Soy un clásico nos dice Alizzz en esta entrevista que le hacemos con motivo de la apertura de la nueva tienda de Victoria en Barcelona, donde tuvimos la suerte de verle tocar. Hace ya tiempo que ha dejado de ser conocido por su trabajo con C. Tangana, para brillar con luz propia encima del escenario, pero también detrás porque sigue siendo uno de los productores más codiciados. Tras publicar Callaito, su último sencillo, Cristian nos confiesa que tiene ya nuevas canciones aunque no parece que haya nuevo álbum a la vista. Hablamos con él para que nos cuente qué podemos esperar de él en el próximo año, y qué hay detrás de ese sonido inconfundible, de esa búsqueda constante entre lo íntimo y lo bailable.
Este año has sacado un solo sencillo, Callaito, imagino que has estado más centrado en la gira de presentación de tu último álbum. ¿Sacas tiempo también para componer cuando estás de conciertos o prefieres hacer una pausa antes de ponerte a trabajar en las nuevas canciones?
Tengo unas cuantas canciones, pero aún no les he encontrado el nexo común. He estado un poco disperso este año, haciendo canciones para mí, girando y también muy centrado en producir y componer para otros.
¿Tienes algún proyecto nuevo entre manos?
Tengo varios discos en marcha como productor y una gira especial que me gustaría hacer en otro formato.
Te vimos el jueves tocando en la tienda de Victoria. Te hemos visto ya algunas veces en conciertos así chiquitos, ¿qué es lo que más te gusta de estos conciertos en pequeño formato? Imagino que la energía encima del escenario debe ser muy diferente…
Me mola que sea un momento particular, que suene peor y que el sitio sea más bizarro, hace que la experiencia también tenga un punto más único y normalmente más cercano.
Las zapatillas Victoria son icónicas en este país. ¿Las has usado alguna vez? ¿Qué recuerdos tienes con ellas?
Yo creo que mi generación todos tuvimos dos o tres pares de diferentes colores de las bambas de lona. Además, no solo siendo un niño, hubo aquel momento en el que los poppies del Primavera Sound las llevaban también, y me puedo incluir.
Vamos con tu último álbum, Conducción temeraria. ¿Por qué este título? ¿Cómo eres al volante?
Me gusta ir rápido, pero todo el mundo coincide en que conduzco muy bien, a mí me flipa.
Este segundo disco es mucho menos electrónico que el anterior, tiene un sonido más orgánico y es muy diferente a la mayoría de proyectos anteriores. ¿Qué te ha hecho explorar este sonido más pop? 
Es curioso, pero sobre todo las ganas de currar con otros músicos han hecho que todo suene más orgánico y también salirme del ordenador un poco.
Los dos sencillos que sacaste después del álbum, Mirando al techo y Callaito, son también bastante pop. ¿Te sientes más cómodo ahora con este sonido?
Supongo que es un péndulo, después de lo orgánico igual me vuelvo a la electrónica. Esto va así.
¿Qué has aprendido de este álbum que te gustaría trasladar a tu próximo proyecto? ¿Hay alguna idea que dejaste fuera pero que quieres retomar?
Si te digo la verdad, me vacié por completo al acabar el disco. De hecho, ahora estoy en un proceso de llenarme con todo lo que pueda y de aprender para poder seguir haciendo música y proyectos.
Mencionaste que aunque el disco cuenta con cuatro colaboraciones, había alguna más grabada que quizá salía en una versión extendida. ¿Podemos esperar esta versión? 
Ha pasado ya mucho tiempo pero quién sabe, los cajones están llenos de canciones en verdad. Da penita, me acuerdo de tantas canciones de proyectos que no salieron… hay varios hits por ahí metidos seguro y ninguno somos conscientes.
¿Qué canción de Conducción temeraria has notado que ha ganado fuerza al cantarla en espacios más íntimos?
Despertar es mi fav.
¿Si tuvieras que destacar un modelo de zapatillas Victoria, ¿cuál sería?
Siempre me han molado las C80, soy un clásico.