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Con el frío no solo llegan las luces en los balcones, las compras de última hora y las galletas en frente de la ventana; también llegan planes distintos para aquellos que están en el limbo entre los que esperan con ansias a los Reyes Magos y los que de verdad traen los regalos. Una de estas citas es el Festival Reteena, que llega el 5 de diciembre a Barcelona con proyecciones y actividades frescas y diferentes. La imagen gráfica de este año abraza lo celestial y lo terrenal, como un angelito con cuernos, tal y como dice su creadora, Daniela Efe. El festival invita a celebrar las contradicciones que nos habitan, especialmente en esa etapa vibrante e incierta que es la juventud.
La octava edición del festival se celebrará hasta el 14 de diciembre entre la Filmoteca de Catalunya, el CCCB, la Nau Bostik y el cine Zumzeig. Como cada año, el equipo se reinventa y se renueva; lo que permanece es que los integrantes tengan entre diecinueve y veinticinco años y que su incorporación se decida mediante una convocatoria abierta, manteniendo así el espíritu libre y joven del festival.
La selección de películas viene fuerte y variada. Para abrir boca, Lesbian Space Princess, de Emma Hough Hobbs y Leela Varghese, trae una space opera queer con humor galáctico; luego llegan joyas premiadas como La misteriosa mirada del flamenco, de Diego Céspedes, con travestis, western, culpa y deseo; Pillion, de Harry Lighton, con Alexander Skarsgård y Harry Melling rompiendo esquemas sobre masculinidades; La chica zurda, el debut en la dirección de Shih-Ching Tsou; y la delicada Little Amélie, de Liane-Cho Han Jin Kuang y Maïlys Vallace, una adaptación de Metafísica de los tubos de Amélie Nothomb. Tampoco faltará talento local, que llega con Downriver a Tiger, de Víctor Diago, y sesiones de cortos de México, Colombia y Brasil, además de Sugar Island, una pieza onírica sobre cuerpo y colonialidad. Y el día 12, el CCCB vibra con cortometrajes de jóvenes menores de treinta y un años, todos elegidos por el propio Equipo Reteena.
Pero este festival no es solo cine, es un lugar para encontrarse, descubrir y pasarlo bien. La Nau Bostik, como siempre, será el rincón más gamberro del festival. Allí habrá una conversación con Llúcia Garcia, Mitch y Berta Pipó sobre Romería, el cierre de la trilogía de Carla Simón. También aterriza el creador y streamer Junior Healy con una sesión sobre terror pop, el cine slasher y los true crimes de serie B, acompañado por Sergio Dosal, y rematando con una proyección del clásico Los chicos del maíz. Y para culminar: edición especial de Habitació 910 con Jordi Chicletol, Alvie y dos invitadas de lujo: Fades y Anier; y por supuesto el mítico Bingo Cinéfilo, conducido esta vez por La Niña Delantro y Chloe Vittu, finalistas de Drag Race España.
El jurado de esta edición tampoco se queda corto: lo forman Sofia Esteve, avalada por los premios Goya, Gaudí y Málaga; Juno Álvarez, con una mirada queer, híbrida y experimental; y Nora Haddad, artista sonora con una sensibilidad única. Tres perfiles jóvenes, diversos y con ganas de premiar obras que rompan moldes.
También hay espacio para el talento emergente: el Laboratorio Audiovisual Joven sigue siendo una incubadora de nuevas voces entre diecisiete y veinticinco años. Allí participan tutores de primera línea como Sara Fantova, Gemma Blasco, Jaume Claret y Juan Palacios, ofreciendo talleres de guion, pitching, sostenibilidad y producción. La aventura termina con un pitching público frente a productoras como Filmax, Glia Films, Deliris Films, Pausa Dramática Films, Distinto Films, Fasten Films y Fractal, donde dos proyectos se llevarán premios de mil a quinientos euros.
En resumen, un festival que mezcla fiesta, reflexión, creatividad y mucha frescura. Un espacio para ver cine, descubrir voces nuevas, compartir contradicciones y celebrar el audiovisual con humor, purpurina y ganas de vibrar. Las entradas están volando y algunas actividades han colgado ya el cartel de sold out, así que date prisa y hazte con la tuya aquí.
