Cinco bufandas del Humana fueron más que suficientes para que Pablo de Keperezaxiko creara una colección que llevara el blokecore a otro nivel. Y es que el CLEC Fashion Festival no solo ha brillado con el desfile del ganador, Gonzalo Villamax, sino que la colección del valenciano también sorprendió a todos gracias a su ingeniosa línea de vestidos creados con merchandasing vintage. Además, le ha dado un giro de tuerca al significado de las equipaciones deportivas y nos trae un lema para todos aquellos que nunca nos hemos sentido identificados con este deporte. ‘Si eres maricón, ponte la bufanda para meter el gol’, así lo dice.
Primero de todo, enhorabuena por KPX.FC, la propuesta que has presentado en el CLEC Festival, en la que elevas al máximo la tendencia blokecore mediante el upcycling, ¿cómo ha sido la experiencia y la acogida de la colección?
Pues si te digo la verdad, estoy muy contento con el resultado y la acogida de mi nueva colección porque creo que representa un Pablo muchísimo más pulido. He recibido la enhorabuena de toda mi gente y de la gente que no conozco, y eso es supergratificante como diseñador, al igual que todos coinciden en que se nota una evolución brutal.
Como bien nos has comentado, un día haciendo research en el Humana, cogiste cinco bufandas y se te iluminó la bombilla, hasta el punto de crear una colección formada por prendas deportivas. ¿Cómo visualizabas la idea en ese momento y como acabó siendo finalmente?
Pues fue por pura casualidad porque todo se desarrolló a partir de las cinco bufandas del Humana. Fue verlas e imaginarme el vestido que confeccioné para la primera prenda. Después de eso, le presté el look a mi amiga Yenesi y visto en su cuerpo fue cuando dije, de aquí puedo sacar una colección interesante. Y así fue. El resto de los looks fueron surgiendo sobre la marcha porque yo no boceto en papel y luego coso, a mí me gusta plantarme delante del maniquí e ir imaginando cosas sobre la marcha.
Este año la temática principal del CLEC Festival no ha sido otra que la sostenibilidad y el cambio climático. Y como se puede apreciar, el elemento estrella es la bufanda, presente en la mayoría de las piezas. ¿Es un guiño a la desglaciación? ¿Como si fuera una manera de reinventar estas prendas que lentamente dejaremos de usar por la subida de temperaturas?
Si te digo la verdad, ha sido pura casualidad, pero le ha ido al pelo porque creo que representa muy bien el cambio climático en el sentido de que un día hace muchísimo frío y al otro, muchísimo calor. Por esto puedes ponerte una minifalda y un top cortito, pero de bufandas. Pero nada de dejar de utilizarlas, aquí he venido yo para traerlas de nuevo al mundo de la moda y a las calles.
¿Cómo se siente participar en un festival como CLEC? Es una oportunidad para presentar propuestas tanto de moda como de arte y música de una manera que ayude al medio ambiente. ¿Se vive más como una competición o como una puesta en común?
Poder participar en un festival como el CLEC es un privilegio. Poder presentar mis diseños en mi ciudad, con toda mi gente y en un sitio como es el Hemisferic, me parece un puto lujo. Les estoy muy agradecido por haber contado conmigo por segundo año consecutivo y que encima me hayan subido de categoría (risas).
En cuanto a lo de la competición, no lo veo de esa manera, es un festival que disfruto mucho porque he podido compartir pasarela con muchos de mis amigos y compañeros de sector como Lis Domínguez con Alineo Studio, Javier con Visori, Paola Cloquell, Ros Gasent, Alison Domínguez y alguno más.
En cuanto a lo de la competición, no lo veo de esa manera, es un festival que disfruto mucho porque he podido compartir pasarela con muchos de mis amigos y compañeros de sector como Lis Domínguez con Alineo Studio, Javier con Visori, Paola Cloquell, Ros Gasent, Alison Domínguez y alguno más.
Y ahora hablemos un poquito de lo importante y el epicentro de tu creación, los uniformes deportivos. Desde camisetas del Real Madrid hasta bufandas del Atleti, te atreves con todo. ¿Qué requisitos debe tener una equipación para que capte tu atención? ¿Qué tonalidades o símbolos te dan más versatilidad a la hora de crear?
La verdad es que nunca he sido muy de deporte ni del fútbol concretamente, por lo que no tengo mucha idea de esto (risas). Pero sí que es cierto que, a la hora de escoger las bufandas, he tenido preferencia por las que tienen muchos colores o escudos más especiales. A mi criterio, las antiguas son más especiales.
Eres capaz de hacer un vestido con cuatro bufandas del Barça, ¿qué otros atributos o características encontramos en estas creaciones? Algo que se aleje totalmente del sentimentalismo de la afición y que un hooligan sea incapaz de ver.
Pues lo principal a la hora de diseñar estas prendas es descontextualizar el elemento de la bufanda para poder construir otro totalmente distinto, pero sin que se pierda la esencia deportiva. El concepto de la colección es un poco la crítica de lo que simboliza el fútbol –masculinidad, hostilidad, fanatismo tóxico, etc.– y reapropiarnos de lo que se nos ha negado desde pequeños simplemente por maricones. Un ambiente en el que, por lo general, no nos sentimos cómodos desde mi punto de vista. Quiero que se entienda el giro de 180 grados a la hora de presentar una colección del fútbol deportiva sin perder esa esencia pero que choque a primera vista, para que represente algo distinto.
