Discos

Grabu - “Time and again”
Todo lo que fuimos

Tras una pausa de dos años vuelve con su segundo álbum, una apuesta instrumental que evoca a la inocencia de la infancia y a esos tiempos pasados que no regresan.

Bempø - “Drac”
Desde la rabia hasta el amor

¡Feliç Sant Jordi! Como regalo, el barcelonés lanza un trabajo de cinco canciones donde la autenticidad y la vulnerabilidad nos invitan a explorar de cerca su propuesta.

Oques Grasses – “Fruit del deliri”
Para emocionarse hay que arriesgar

“Fruit del deliri” es un álbum que nos habla de lo esencial de una forma distinta, tocando estilos que no les habíamos visto tocar hasta ahora.

Foyone
La vulnerabilidad del ego trippin

Sujetando las puertas y dando la mano a todos los presentes, así nos recibe Foyone en la escucha previa a la salida de su nuevo disco.

Angelia Dhays – “Semilla”
Floreciendo

La vulnerabilidad es el eje principal del EP debut de la cantante, que con sonidos experimentales transmite la crudeza de la soledad y los comienzos, de sus luces y de sus sombras.

Ariana Grande - “Eternal Sunshine (slightly deluxe)”
El ying y el yang del querer

“Eternal Sunshine (slightly deluxe)” es un disco sobre el amor. Y sobre el desamor. Y sobre todo lo que hay en medio: las dudas, los flechazos, la vulnerabilidad. Lo vemos aquí.

Las Ninyas del Corro
Aunque la Ninya se vista de seda, Ninya se queda

Laüra y Felinna quieren reivindicar muchas cosas, pero mientras lo hacen se lo pasan muy bien en “Bitches in Business”, su nuevo proyecto, que acaban de presentar.

Teo Lucadamo - “Mi Puto Calor”
Vaya puto buen rollo

Poca vergüenza y sudapollismo: estos podrían ser sus ingredientes principales. De él y de su nuevo EP. Fresco y totalmente efectivo, lo analizamos aquí.

Goa
Vendito grunge

Lo pillamos en mitad de la gira de “Inmortal 2” y nos cuenta qué opina de sus álbumes y de cómo está la industria. También hablamos de él, claro. Entra y conócelo mejor.

Luna Ki - “Generación de cristal”
Dura como el diamante

La cantante se presenta sin su eyeliner característico, más cruda que nunca y cantándole a un futuro lleno de emociones. Ser Gen Z implica aceptar lo que sientes, y su último trabajo es un despliegue de sensaciones.