Directita desde Argentina, ella es Lara91k, la artista que, año tras año y proyecto tras proyecto, está haciendo cada vez más grande su hueco en la industria. No se encasilla en ningún género, o en todos a la vez; traza su propio camino con una mezcla única de sonidos urbanos, rap, pop, R&B y más. "Si me gusta un elemento particular de algún sitio, lo agarro y trato de volverlo mío y jugar con eso", nos cuenta en esta entrevista. Hablamos con ella justo después del lanzamiento de su segundo álbum, 100PRE YORO, un proyecto que no solo muestra su evolución como artista sino también su posición como una de las voces del auge de la música en Argentina.
Desde su debut, Lara91k ha destacado por su capacidad para narrar historias que son tan personales como universales, haciéndonos partícipes a todos en cada una de sus canciones. La nostalgia la persigue, pero nos confiesa que está más presente que nunca. Aunque vuelva a poner la sensibilidad como bandera, con este álbum ha venido a pasárselo bien y a cumplir algún que otro sueño. ¿Aún no habéis visto las colaboraciones?
Lara, te entrevistamos hará cosa de un año. No paras de crecer y tu proyecto está subiendo cada vez más escalones. ¿Cómo has vivido este último año?
El último año fue muy interesante, de introspección, cocinar canciones, con un viaje a España que me dejó muchos amigos nuevos y ¡data! Un año de estar cerca de la familia y adoptar un gatito (risas). También fue el año en el que mostré por primera vez mis obras plásticas en una feria de arte en Buenos Aires llamada Arte Ba. Casualmente, una de esas obras es el cover art de 100PRE YORO. En resumen, un año muy movido, lleno de lindas experiencias.
Primero de todo, felicidades por el álbum y por la confirmación de tu actuación en el Primavera Sound en Barcelona este verano. ¿Cómo recibiste la noticia y cómo la acoges?
Feliz y contenta de empezar a sonar físicamente en España, y agradecida de que sea en un festival tan grande y piola como es el Primavera Sound. Con ganas de hacer mucha música por ahí. Actualmente me siento muy atraída y bastante hermana en la manera de hacer discos que tienen muchos artistas de España, sobre todo en la forma en la que encaran sus proyectos.
Has sacado tu segundo álbum, 100PRE YORO, que marca una nueva etapa en tu carrera tras el primer disco, Como antes. ¿Cuánto ha cambiado tu manera de hacer y percibir la música de ese entonces a ahora?
Crecí mucho a nivel compositivo y como productora musical. Es un disco que trabajé demasiado. Siento que Como antes tocaba mucho la nostalgia y también traía a una Lara un poco más volada en algunos aspectos (risas). De Como antes a 100PRE YORO hay un crecimiento enorme en el medio. Yo le llamo evolución de Pokémon, sobre todo por la sensación de conciencia en cada detalle de esta obra.
Tu propuesta, aunque tenga una esencia urbana, siempre ha fluctuado entre diferentes géneros. Después de tantos años has dejado claro que encasillarte no es lo tuyo. ¿En qué contextos te atrae apostar por un género u otro?
Creo que tiene que ver con ser hija un poco de la globalización, de haber escuchado músicas de todos lados. Casi que se me hace imperceptible saber a qué tierra pertenece cada género o subgénero. Me encantan los géneros musicales, pero se me hizo siempre un poco raro encasillarme en uno porque hay mucha música en mí. Simplemente, si me gusta un elemento particular de algún sitio, lo agarro y trato de volverlo mío y jugar con eso.
No te clasificas en un género, pero si hay algo que vemos siempre en tu propuesta es la cercanía y la crudeza con la que tratas las letras. ¿Dirías que este enfoque es lo más representativo de tu música?
Creo que lo representativo de mi música es, si de géneros se trata, justamente el aspecto que mencionaba anteriormente, el fluctuar de un universo a otro, la búsqueda constante de una paleta sonora, el ir cambiando. En cuanto a las letras, la cercanía creo que se genera porque trato de ser lo más sincera posible con las cosas que me pasan, y se vuelven muy personales en ese sentido. No hay nada que me dé más orgullo y amor que saber que la gente que me escucha siente las letras como si las hubiesen escrito ellos. En ese sentido me siento muy conectada con mi público.
