Valenciano, joven, talentoso, algo callejero y ciertamente atractivo. Un puffer de Versace blanco y otro negro a cada lado, como dos angelitos. Snowyblack no es solo el nombre del primer álbum de Hecky, también es como el artista bautiza al movimiento cultural que quiere exportar al mundo (o eso dice su bio de Spoti). ¿Qué mejor forma para transmitir su filosofía que a través de la música? Atento, esta joven promesa de la calle tiene algo que decirte.
Trap, reggaeton y drill son los idiomas escogidos. Sonidos pesados y pegajosos son los que componen un disco que es oscuro, más por la ausencia de luz que por la densidad de las sombras. No hay muchos elementos que desentonen por lo agudo o lo positivo (salvo algunos toques ochenteros aislados, que predominan en los beats de reggeaton). Gracias a la producción de Skichi, Nake, Luay o pauet, Snowyblack logra una atmósfera general de seriedad, idónea para que el artista deje todo el peso en el mensaje. Recordemos que es un manifiesto, y las ideas tienen que quedar claras.
¿Y cuál es este mensaje que quiere presentar Hecky? La dualidad: la dureza y la fragilidad que se encuentra en su persona cuando tiene que hacer lo que no quiere hacer. Y es que, aunque se enorgullece de todo lo que está consiguiendo en tan poco tiempo y demuestra mucha confianza, lamenta los pagos que va a tenerle que hacer al karma por el éxito. Enmarcado en códigos callejeros, el flexeo y la vulnerabilidad, el reconocimiento y la soledad, son recursos temáticos constantes en el trabajo. “No me gusta no abrirme nunca, prefiero decirle que soy malo si pregunta” reza en Parties, Viajes y Conciertos #Molly2.
Y es esta última canción mi favorita, la que mejor representa el mensaje que quiere dejar y una de las que más matices aportan al álbum, al sumar elementos de sonido disco. En la letra, explica todo lo bueno que le está pasando a pesar del peso de la soledad del camino que eligió. Mencionar otros títulos que merece mucho la pena escuchar como Dónde estabas o El orgullo del Barrio, donde se luce con esa fluidez que le caracteriza. Otros nombres que aparecen y que reafirman el valor de Snowyblack son Yung Sarria, Dirty Suc o Jado Pvg entre otros.
Entonces, ¿te unes al movimiento o qué? Claros quedan sus preceptos: esfuerzo y estoicismo, pase lo que pase, sin que eso anule la realidad vulnerable que todos tenemos. Eso es Hecky, un diamante que no se rompe por fuera, pero que puede estar quebrado por dentro.
Track favorito: Parties, Viajes y Conciertos #Molly2.