Otaku de corazón y ferviente amante de la comida coreana, Tere, mejor conocida como Ganges en la escena musical, no deja de me- terse a nuevos fans en el bolsillo. Ya sea acompañada de Natalia Lacunza, con quien recorre la geografía española formando una de las bandas femeninas más celebradas, o en su proyecto en solitario. Con una propuesta que bebe del bedroom pop y nos lleva a mundos de ensueño, la cantante no deja de llenar salas y colgar el cartel de sold out. En ningún momento pensó que su single Nunca tendría tan buena aceptación entre el público pero, ¿acaso es posible prever cómo funcionará un lanzamiento? Con ella hablamos de las reglas del juego en la música y lo difícil que es hacerse un hueco, del efecto terapéutico que cocinar y la Switch tienen y de su última (y primera) colaboración con Nat, Pensar en ti.
Entrevista extraída de ACERO vol. 3, publicada en octubre 2022. Hazte con tu copia aquí.
Virgo, de tierra, y originaria de Santander, a donde vuelve siempre que tiene oportunidad para componer en su personal remanso de paz, la artista reconoce estar viviendo uno de los mejores momentos de su vida. Arropada por sus compañeras de banda en todo momento, Ganges avanza sin prisa pero sin pausa, disfrutando del camino y luchando por mantenerse conectada al presente. Algo muy difícil con una agenda en la que los conciertos se cuentan por decenas, y donde un sistema orquestado por Spotify mide tu calidad como artista cada vez que estrenas un lanzamiento. ¿Cómo hace para no perder el norte? Tere responde.
Ganges Aceromagazine 1.jpg
Full look PALOMO SPAIN.
Tere, estos últimos meses han sido un no parar para ti. Te hemos visto en infinidad de festivales, conciertos y bolos. ¿Te has parado a contarlos?
Me da mucha pena porque cada concierto es especial, la gente y los sitios, pero se me olvida hasta donde he tocado. Estoy siempre pensando en lo que viene, pero me lo paso muy bien. ¡Me encanta!
Si tuvieses que quedarte con una actuación del último año, ¿cuál sería y por qué?
El concierto de Cangas de Onís fue súper chulo. O el Covaleda fue de mis favoritos también. Vi a muchísimas caras conocidas, era como si todos estuviésemos allí. Me acuerdo de que el backstage era enorme, estaba lleno de músicos y amigos. El concierto salió súper bien, y tuvimos un poco de tiempo después para estar de fiestuqui. Eso me encanta, porque normalmente nos vamos al día siguiente y tenemos que retirarnos rápido.
Eso te iba a preguntar, ¿te suele dar tiempo a explorar los sitios en los que actúas? Aunque sea comer en la ciudad...
Comer sí, de hecho eso lo lidero yo (risas). Intento buscar sitios buenísimos y nos hemos vuelto un poco foodies, la ver- dad. Pero después, lo de visitar... normalmente supone sacrificar otras cosas. La siesta, por ejemplo (risas). A veces lo hemos hecho.
Dinos cuál de todos los conciertos que has dado en tu carrera ha sido más emocionante hasta la fecha.
Mmm, no lo sé, ¡qué difícil! El día del evento de presentación de Nunca me pareció extremadamente bonito. En los eventos la gente suele estar hablando de lo suyo o bebiendo, pero aquí sentí una atención sepulcral cuando empecé a tocar. Y tuve la sensación de que a la gente le gustó de verdad. Era la primera vez que tocaba Nunca, y es la canción que, con diferencia, más ha impactado. Recibo mensajes a diario con esa canción, ¡es una locura!
¿Y qué crees que tiene Nunca para que haya gustado tanto?
Recuerdo que era una canción que para mí no iba a ser ni single en principio, pero empecé a enseñársela a la gente y la reacción fue tan heavy que decidí que tenía que serlo. Al final, cuando haces canciones no tienes ni idea de cómo van a funcionar, pero con Nunca ha sido increíble.
¿Te acuerdas de la primera mala experiencia que tuviste en la industria musical? O si no mala, al menos chocante. Una hostia de realidad que te hiciese abrir los ojos repentinamente.
Hay una detrás de otra... Realmente no ha habido hostia como tal, porque para que la haya tienes que estar en lo alto. Como ha sido un proceso progresivo y todo era muy difícil, no ha habido hostia de realidad. He aprendido que cuesta mucho, la música es complicada. Hay mucha oscuridad en la industria, en cómo funciona todo. Tienes que saber muy bien las reglas del juego. Alguien externo necesita muchísima ayuda para meterse. No eres nadie casi nunca.
Si la industria musical fuese un partido de fútbol, ¿quién sería el árbitro?
Spotify (risas). A ver, no, en realidad la venta de entradas. Que la gente mueva su culo para ir a verte, eso es lo que cuenta.
Hablemos de cosas bonitas, ¿qué es lo que más te gusta de tu trabajo?
Componer y producir.
¿Y lo que menos?
Pues... montar y desmontar en los conciertos (risas). Lo odio con todas mis fuerzas, son momentos que deberían no existir.
Formas parte de una de las agrupaciones femeninas más celebradas de los últimos años, ¿eres consciente de ello?
Natalia nos integra en todos los niveles. Su concierto lo sentimos como algo grupal, aunque obviamente es suyo y todo gira en torno a ella. En el directo no es ella y nosotras, somos todas. Eso yo creo que es un plus, mola que nos llevemos tan bien y se nota ese energía. A mí me da un gusto, David, ¡yo soy feliz! Voy a un concierto y no lo siento como trabajo entre comillas, me lo paso genial.
Totalmente, es evidente el buen rollo que tienes con Natalia Lacunza, una de las portadas de ACERO vol.2. Cuéntanos, ¿cuándo os conocisteis?
