La Pija y La Quinqui

Mariang: Yo, si puede ser, cerveza; pero en tercio.
Carlos: Pff, a esta hora del día, no sé. ¿Otra cerveza quizás?
Mariang: Qué más te da la hora. ¡Sabes que te pedirías un vino!
Carlos: Pues puede ser. Venga, yo un Ribera.

Mariang: ¡Uf! Pues yo soy rubia, ¿no? Y doy ganas de ir al baño (risas). Nada, soy bastante versátil, le gusto a los pijos y a las macarras. Eso es un poco la cerveza, ¿no? Ahora soy más pija, porque he dejado de beberla en…
Carlos: ¿En lata? (risas).
Mariang: No, ¡eso sigo aún! He dejado de beberla en doble, ahora la bebo en tercio. Para que no se me quite el overlip del labio, que en Madrid los baños siempre están alejados de las mesas y si no te pegas cinco viajes.

Carlos: Pues… yo soy un Ribera porque, uno, luce pretencioso pero, dos, le gusta a todo el mundo. Y porque es así como dulce, agradable en la lengua, y un poco plano.

Carlos: Sí. Si el Ribera fuera un color, sería el beige. Y yo también.

Mariang: Yo tengo muuuy claro que Carlos va a vivir en algún tipo de cosa sacada de una exposición del Zara Home. De hecho, va a vivir en un escaparate de Zara Home. Y también va a llevar una mochila excesivamente cara para lo que es y para la capacidad de litros que tenga, con su Mac dentro. Y va a tener un marido, a menos que el PP gane las elecciones este 23 de julio, en cuyo caso solo tendrá un amigo especial (risas).
Carlos: ¡Un compañero de piso!
Mariang: Sí, y un perro. Y, ¿a qué se va a dedicar…? Pues creo que va a seguir en la comunicación, pero no sé si seguirá siendo la cara visible de los proyectos.

Carlos: Pues yo, curiosamente, ¡creo que va a acabar igual! O sea, no con una casa del Zara Home ni con algo tan beige…
Mariang: ¡Sino debajo de un puente! (risas).
Carlos: No, pero si te veo casada y con hijos. Creo que vas a acabar teniendo una vida supertradicional. Que con esto tampoco digo que te vayas a dedicar a fregar los platos y a hacer la comida, ¿vale?
Mariang: ¡Me quiere pasar a su team!
Carlos: Te vas a pasar tú sola (risas).

Mariang: A mí realmente, lo que más me gusta de esta canción es la portada.
Carlos: Sí, con la fuente esa que tiene un ratón. Estilo Cenicienta.
Mariang: Sí, y con el chándal con la corona. Aunque la corona en la foto de la portada parece como pegada, ¿no?

Carlos: Totaaaal. ¿Por qué no tiene esa fuente Instagram?

Mariang: Creo que nosotros somos un mood generacional y, precisamente por lo que dices, hemos cubierto un nicho que estaba desatendido en la comunicación. Y lo segundo es que nuestra generación, la Z (o los millenials tardíos), estamos cansadísimos del positivismo liberal porque sabemos que hay gente viviendo en realidades sociales en las que no pueden ni proponerse según qué objetivos. Dicho esto, creo que somos una generación muy nihilista y eso hace que quienes nos escuchan, empaticen.
Carlos: A nosotros, de hecho, nos dicen mucho eso de “cuando estoy mal, me pongo vuestro podcast, porque me siento identificado”. Incluso nos dicen que lo agradecen, porque nosotros estamos peor (risas). La gente pensará que estamos locas.

Mariang: A mí me jode tener novio, siento que soy mucho menos graciosa. 

Mariang: No se puede ser trapero y feliz, ¿no? Hay muchas cosas que son excluyentes. No puedes ser trapero y feliz, no puedes ser cómico y sobrio, no puedes ser actor y una persona normal…

Mariang: También te salva un poco Tinder, ¿no? (risas).
Carlos: ¡Pero no te salva, te lleva a un sitio peor!
Mariang: O sea, tú a lo mejor estás en Guatemala, pues Tinder es la sala de espera de ir a Guatepeor (risas). ¡Descargarte Tinder es como un periodo de entreguerras!

Carlos: ¡Qué buena! Me la sé entera. La mejor canción pop en España de este año, obviamente. No hay nada más que decir. Es que es muy muy buena. Encima es muy generacional la expresión, ¿no? Me he pillado de un chico en una fiesta, típico. Además, es mucho más divertida esa etapa previa a estar ya con el chico, creo. A mí me molesta mucho tener novio y no poder seguir llamándole ‘el chico que me gusta’.