100PRE YORO incluye ocho canciones, lo cual es algo conciso en comparación con los catorce temas de tu mixtape anterior y los veinte de tu álbum previo. ¿Hay algo detrás de esta elección? ¿Tuviste que seleccionar o condensar material?
Tenía demasiadas canciones, y en el proceso de ir eligiendo y entendiendo el disco, Facu (mi manager) y yo terminamos decidiendo hacer una pieza más concisa, un disco corto, entonces quedaron estas ocho canciones. Es loco porque hace una semana me di cuenta de que justo el ocho es mi número favorito y también el infinito (horizontal). He estado pensando mucho en el ‘100pre’ y en la cuestión de la durabilidad de las cosas. Lo eterno, lo efímero... Estuve pensando mucho en los insectos, que viven horas, o la medusa esa que vive en el mar de Japón que es biológicamente inmortal. Mi disco iba a llamarse el Álbum azul en un momento… Pero, en fin, en todas las letras se siente esta noción de mortalidad, y hay algo del ocho, del deseo de lo infinito, que me hizo flashear porque en ningún momento fue pensado.
No hace falta ser muy listo para intuir con el título del álbum que la sensibilidad es uno de los pilares. Háblanos del proceso creativo. ¿De dónde nace la inspiración?
La inspiración nace de todos lados. Voy a ponerme modo Rick Rubin (risas), pero de verdad, pienso que solo se trata de estar abierto, consciente, esperándola. Muchas veces parto de algo que me está desgarrando, como en 100PRE YORO, que es full letra real de algo que sentí, o en Nada mejor, que necesitaba sentirme en el mood de ‘está todo bien, si la vida es hasta acá no me arrepiento de nada de lo que viví’.
El tema con Julieta Venegas lo compusimos juntas y hablábamos de lo finito que es nuestro paso por el mundo. Con Javi Mena estábamos debatiendo sobre el amor libre, la monogamia, los modos vinculares y cómo los vivimos nosotras. En fin, hay de todo (risas). Hace poco agarré un librito infantil que tenía de chiquita e hice una canción con las frases que encontraba adentro. Me gusta mucho agarrar libros y buscar frases que me inspiren al azar.
El tema con Julieta Venegas lo compusimos juntas y hablábamos de lo finito que es nuestro paso por el mundo. Con Javi Mena estábamos debatiendo sobre el amor libre, la monogamia, los modos vinculares y cómo los vivimos nosotras. En fin, hay de todo (risas). Hace poco agarré un librito infantil que tenía de chiquita e hice una canción con las frases que encontraba adentro. Me gusta mucho agarrar libros y buscar frases que me inspiren al azar.
La intimidad, la melancolía, la sinceridad, el amor y el desamor juegan un papel central en el álbum. Dado esto, ¿cuál consideras que es el elemento o tema central que conecta todas estas canciones?
Lo que conecta las canciones es la voz de detrás, el cómo me atraviesan a mí las temáticas diarias y los problemas existenciales como la política, los movimientos sociales, etc. El ser una chica en el 2024, en el fin del mundo en Argentina, un poco cansada de la saturación virtual y un poco harta del capitalismo y completamente atrapada en él. Siempre digo que a veces me gustaría escaparme un rato de mi vida y creo que con las canciones puedo jugar un rato a eso. El tema central es la vida y la muerte.
En la última entrevista que te hicimos en ACERO dijiste: "Me cuesta un poco habitar el presente como algo especial, siempre cargo al pasado de una importancia extra". Aunque este LP también hable de la melancolía, ¿dirías que ha cambiado tu manera de percibirla?
Sí, la verdad que sí. O sea... es loco. Es difícil hacer lecturas de momentos pasados sin cargarlos de algo de fantasía o idealizarlos. Y hablo tanto de momentos que uno vivió como también aquellos que no nos tocó habitar. Por ejemplo, siempre sentí melancolía de la juventud de mis padres. Siempre me hablaban de eso y me contaban sus historias con un brillo en los ojos que yo empecé a comprar esa época dorada como algo increíble.
Amo la tecnología y todo lo que hago e hice en un pasado está atravesado por eso, pero también me gusta pensar en un pasado sin celulares, televisores o streaming. Una vida física en la que abstraerse signifique leer un libro. Ser un poco más dueños de nuestras vidas, armar los días con más posibilidades. Siento que ahora viene todo muy masticado. Si bien soy parte de todo esto, hay algo de este presente adicto a las pantallas que me da tristeza. De todas maneras, por fuera de eso, me siento en un momento lindo y con los pies sobre la tierra. Más en el presente que en el pasado o futuro.
