Antes del concierto y como es habitual, la gente se apelotonaba en la puerta de la sala El Sótano esperando entrar. Las pocas entradas que quedaban en taquilla se agotaron rápidamente y el ambiente de expectación se podía sentir en el aire. En la cola, un chico con una camiseta de I <3 Valencia auguraba en cierto sentido lo que iba a pasar en ese sótano oscuro.
La sala, llena; la música de fondo ahogada con las conversaciones y de repente, silencio absoluto, como si algo grande estuviera a punto de suceder. Y sucedió, ahí estaba Bluboi. Una especie de canto gregoriano hizo vibrar el suelo y encendió las luces azules mientras el humo llenó la estancia creando un ambiente… ¿místico? Pero de un segundo a otro todo cambió y la electrónica oscura se nos empezó a meter en el cuerpo mientras las cabezas siguieron moviéndose sonrientes al ritmo de Jove x sempre, su último álbum.
Sin pausas entre tema y tema el setlist abarcó casi todo su último álbum, pero también incluyó algunas de sus últimas canciones como Duele o Calambre que se iban fundiendo unas con otras en lo que parecía más un DJ set con micro que un concierto, eso sí, sin remixes ni colaboraciones. Con solo una voz distorsionada y una mesa de sonido lograron cautivarnos y detener el tiempo en un espacio teñido de azul láser.
Llegó la pausa para fumar, un interludio que cambió las luces de azul a rojo dando otra vez la bienvenida, pero esta vez nos recibió Ultralágrima. Voces que apenas articulaban palabras hasta que llegó la letra de Donde tú estás, música envolvente, y temas que avanzan todo el futuro que la banda tiene por delante, ya que solo con dos canciones publicadas han conseguido conquistarnos en poco menos de un año.
Un concierto que sin duda nos mantiene al tanto de todo lo que se cuece de nuevo en la escena valenciana. Hace apenas unos meses que entrevistamos a Xenia, resuenan también otros nombres como Rebe protagonista de ACERO Vol.3 o La Plata. Todos ellos han logrado emocionar y enganchar a una audiencia que está hambrienta de novedad y frescura. Sin duda, algo está cociéndose en Valencia, y aunque no podemos avanzar qué nos deparará el futuro, sí sabemos que hay una nueva generación de artistas que están dispuestos a romper con los esquemas establecidos y llevar la música a nuevos lugares.