Carlos: ¿Por qué? ¡Pobre Ana!

Carlos: Ya, pero bueno, todos queremos pensar que podemos arreglar a la persona que nos gusta. Yo creo que ella está en plan, venga deja a tu novia y vuélvete loco por mí. Es más, es que dice la letra “¡¡y que tu madre sepa que hay boda!!”. O sea, ¿lo loca que hay que estar para pensar que un chico con novia va a ser tu marido? Yo la apoyo (risas).
Mariang: Es verdad. Llega un punto en el que manifiestas tanto que ocurra, que ya es como, quiero que tú le hables a tu madre de mí. O sea, ni siquiera es que yo quiera estar contigo; sino que en esta fantasía que me estoy montando, quiero que en tu círculo cercano se hable de mí.

Carlos: ¡Autoestima! (risas). Y masculinidad.
Mariang: Yo también creo que tiene que ver mucho con la energía que proyectes. Y la energía masculina, la proyecte una mujer o un hombre, te salva de este tipo de situaciones. Esto lo hablamos con Nathy Peluso. A veces hasta depende de cómo ha respondido la vida ante ti en tu etapa formativa, tipo, ¿el chico que te gustaba en el insti te hacía caso? Eso define más quién eres como adulto que la carrera universitaria que elijas.
Carlos: Es como esto que dicen los tiburones, ¿no? Que hay quien tiene actitud de jefe y otros de empleado. Mariang y yo somos empleadas (risas). Hacemos por supeditarnos: sea a un repre, a una empresa, a una marca. En cambio, Rosalía crearía ella sola Spotify si pudiera.

Carlos: Pero su momento fue muy corto. Desde que empezamos el podcast hasta que empezamos a negociar con plataformas, pasaron como dos meses. Enseguida dejamos de ser indies para ser cerdas capitalistas (risas).

Carlos: Qué buena esta (canta). Creo que la pobre Zowi dijo que estaba hasta el coño de esta canción.
Mariang: Este tema es de los pocos que me llegan de La Zowi. Es la más escuchada, ¿no? ¿O es Filet Mignon?
Carlos: No, no. O sea, sí, esta es muy famosa, pero Filet Mignon no lo es tanto para nada.

Los dos: Sí.

Mariang: ¿Martiño?
Carlos: Bueno, Sebastián Yatra también viene de familia de dinero, ¿eh?

Mariang: Pues, sí, tienes razón. Nada, Martiño Rivas.

Carlos: Pfff… Yo estoy seguro de que Morad me vería y me odiaría (risas).
Mariang: Es complicado, porque como no somos un medio al uso, y por tanto, nos dedicamos a charlar y no a entrevistar, necesitamos sí o sí que haya un feeling. A mí hay gente que me gusta mucho y escucho, como Yung Beef, pero para nada creo que nuestro podcast sea su sitio.

Mariang: Yo me descargué Uber Eats. Y llego tarde a los sitios, porque voy en taxi, y nadie puede enfadarse por llegar tarde en taxi. Es una excusa brutal. Aunque hoy te juro que no era mentira, hemos llegado tarde porque nadie nos aceptaba el viaje (risas).
Carlos: ¡Es verdad lo que dices del tabaco! Pero lo más trascendental que me ha pasado es que sólo me meto en la cuenta a fin de mes para comprobar que he cobrado cosas. El resto del mes, estilo libre. 

Carlos: Yo creo que este año he desarrollado mucha mentalidad de empresario, me veo perfectamente capaz de tener un negocio. Me encantaría montar una cafetería y creo que se me daría muy bien. Aunque es verdad que esta semana he visto de cuánto sería la inversión inicial y ya no me ha parecido tan sencillo (risas).
Mariang: Yo vocacionalmente no he descubierto nada, pero sí siento que lo que estoy haciendo ahora es un posible puente para no sé qué. No sé si quiero estar alejada de los medios, pero desde luego no quiero estar focalizada tanto en ellos. Y retomar un poco lo que quería cuando terminé la carrera de Bellas Artes, dedicarme un poco más a la parte pictórica. 

(Risas colectivas).
Carlos: Oye, pues a mí sí me gusta esta canción.
Mariang: Yo creo que no me la pondría en Spotify, pero si suena en la radio me parece mona.
Carlos: Bueno, siendo sinceros, yo en Spoti no me la he puesto ni una sola vez (risas).
Mariang: Es que nosotros, casi que todo lo que llevamos trabajado, ha sido en radio. Entonces, al menos a mí me pasa que hay canciones que, si las escucho, me quiero arrancar la piel. Porque no paran de sonar, y esta es un poco un ejemplo.

