Si te perdiste Destrucción, lo siento, porque fue una noche épica en Astin. Organizada por Cardopusher, esta primera fiesta del club combinó de forma auténtica ritmos de breakcore y reggaetón. La noche arrancó con el mismo Cardopusher, que además de lanzar uno que otro nuevo single, llenó la sala. Luego, River Moon, la princesa rave de Ciudad del Cabo, nos hizo sudar a todos con su mezcla juguetona de electro-pop, ballroom y afrofuturismo. Para cerrar, DJ G2G remató la noche con su enérgica mezcla de géneros. En resumen, una combi completa.
Luis Garbán, conocido como Cardopusher y más recientemente bajo el alias de Safety Trance, ha recorrido un largo camino desde sus raíces en Venezuela hasta convertirse en un referente de la escena electrónica de Barcelona. Su estilo mezcla reggaetón, música industrial y un estilo icy wave, y ha colaborado con grandes como Rosalía. Su proyecto El alma que te trajo con Arca es un himno del reggaetón más experimental, y esta vez, en su debut como host de Destrucción, no decepcionó. La Sala 2 de Apolo fue el escenario perfecto para una noche en la que los géneros musicales se fusionaron sin reglas ni etiquetas.
Desde el primer momento, quedó claro que Cardopusher había preparado una noche con su sello personal: romper con las etiquetas de los géneros musicales. Empezó fiel a su estilo, con esos toques industriales y oscuros que lo caracterizan. Hizo una mezcla con Down de Drumcorps, que literalmente hizo gritar a toda la sala, y luego nos dejó con Puta, de Only Fire, donde el ritmo retumbaba. Después, mostró su faceta más Safety Trance con un estilo más reguetonero al sonar los remixs de Chulo (Bad Gyal) x Destrucción y Toy en nota de Tokischa, que nos hicieron mover el cuerpo sin perder la esencia de sus beats característicos: texturas retorcidas y sonidos fríos que creaban un ritmo ardiente. Para rematar, presentó su nuevo tema, Attitude, de La Goony Chonga.
A las dos de la mañana, River Moon se adueñó del escenario, y fue un momento épico. Esta compositora, artista y DJ, afincada en Berlín y conocida como la princesa rave de Ciudad del Cabo, no solo trajo su talento, sino también una energía que electrizó la sala. Quizás la reconozcas por su cuenta de memes @patiasfantasyworld. Durante dos horas, nos deleitó con un set lleno de sonidos juguetones, mezclando electro-pop queer, hip-hop y afrofuturismo con esos ritmos caóticos que son su sello. La sala estaba a reventar, y nadie quería perderse este show. Sonaron hits como Dolce & Gabbana That's On My Titties y Skeeyee. El momento cumbre llegó con un dub que hizo de La batería de DJ Gigola, cuando Namasenda apareció por sorpresa en el escenario. Luego, G2G tomó el relevo, entrando con su remix de Everything Is Romantic, de Charli XCX, y llevando la energía de la noche a otro nivel.
El productor y artista G2G, de origen danés pero con raíces uruguayas, es una de las nuevas promesas que irrumpió con fuerza, atreviéndose con ritmos eclécticos y un set que fue la culminación perfecta de la fiesta. Mezcló perreo, cumbia y guaracha, entre otros más difíciles de clasificar. Su estilo disruptivo superó todas las expectativas del evento, llevando a la pista a explorar terrenos nuevos, esos que rara vez se ven combinados. Entre los temas que sonaron, destacaron Rude Boy Tokyo Drift y el mítico Paleta x Faint, que encendió a todos en la pista.
Destrucción tuvo su momento, especialmente para quienes buscaban algo más experimental en la noche de club. Con un line-up muy bien curado y una vibra diferente a lo habitual, fue una gran oportunidad para ver a Cardopusher, no solo como DJ, sino también como creador de experiencias donde los géneros se fusionan sin miedo.
