o hacer amistad con desconocidos en los bares. Este documental es importante para sus fans pero sobretodo para ella, ya que le hace ser consciente de la persona que es y las múltiples caras que todos tenemos porque “no podemos vivir rechazando la mitad de lo que somos. Todos tenemos dualidad, no somos solo una cosa”. Ella va a “ser feliz aunque cualquier mierda pase” pero tú también puedes serlo.
ES_L-OOLA_Main_Vertical_4x5_RGB_PRE.jpg