Los dos: Sin duda, McAitana.
Carlos: Fuera coñas que yo en el McDonalds siempre pido la CBO, que es la hamburguesa de su menú. ¡Es que sabe a Aitana! Como la niña del vídeo que viralizó en Tiktok.
Mariang: Tía, ¿tú sabías que no se llama McAitana? Se llama McMenú Aitana. Lo de McAitana se lo pusieron en Twitter porque era más gracioso. Es más, ¿sabes que Carlos se comió el último McAitana del mundo?

Carlos: Cuando ya no había McAitanas, hice un pedido online de una CBO, y me llegó una con la caja de Aitana y con el extra de queso que tenía la McAitana. Es real, real esto, ¿eh?

Carlos: ¡Nunca se lo he dicho!

Carlos: Esto es un tremendo temazo.
Mariang: Pero un temazo total. Sale guapísima. Me encanta el outfit.
Carlos: Cuando salió, una de las cosas que más me gustaba es que la gente la llamaba cayetana. Me encanta que la gente además la criticaba por cayetana. ¿Cómo de fuera de onda estás para pensar que una cayetana viste así?

Mariang: ¡E Iggy Azalea cuando se hizo conocida fue vestida de Clueless! En Fancy.
Carlos: Fue la primera vez que escuché a Charlie XCX. Ahí me volví gay (risas).
Mariang: Es verdad que los códigos en España parece que sean o de raperas o raxetas. Y ella ha sido una cosa que no existía antes, que no es nuevo, pero que hasta ahora no hablaba español. Yo sinceramente no tengo ninguna opinión sobre ella, aunque me guste. Mi opinión está más basada en todo lo que he visto decir sobre ella. No debe de haber sido fácil recibir todos esos comentarios.

Mariang: ¡Por supuesto! Cuando apareció fue como, ¡por fin una semana donde no me cae la mierda a mí! (risas).
Carlos: El momento este de surgir de la nada y que todo el mundo la odie sin ningún motivo era como, soy yo literal.
Mariang: Que ella, luego, se ha echado un pulso para que la gente la odie. Pero de primeras no tenía porqué. Es verdad que su personaje sí lo pide, mientras que el nuestro no. Nosotros podemos no estar haciendo nada y la gente va a gritarnos algo tipo, “¡lo hacéis porque vuestro padres son RICOOS!” (risas).
Carlos: Mi comentario favorito fue el de que mi padre era el dueño de Navidul (risas). Porque como soy de Badajoz y Navidul es de Badajoz…
Mariang: ¡Dios santo, cuando digan que mi padre inventó el submarino porque soy de Cartagena! 

Mariang: ¡No es ninguna estrategia! De hecho, gracias a Dios que hay gente que entiende que lo único que hacemos es tener la misma conversación que puede tener cualquiera con sus amigos, solo que en podcast. ¿Hay fachas que nos dicen wokes? Pues supongo que sí, pero porque para un facha, ser chica ya es ser woke. Y por esa parte, siendo que vivimos en realidades completamente distintas, pues para qué te voy a llevar la contraria. No hay ninguna forma dialéctica donde tú y yo podamos entendernos. Por parte de los wokes... Es que para ser woke, directamente tienes que sacarte una oposición, para poder ser parte de lo que ellos consideran correctos. A Carlos y a mí nos ha pasado que al ser un gay y una chica, la comunidad de Internet (la peor comunidad autónoma del mundo) nos considera activistas solo por existir. Y nos presionan para defender todas las posiciones todo el rato sin margen de error. Equivocarse es un derecho que parece que ni Carlos ni yo tenemos.

Carlos: ¿Se ha leído acaso Judith Butler a Nathy Peluso? (risas).
Mariang: Y sinceramente, me parece un poco de llorica pensar que todo lo que tú consumas tenga que reforzar tu pensamiento ideológico.
Carlos: Hay otro matiz, y es que si hemos aprendido ya como sociedad que las mujeres están inscritas en un sistema de competición constante, ¡a los maricones no nos ha llegado aún! No hay nada que odie más un maricón que otro maricón al que le vaya bien. Esto es muy fuerte. Los maricones hemos cogido lo peor de la misoginia y le hemos hecho un remix. ¡Pero que a mí me pasa! ¡Que yo veo a otro gay en el trabajo y me indigno!

Carlos: La conozco pero no la había escuchado aún.
Mariang: ¿Es la última de Bad Gyal?
Carlos: A mí me gusta la frase de “cuando está dentro me llega al ombliguito” (risas).
Mariang: Ay, ¡a mí no me mola nada!
Carlos: Pero es que es verdad, es que sí se siente (risas).