Amo la tecnología y todo lo que hago e hice en un pasado está atravesado por eso, pero también me gusta pensar en un pasado sin celulares, televisores o streaming. Una vida física en la que abstraerse signifique leer un libro. Ser un poco más dueños de nuestras vidas, armar los días con más posibilidades. Siento que ahora viene todo muy masticado. Si bien soy parte de todo esto, hay algo de este presente adicto a las pantallas que me da tristeza. De todas maneras, por fuera de eso, me siento en un momento lindo y con los pies sobre la tierra. Más en el presente que en el pasado o futuro.
En la posición que te encuentras ahora, ¿qué crees que te diría esa Lara de diez años que componía canciones en Pinamar?
Mmm... Yo creo que estaría sorprendida por varias cosas, aunque a la vez lo tenía todo planeado. Por el nivel de exigencia que manejamos la Lara de diez años como la de ahora, también me cagaría un poco a pedos por las cagadas que me mandé hasta llegar hasta acá (risas).
Volviendo al álbum, la manera desenfadada en la que está escrito el título y las vibes de la portada nos reafirman que, aunque haya cierta melancolía, el divertimento sigue allí. ¿Qué nos puedes contar de esto?
Exactamente. A momentos a uno le puede dar cringe escribir canciones tan profundas e intensas. Lo de exponerse tanto y eso... En el dibujo encontré una liberación y una manera de reírme de lo que siento. También el hacer dibujos feos y encontrar una belleza en eso. Creo que la idea de hacer estos covers tan raw, impulsivos, sin correcciones, me hace sentir más liviana. Es un buen contraste y equilibrio para mí. Siento que las letras también tienen algo de eso, el ir por las profundidades y automáticamente cagarse en eso también.
En otras ocasiones has dicho que te gustaría cultivar más tu faceta de artista plástica. Volviendo a la portada, que es una pintura hecha por ti con aerógrafo, ¿dirías que ya has conseguido invertirle más tiempo a este arte?
No tengo tiempo para hacerlo, lamentablemente. Este año empecé con el mundo óleos y también a dibujar con lápiz, y le meto bastante, pero no logro poder dedicarle el tiempo que quisiera. Siempre tengo esa sensación de que quiero hacer más cosas de las que puedo. Tengo un proyecto de película y un libro estancados porque esta vida de música es demasiado protagonista.
La mitad del disco son colaboraciones, entre ellas, con Dano Ziontifik, Álvaro Díaz, Julieta Venegas y Javiera Mena. ¿Cómo te las has manejado para integrar sus estilos sin perder la coherencia y la identidad del álbum?
Cada caso fue particular. Por ejemplo, a Dano y Álvaro les mostré cada canción con el espacio del verso y los dos sintieron lo que yo ya sentía, y es que estaban hechos para subirse a esas canciones. En general, a mis discos invito a gente que admiro musicalmente de una manera obsesiva (risas), así que es muy orgánico el junte. Si bien son variados mis gustos, todos tienen mucho sentido con lo que yo hago.
En el caso de Javi Mena, soñé hacer esa canción desde el año 2011, que fue cuando la escuché por primera vez. Es una persona que me ha inspirado terriblemente en mi parte más cantautora y más indie. Tocaba sus canciones en la guitarra, lloraba escuchando Un audífono tú, un audífono yo. Yo vivía en la playa y mi llegada a Buenos Aires fue acompañada de salir del closet y enamorarme de mujeres, y Javiera fue un pilar a nivel letras para mí. La amo y es un sueño cumplido haber hecho esto con ella.
En el caso de Javi Mena, soñé hacer esa canción desde el año 2011, que fue cuando la escuché por primera vez. Es una persona que me ha inspirado terriblemente en mi parte más cantautora y más indie. Tocaba sus canciones en la guitarra, lloraba escuchando Un audífono tú, un audífono yo. Yo vivía en la playa y mi llegada a Buenos Aires fue acompañada de salir del closet y enamorarme de mujeres, y Javiera fue un pilar a nivel letras para mí. La amo y es un sueño cumplido haber hecho esto con ella.
La colaboración con Julieta Venegas, Un día, ha sido la más inesperada del LP. ¿Cómo surgió?
