En mayo de 2020, Marcos Crespo colgaba su primera demo bajo el nombre de Depresión Sonora. Lo que no podía imaginarse era que en tan poco tiempo sus canciones se escuchasen por todas partes e incluso se lanzase directamente a las giras con conciertos llenos de gente que se sabía sus letras.
Ahora en 2022 ha salido El arte de morir muy despacio, un disco con once canciones que mantienen su estilo tan característico, su sonido post-punk y sus letras melancólicas y reflexivas que tanto enganchan. Hemos hablado con él y nos ha explicado un poquito sobre las letras de su nuevo trabajo.
El arte de morir muy despacio relata traumas que se basan principalmente en la soledad “Un día de repente estás aquí y nadie te ha explicado cómo vivir”, “Abro la puerta, nunca ha habido nadie” o “Dónde están mis amigos, no veo a nadie en mi funeral”. ¿Todo esto tiene algo que ver con la idea de que la vida es solitaria en general?
Más con la idea momentánea que tenemos a veces de que estamos solos, que no hay nadie más, cuando realmente sí lo hay.
Las letras del disco me recuerdan o me transmiten, vaya, a la movida madrileña. No sé si tiene algo que ver con la desesperanza o el anhelo a ser libre tras una vida monótona. Al final es lo que buscas con tus canciones, ¿no? La libertad, bailar, aunque todo a tu alrededor se esté desmoronando.
Soy una persona que necesita del caos para poder ser, y dentro de ese caos se encuentra la libertad. Creo que es una respuesta a la vida que se supone que debemos tener, en la que sin vivirla sabes ya por dónde vas a pasar.
Pese a que tus letras son bastante contundentes en cuanto al tema sobre el que hablan, la melodía lo es incluso más. Si quitásemos la letra seguiríamos sintiendo el mismo tipo de sentimiento. ¿Por qué crees que sucede? Supongo que la elección del sonido no es casualidad.
Todo es un conjunto: las armonías, el aura, los colores, la letra. Todo está ligado entre sí para darnos a entender un sentimiento o una sensación. Las letras son muy importantes, pero tienen que convivir con el resto de elementos para que funcione de verdad todo ello. Es algo en lo que intento poner cariño, en transmitir con la música lo mismo que con la letra más allá de géneros o etiquetas.
En un momento de Fumando en mi funeral dices “fotos felices; generación triste”. ¿Crees que hoy en día con el auge de las redes sociales tendemos a invisibilizar nuestros sentimientos y nos centramos en aparentar simplemente felicidad? ¿Crees que es más fácil mostrarte como alguien feliz que exponer tus problemas?
Cada vez veo que pasa menos y que las nuevas generaciones se las toman de otra forma, pero sigue siendo un tema que me preocupa. Cuanto peor estoy, más acudo a las redes sociales para distraer mis pensamientos, y cada vez me siento peor consumiendo contenido vacío en el que todo el mundo aparenta felicidad cuando todo al final está formado por una escala de grises. Pero bueno la tristeza y otra clase de sentimientos no venden. Solo aquellos que se pueden capitalizar son los que se acaban exponiendo más.
Estamos acostumbrados a que las canciones tristes sean de desamor, pero realmente la tristeza es un sentimiento que va más allá. A lo largo de El arte de morir muy despacio hay una canción que habla sobre amor: Dos adolescentes y su primer amor. ¿El amor hace de la vida algo menos solitaria?
El amor rodea a todo en nuestra vida, de alguna u otra manera, sin tener que entenderlo como algo romántico. Creo que pocas veces se hacen canciones tristes que no hablen de desamor porque son sentimientos difíciles de identificar y hablar de ellos. En la canción que mencionáis utilizo el amor como forma de expresar esa gran primera decepción que nos marca en nuestra vida. Muchas veces es amorosa, por eso elegí el tema, para que fuera más identificable, pero muchas otras pueden ser de otras formas.
En Como todo el mundo hablas de una persona que, bueno, es igual al resto. Tiene sus ambiciones, pero como todo el mundo. Sin embargo, en un punto dices: “Feliz de ser como todo el mundo”. ¿Por qué?
Porque cuanto más me he centrado en ser el protagonista, el único, el especial, peor me ha ido y peor lo he pasado. Al final es fácil regocijarse en pensar que eres el único que le pasan ciertas cosas, que nadie te va a entender y que nada tiene solución, pero no es así. Cuanto antes entiende uno que no es especial, antes va a encontrarse a uno mismo y sobre todo a verse reflejado en el que tiene al lado. No pasa nada por vivir como un personaje secundario, por intentar ser felices a nuestra manera.
¿Qué crees que tienen tus canciones que hacen que tantísima gente pueda sentirse identificada? ¿Crees que las letras relatan pensamientos recurrentes?
Creo que son letras cotidianas. No son difíciles de entender y son situaciones que nos pueden pasar a cualquiera. No creo que todo el mundo se vaya a identificar, pero quien lo haga son canciones que te abrigan.
¿Qué te da el post-punk que no puede darte otro género? ¿Es quizás el sentimiento melancólico?
Es un género fácil de hacer y muy directo. No es agresivo como el punk, cosa que quería evitar y por supuesto, da mucho para darle un sonido lo-fi y darle un corte melancólico.
La sociedad actual está descantada, ¿la música puede ser la solución? ¿O, al menos, puede apaciguar ese desencanto?
La música es un reflejo de nuestra sociedad. Puede ser un refugio en muchos momentos y una gran acompañante. Al final la música nos rodea siempre y hay para todos los gustos, pero no creo que pueda llegar a solucionar nada.
¿Es más fácil identificarte con la felicidad o la tristeza?
Depende mucho del momento vital por el que estés pasando y la personalidad y tendencias que tengas. Más que en la tristeza me identifico con la melancolía y la nostalgia dentro de la música.
Si tan solo pudieses utilizar un concepto para describir el álbum, ¿cuál sería?
Un reflejo de etapas que me han llevado a vivir de la forma que vivo.
A partir de El arte de morir muy despacio supongo que habrá una lista de nuevos proyectos, ¿hay alguno que puedas revelarnos? ¿Algún concierto a la vista? ¿Gira?
Ahora mismo estamos con una gira por toda la península y el 23 de febrero cruzaremos el charco para dar una gira por todo Latinoamérica. Para lo que se viene después de esto ni yo lo puedo decir porque no lo sé. Me he quedado a gusto con el disco y queda disfrutarlo por ahora.