Mariang: Bueno,¡es que está pasando últimamente con cada canción que saca Bad Gyal! A mí me pasó con Santa María.
Carlos: Todos dándole a la boquita y en dos semanas bailándola, amore. Santa María la odiaban solo los fans. Pero es que con las canciones de Bad Gyal pasaba mucho; temas como Zorra, las cantaba solo en concierto, ¡eso era increíble! Y recuerdo escuchar el tema en SoundCloud y empezaba con Bad Gyal diciendo: “¿Qué les decimos a esos tíos? ¡Esos tíos son unas zorras!” Y en ChaChá te ponían ese mp3 leakeado tal cual.

Carlos: A mí igual.

Mariang: A mí obviamente me gustaría hablar con Bad Gyal, pero creo que nuestro formato es muy loco y muy ruidoso. Lo dicho, no la ubico ahí. Una de las cosas que más feliz me hace del programa es que todo el mundo que viene se lo pasa genial. No sé si le pega.
Carlos: A mí entrevistarla me parece terrorífico. Mucha presión.

Carlos: Chulísima (canta). Chulísima.

Mariang: Tía, ¿sabes qué me pasa? Que no os lo creéis, pero es que La Pija y la Quinqui es un podcast hecho por y para Carlos Peguer y viene la gente que le gusta a Carlos Peguer (risas).

Carlos: Pero es que tú no escuchas casi música actual.

Mariang: Escucho música actual pero de gente que nunca vendría al programa: C Tangana, Yung Beef, Serrat me encanta, Antonio Vega… Bueno, Amaia un poco. Algo de Bad Gyal.

Carlos: Yo tampoco creo que sea tan del cero al cien, tampoco somos Aitana y podemos salir de casa.
Mariang: Hemos sido del cero al veintisiete (risas).
Carlos: Sí, ¿no? Como la generación del 27, nos vamos a morir todos ahora (risas). No, pero a mí realmente no me importa. Obviamente no me gusta que me llamen fea, pero no tengo ningún reparo en que mi vida sea pública y contar las cosas que me pasan, todo eso me da igual.
Mariang: Estuve pensando ayer justo en esto. Ponte que yo me hago híper mega famosa y de pronto vienen los fans y los paparazzis al aeropuerto a preguntarme. Pues, claro, yo no puedo contestar eso de yo no hablo de mi vida privada (risas). ¡Tengo que inventarme otra excusa!
Carlos: Hace poco estuve con Eva Soriano en el aeropuerto, y de pronto vinieron a preguntarle paparazzis sobre Maxi Iglesias y dijo, “yo no hablo de mi vida privada en medios, yo si quiero te subo una historia al Instagram, así que cuando me apetezca a mí contarlo, ya lo contaré” (risas).
Mariang: Claro, eso es. No hablo de mi vida privada en un sitio donde yo no maneje el esquema de luces. 

Carlos: Pues no nos gusta, pero lo somos.
Mariang: Ahora que trabajamos y queremos hacer dinero con marcas, eso supongo que por definición sí nos convierte en influencers. Pero sí que es cierto que el contenido que hemos creado previo a esta situación nunca ha pretendido ese rollo. Pero por definición, supongo que sí, aunque nos reviente.
Carlos: También te digo, cuando empiezas a ver lo que se cobra como influencer, a mí ya me da igual (risas).

Carlos: Si decir que soy influencer me paga el Starbucks, yo lo digo. 

Carlos: Qué buena, ¡qué temazo! Es su nueva era.
Mariang: Yo creo que prefiero Formentera o Berlín, aunque sea más pop girlie.
Carlos: Para mí la más chula es la de Igual. No es single, está dentro del disco. 

Los dos: ¡POR SUPUESTO!
Carlos: ¡Lo hemos intentado!
Mariang: Cuando le dieron a Chenoa la presentación de Operación Triunfo, yo puse un twit desde nuestra cuenta conjunta diciendo, ¡dadnos el chat! Y esa ha sido toda mi campaña.
Carlos: Yo he hecho una investigación, y están todos los puestos cubiertos. 

Carlos: Yo además soy embajador de Prime Video hasta fin de año y es como, tío, si ya estoy aquí, ¿qué más os da? (risas).