Con Juli fue muy loco. La historia es que yo hice con Duki Eres para mí, y en esa canción citamos no solo la frase sino la melodía del Eres para mí de Juli. Mi equipo consultó a su equipo si estaba todo bien y ella nos dio el permiso para usarlo. Para mi sorpresa, ella ya me seguía en Instagram y me firmaba las fotos de mi lanzamiento con Duki con corazones. Entonces dije: ya fue, voy a hablarle (risas).
Yo quería que ella se subiera a un remix del tema con Duko. Ahí me dijo que ella me escuchaba y le gustaba mi música. La imagen de ese momento era yo viendo en mi celular que Julieta Venegas me decía esto a mí, a Lara. En mi cara una enorme sonrisa de desquiciada y por dentro falleciendo (risas). Luego me la crucé alguna vez, y finalmente fuimos a su casa con Perci y Andy (mis amigos con los que hacemos canciones) y compusimos Un día entre los cuatro, con una guitarra, un piano y unos mates. Para mí fue una masterclass sobre song writing. Y bueno, de Julieta, qué decir. La amo, es una persona hermosa que hoy tengo el agrado de considerar una amiga nueva.
Yo quería que ella se subiera a un remix del tema con Duko. Ahí me dijo que ella me escuchaba y le gustaba mi música. La imagen de ese momento era yo viendo en mi celular que Julieta Venegas me decía esto a mí, a Lara. En mi cara una enorme sonrisa de desquiciada y por dentro falleciendo (risas). Luego me la crucé alguna vez, y finalmente fuimos a su casa con Perci y Andy (mis amigos con los que hacemos canciones) y compusimos Un día entre los cuatro, con una guitarra, un piano y unos mates. Para mí fue una masterclass sobre song writing. Y bueno, de Julieta, qué decir. La amo, es una persona hermosa que hoy tengo el agrado de considerar una amiga nueva.
Tras dos años seguidos sacando por San Valentín Romance Mixtape y Romance Mixtape 2, este año has apostado por no sacar el 3. Como ya has dicho en otras ocasiones, tu música sale del corazón y entiendo que mantener un patrón así cada año puede ser complicado. Aun así, te quería preguntar por qué este año no ha habido una nueva. ¿Se te han quejado los fans?
Yo saqué Romance Mixtape 1 en el 2021 y luego 2023 el volumen 2. En el 2022 se me juntó con el lanzamiento de Como antes que también fue en febrero, y este año, con este lanzamiento. Los mixtapes son mi marca registrada. Amo hacerlos. A los romances les tengo mucho respeto y los voy a sacar cuando lo sienta (perdón a mis fans, que sí se han quejado...) (risas). También tengo algunas ideas de otros mixtapes que vendrán que no solo van a tener que ver con las cuestiones del amor y el corazón.
Hace poco, también sacaste canción con Gianluca, nada de nada, que apostasteis por publicarla junto con la versión sped up. ¿A qué se viene esta elección?
Amo la versión sped up. Yo quisiera sacar toda mi música en speed up, Lara91k ft Alvin y las ardillas.
El auge de la escena argentina ya es incuestionable, pero este último año la presencia de mujeres argentinas en las listas de éxitos es más notable que nunca. ¿A qué atribuyes este cambio?
Porque las mujeres hacemos la mejor música del mundo, ¿qué decirte? Yo feliz de ver cada vez más chicas y menos chabones (risas).
¿Crees que tu identidad como argentina y mujer ha influido en tu carrera artística?
Sí o sí. Son las vivencias de una joven argentina con las cosas piolas y las dificultades que eso conlleva.
¿Qué otrxs artistas de la escena argentina o internacional te inspiran, y por ende, te gustaría colaborar?
En este momento me gustaría hacer música con Ralphie.
¿Qué más planes tienes para este 2024?
Mis planes para lo que queda del 2024 son algunos viajes que ya están confirmados, dos de ellos en España. Shows en vivo y a seguir componiendo, escribiendo y pintando en los momentos libres. Tengo ganas de viajar y de conocer lugares nuevos. También hacer algunos cruces en el estudio con personas que me enseñen cosas. Le pido a este año conectar y seguir en la línea de hacer las cosas porque me gustan. A seguir esa brújula digamos. Gracias por la nota, muy buenas preguntas, espero nos veamos prontito por allá.