Por una persona en común del mundillo. Ella estaba buscando a gente para hacer una gira pequeña. Yo era súper fan de Natalia. Quedamos y me sabía las canciones e hice un ejercicio de adaptarlas con todos los arreglos a piano. Llevaba toda la parte armónica, que ahora lo pienso y digo, ¡madre mía! El primer concierto fue en la Plaza de Toros de Murcia. Natalia es una persona muy cercana y a María Lázaro la adoro. Todo fue muy especial. El verano de 2020 fue increíble.
¿Sois muy diferentes? ¿Qué destacarías de cada una de tus compis?
Es curioso porque es como si fuera una serie de animación en la que cada una tiene su personalidad. Por ejemplo, Luz es súper ingeniosa, te meas con ella; podría ser monologuista. Pauli tiene un punto de locura, es una persona extremadamente dulce y de repente saca una parte salvaje, ¿sabes? Hace muchísima gracia, es muy libre y muy rebelde. Es una persona muy especial. Nat es una tía carismática e ingeniosa, tiene muchísimas facetas. Kat es muy distinta, me hace muchísima gracia porque es extremadamente práctica y le gusta que todo esté organizadísimo. Después, yo, que soy muy despistada y estoy todo el día riéndome.
Ganges Aceromagazine 4.jpg
Vestido CARLOTA BARRERA, top ALEJANDRE, pantalón TOMMY HILFIGER, joyas BIIS.
El mes pasado estrenabas tu esperadísima primera colaboración junto a Natalia, Pensar en ti. ¿Surgió de forma natural o llevabais mucho tiempo dándole vueltas a la idea de lanzar una canción conjunta? ¿Quién dio el primer paso?
Surgió de forma natural. Componemos juntas y funcionamos muy bien, somos muy rápidas y tenemos referencias parecidas. Esta canción se compuso un día en casa, porque a veces quedamos para componer.
Y entre tanto ajetreo, ¿en qué momento sacas tiempo para seguir trabajando en tu proyecto en solitario, Ganges? ¿Cómo te da la vida para todo?
Va todo como un poco a la vez. Natalia trabaja con Adri, que también es mi manager. Andrea, que va con nosotras de tour manager, también trabaja conmigo; entonces todo queda en familia. La gente que coordina las fechas de Natalia coordina las mías. Mientras estoy hablando con Adri de algo de Natalia, estamos comentando algo mío, así que no paro de hacer mis cosas. Lo de componer, que ya es una cosa más difícil, la verdad es que encuentro ratos. Tengo muchísimo compuesto, y es más organizarlo y ver cómo lo saco. Tengo muchísimas colaboraciones apalabradas con gente muy guay y no termino de quedar con esas personas porque, literalmente, no puedo.
Y cuando tienes un ratito libre, ¿te cuesta desconectar?
Mucho. Desconecto jugando a la Switch (risas). El Zelda es maravilloso, además lo estoy acabando.
A nivel físico, ¿hay algo que te ayude a conectar con el cuerpo?
Es una cosa curiosa, pero me gusta cocinar. Me encanta y a veces me deja en blanco. Cocinar y comer, el mundo comida, ¡es que estoy muy loca! (Risas). Me puede cambiar el ánimo comer algo que me gusta. Y cocinarlo, me encanta.
¿Qué es lo que más te gusta comer?
Hay varias cosas, pero la comida coreana me encanta y es muy desconocida.
Ahora que hablas de Corea, también hay una importante influencia asiática en tu música. Tu single Okinawa, o tu propio nombre artístico, Ganges, son buena muestra de ello. ¿De dónde viene esta pasión por Asia?
Siempre me han encantado el anime y el manga. En Santander te puedo asegurar que muy poca gente compartía mis gustos, estaba más sola que la una. Me acuerdo que no podía comprar ni mangas por Internet, me tenía que venir al Fnac de Madrid cuando bajaba con mis padres. La cultura del anime y del manga, cuando yo era niña, no existía. Me encantaba Sailor Moon y mi abuela me levantaba a las cinco de la mañana para verlo (risas). Si hubiera nacido hoy en día, me hubiese vuelto loca. Asia me encanta, Japón, Corea. Lo de Ganges fue una casualidad. Siempre me imaginaba como las dos G escritas, y me parecía bonito.
¿Podemos decir entonces que estamos ante una otaku? ¿Qué anime o manga es tu favorito?
¡Confirmamos! Mi favorito es este que tengo tatuado, se llama Haikyu!! Va sobre una cosa random total, voleibol. No sabía nada de este deporte, pero después de este anime tan bonito y emocionante, terminé viendo partidos en YouTube.
¿En serio? (Risas).
¡Te lo juro! Encima enganché a Juanjo, mi chico. El tattoo me lo hizo el año pasado mi amiga Mire, que hace handpoke. Lo dibujé yo y me lo hizo ella.
¿También dibujas?
Un montón, a Natalia la he dibujado muchísimas veces en versión anime (risas).
Y dinos, ¿qué podemos esperar de Ganges para finales de 2022?
Voy a sacar varios singles y un trabajo largo, que no sé si será un EP o un largo-largo, ya de cara al año que viene.
¿Algún sueño por cumplir?
 Pues, siguiendo la estela de Cariño, ¡tocar en Coachella!
Hablando de sueños, ¿con quién te gustaría colaborar para que desde ACERO hagamos un llamamiento?
Siempre digo una de broma y una real. La primera, con Blackpink. Y una realista... con Amaia.
¡Anda, una de las portadas del primer número de ACERO!
¡A ver si le llega el mensaje!
Ganges Aceromagazine 3.jpg
Camisa PALOMO SPAIN, falda y top GEORGES RECH.