Mariang: Yo me vi la edición de 2017, pero creo que era hasta más fan que Carlos entonces. Iba a la universidad con el portátil a ver las puertas de la Academia desde el canal 24 horas incluso cuando no pasaba nada.
Carlos: Yo me ponía en el comedor de la residencia a ver el 24 horas también desde el móvil. La primera que vino al podcast de los triunfitos fue Natalia, pero el hype nuestro fuerte fue con la edición de 2017.
Mariang: Pero es que, sinceramente, y no quiero que suene a flipada, es que yo no siento ilusión por nada (risas). Nunca me he puesto nerviosa por un invitado.
Carlos: Es que tener a Rosalía, la cosa más tocha de todo el país, ya de primeras te cura de espanto… ¡Que no digo que las demás no sean increíbles!
Mariang: Y que nosotros grabamos el podcast después de la jornada laboral. Yo conforme termino de hacer el guión arriba en la productora, me bajo y hago la entrevista; sin parón. Entonces, a lo mejor no me pongo nerviosa porque no tengo tiempo para ello. Y eso hace que a veces no pueda cambiar el chip y esté literalmente muerta, me sentí un poco así con Sebastián Yatrá. No podía hablar, tenía un gripazo de cuarenta grados de fiebre y tenía que grabar en ese momento sí o sí.
Carlos: Es más, volviendo a lo de la exposición, nuestro último año de vida ha tenido tanta exposición y ha sido tan frenético desde que te levantas hasta que te acuestas que vamos en modo automático. 

Mariang: Pues sí. Pero no, no se puede contar. Y que sepas que nos lo contó una persona que nunca ha venido al podcast. 

Carlos: Me gusta mucho, aunque de ese EP me gusta más Promesa.
Mariang: A mí la que más me gusta es Vampiros. Y el vídeo es increíble.

Mariang: Rauw yo creo que sí. A mí me gustaría. ¡No metemos más porque nos matan! Nos dicen, “buah, ya habéis llevado a otro machirulo”. Y no es nada forzado, tipo, Diego de Carolina Durante es una persona que me cae genial.
Carlos: Y que ya no está de moda esa actitud de men hating, ¿no? Es muy 2016.
Mariang: No me metas a mí como podcast en tu mentalidad de odiar a los hombres, nunca hemos dicho eso.
Carlos: Bueno, a lo mejor sí lo hemos dicho alguna vez. Pero la gente se piensa también a veces que como llevamos a hombres de masculinidad ambigua, son maricones. Es mi prototipo de hombre, la verdad.
Mariang: ¡El mío es una lesbiana guapa!
Carlos: A mí curiosamente, todos los tíos con los que he estado implicados emocionalmente, son del tipo que la gente piensa,¿seguro que son gays? Porque son como heterobásicos de pensamiento, muy simples… Pero, sí, ¡claro que son gays, porque son mis novios” (risas).

Mariang: ¡Yo es que soy gilipollas! Porque cuando más hablaba del amor, era cuando no tenía pareja. Como no me acuerdo de lo que he dicho en el podcast no sé si estoy de acuerdo conmigo misma o no (risas). Pero ahora que tengo una pareja, tengo una perspectiva del amor más ignorante de la que tenía antes. Un poco al estilo del solo sé que no sé nada. Yo era muy teórica en el amor, porque no lo practicaba. Ahora no sería capaz de hablar de ello, no puedo ser tan sentenciosa.
Carlos: Yo lo veo igual. Antes era como, yo he pasado por todo lo que sé que es el no amor, así que sé que es perfectamente el amor por contraposición. Creía firmemente que sabía todo lo que lo articulaba. Y ahora que estoy volviendo a implicarme emocionalmente con hombres, me estoy dando cuenta de que no tenía ni puta idea. Totalmente de acuerdo con lo que ha dicho Mariang. Todo lo anterior salía desde la rabia, y ahora me estoy reeducando. Y no me está gustando (risas). ¡Era más fácil antes! Siento a veces que me estoy traicionando a mí mismo. 

Carlos: ¡Pero qué BUENA!

Mariang: A mí me echaron la culpa porque subí un pantallazo de una de las canciones de ella que no estaba regrabada. Y yo en plan, chico, está Taylor Swift pidiendo dinero en la calle solo porque yo haya subido este tema (risas).
Carlos: Y sobre esta canción, qué decir… Un clásico atemporal. Una canción que perdurará durante los milenios de la música. 
Mariang: Nunca se hizo nada así. Si alguien escucha esta canción y te dice, no me gusta, está mintiendo. Es la superioridad del pop. Te tiene que gustar sí o sí. 

Mariang: ¡Que se joda! (risas) ¡Haber hecho Lovestory! Aunque para mí, Blank Space es aún más pop perfection.

Los dos: Sí. Taylor Swift (risas).

Mariang: Pues, tía, nuestra empresa tuvo los cojones en su momento de decir, “os traemos a Harry Styles” (risas). Y luego dijeron, “y si no, ¡Miley Cyrus!”. Para ellos, tras conquistar a Rosalía, todo es posible.