Explosivo, electrónico, trap, sincero y vanguardista: así es XXX, el tercer álbum de Albany que acaba de lanzar al completo. Inspirado en el universo de los videojuegos, su estética y sonido, la cantante se declaraba lista para superar lo que se le ponga por delante; eso sí, luchando con su propio avatar, un autotune punzante y un Pikachu que se deja entrever en las bases de estas canciones.
Si su anterior álbum, Se trata de mí, supuso un buscarse a sí misma, ahora Albany lo tiene todo claro. Es más, se ha visto capaz de anteponerse a un amor que no estaba a la altura y le estaba quitando las pocas vidas que le quedaban. Como dice en Videojuego: “Baby ya no estoy pa’ eso”, dice luciendo cual guerrera ninja cargada de shurikens hasta las cejas.
Con numerosas colaboraciones como la de Rojuu, Clutchill, Sticky M.A o Bon Calso y producciones de Kashlo, Razorade y Baby Jambo, Albany ha dejado de lado al sad trap para abrazar un sonido más agudo y estridente que la protege a modo de armadura. Lista para la batalla.