Vemos mucho diseño retro en los elementos que fusionas. ¿Qué décadas son tus favoritas en la moda deportiva? ¿Tienes preferencia por lo vintage o te centras también en las prendas actuales?
Como te comentaba antes, yo trabajo por moulage, es decir, diseño sobre el maniquí, por lo que no tengo mucha preferencia a la hora de escoger la prenda, simplemente veo algo que estéticamente tiene potencial y me pongo a crear. En esta colección hay bufandas de distintas épocas, al igual que en mis diseños anteriores, que hay prendas de todo tipo.
A modo de pastiche, juntas bufanda tras bufanda y acabas creando unos pantalones con flecos por ejemplo. ¿Sigues un patrón a la hora de colocarlas o es más aleatorio, algo que delegas en el subconsciente?
Hay algunas prendas que no hago por moulage sino que cojo los patrones base y los transformo, como es el caso del pantalón o la bomber oversize. Pero el orden de las bufandas sí que es algo que voy decidiendo sobre la marcha.
Tu conexión con el festival va más allá de la moda sostenible, se celebra en tu tierra de nacimiento. ¿Cómo ha influido la moda bakala en tu estilo, concretamente en la línea de esta colección?
Como buen valenciano siempre llevas un poquito en la sangre el estilo bakala, que es algo con lo que se me ha encasillado todo este tiempo, pero creo que en esta colección me he alejado un poco de esa corriente. Aunque siempre me queda algún toque, la cabra siempre tira al monte (risas). Hacer un colección inspirada o más enfocada a los bakalas es algo que tengo pendiente.
Vamos a preguntar por lo no evidente, por los referentes que no son tan perceptibles para nuestro ojo pero que sí lo han sido para el desarrollo de tu creación. Veo mucha influencia de la moda preppy, que va un poco de la mano con tu anterior colección, Kepereza Hoe School.¿De qué otras corrientes se nutren los corsés y los vestidos palabra de honor?
Aunque cueste mucho de creer, como diseñador, no soy muy seguidor del mundo de la moda, marcas o corrientes. Me considero más artista en ese sentido, ya que no tengo tantos conocimientos sobre ello, por lo que no me he inspirado en algo conscientemente. Posiblemente haya varias corrientes reflejadas en mis diseños pero tampoco sabría decirte cuáles son.
Centrándonos en el footballcore, la tendencia que lo está petando y ha dado alas a tu proyecto, podríamos decir que Bella Hadid revolucionó Pinterest con sus adidas Samba y Rosalía lo petó aún más con su collab con el F.C. Barcelona. ¿Qué otras figuras han sido necesarias para entender el auge? Algo o alguien que haya sido un reset cultural para que estas prendas se instauren en el armario de cualquiera, independientemente de si les gusta el deporte o no.
Siento desmerecer la influencia de estos dos pedazo de mujeres, pero para mí siempre será antes Dellafuente, que sacó una colección de chándales de futbol en colaboración con Nike. Puedo decir que ha sido un poco la inspiración en el nombre y en el tema de las bufandas, elemento muy característico como parte de su merchandising.
¿Qué otras tendencias o modas actuales, que jueguen con la moda cíclica, te tienen obsesionado? Y, por el contrario, ¿cuáles no veremos en ninguna de tus futuras creaciones?
El denim es algo que siempre me ha vuelto loco, por lo que tengo muy pendiente hacer una colección, podría dar mucho juego. Por el contrario, algo que nunca veréis en mi marca van a ser vestidos de cocktail, bodas, bautizos y comuniones (risas). Es una forma de hablar, pero creo que me alejo totalmente de esa estética que se encasilla en lo elegante, lo fino y lo políticamente correcto.
Para ir finalizando, no todo el mundo puede decir que Karol G ha llevado una de sus piezas, y menos en un evento como la Superbowl de Rihanna. ¿Cómo se digiere una experiencia así? ¿Suben mucho las expectativas en cuanto a objetivos y metas?
Lo de Karol G surgió de repente. No tenía ninguna expectativa, ya que sabemos que muchas veces los estilistas piden muchas prendas para hacer un fitting y luego nunca sale nada. Entonces yo presté esta falda como el que juega a la lotería. A la semana siguiente estaba en mi cama sin poder dormir y vi un tweet de que era la Superbowl, fui a comprobar que no lleva nada mío (risas) y me quedé a cuadros cuando comprobé que sí que llevaba una de mis faldas. Como diseñador y como persona es algo muy gratificante, es indescriptible ver que a una artista de ese calibre le haya gustado una pieza tuya y la haya elegido para llevarla en un evento como fue la Superbowl de Rihanna. Te da mucha seguridad y expectativas en cuanto a objetivos futuros, pero no me ha sacado de pobre (risas).
Y por si te animas, me gustaría que crearas un lema propio, al igual que cada club tiene el suyo. Algo que resumiera el espíritu de la colección en una frase pegadiza.
Si eres maricón, ponte la bufanda para meter el gol (y si no, también).